El Ayuntamiento pedirá que se soterren cinco kilómetros de la variante de la A-2

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Román muestra la propuesta de Fomento para la variante de la A-2.
Por: M.J.ESTABLÉS.GUADALAJARA
El Ayuntamiento presentará hoy al Ministerio de Fomento todas las alegaciones que han considerado oportunas al trazado de la nueva variante de la A-2 propuesto por el Gobierno. El pasado martes, el alcalde de Guadalajara, Antonio Román, explicó que su equipo de Gobierno se iba a poner al proyecto de Fomento, entre otros motivos, por la falta de accesos a la ciudad desde la autovía, así como por el “fuerte impacto medioambiental” que provocará dentro del término municipal de Guadalajara.
Por este motivo, Román, acompañado del edil de Urbanismo, Juan Antonio de las Heras, explicó las alegaciones a esta variante. El proyecto presentado por el equipo de Gobierno, que ha sido redactado por técnicos de distintas competencias del Consistorio, plantea, principalmente, la creación de tres accesos a la ciudad desde la A-2 –el nudo de Los Faroles y la N-320, el nudo del Hospital y el enlace de la R-2 desde Taracena–; disminuir el impacto medioambiental en la Cuesta del Sotillo soterrando dos tramos de la autovía y la ejecución de la variante de la N-320, donde se unirían los dos tramos de la misma desde el nudo de Los Faroles al del Hospital –según se establece en un proyecto realizado por el Ministerio de Fomento–.
En este sentido, Román aseguró que el proyecto propuesto por Fomento “no es una variante de la A-2 en el término municipal de Guadalajara, como dice su título, sino un nuevo trazado de 43 kilómetros para la A-2 por todo el Corredor del Henares”. No obstante, el primer edil incidió en la idea de que con las alegaciones a la propuesta del Ministerio “no queremos entrar en la cuestión de que la variante comience o finalice en una localidad u otra”, si bien criticó que el proyecto de Fomento “sólo piensa en el tránsito de vehículos entre Madrid y Barcelona, pero no tiene en cuenta la relación de la carretera con la ciudad de Guadalajara”.
Es por ello, que para salvar los escarpes y desniveles de La Alcarria, evitando el mayor daño medioambiental, el equipo de Gobierno propone soterrar unos cinco kilómetros de la A-2 entre dos túneles. Así, se evitarían, entre otras cuestiones, la ejecución de un viaducto sobre el que existe sobre la N-320 en el paraje de El Sotillo o la ejecución de taludes de más de 20 metros en algunos puntos.
Además, se pretende corregir el impacto sobre zonas urbanas como El Clavín, Iriépal y Taracena, donde, según la actual propuesta de Fomento, la A-2 pasaría muy cerca de estos núcleos de población “ocasionando problemas de ruido y limitaciones al desarrollo que ya está aprobado de estas localidades”.
Asimismo, Román adelantó cuál será el proyecto de la Ronda Sur, que podría unir, –si son aprobadas sus alegaciones–, la N-320, la variante de la A-2 con la Ronda Norte.

Principales propuestas del Ayuntamiento

Disminuir el impacto medioambiental sobre la ladera sur de los escarpes de la Alcarria.

Corregir el impacto sobre el tráfico rodado en la ciudad, ya que la solución propuesta por el Ministerio de Fomento plantea sólo un acceso a través del nudo del Hospital.

Corregir el impacto sobre las zonas urbanas consolidadas como El Clavín, Iriépal y Taracena.

El proyecto pretende preservar la Cuesta del Sotillo del impacto negativo que supondría la construcción de un viaducto, mediante la realización de un túnel que supere el desnivel desde la cota 780 a la cota 955.

Ejecución de la variante de la N-320 desde el nudo de Los Faroles al del Hospital.

Crear tres accesos desde la autovía A-2 a Guadalajara, que serían el nudo de Los Faroles y la N-320, el nudo del Hospital Universitario y el enlace de la R-2 a la altura del barrio anexionado de Taracena.