El Ayuntamiento recibe 400.000 euros de la licencia de obras del Parador

  El Ayuntamiento de Molina recibió ayer un “balón de oxígeno”, como lo definió el propio alcalde, David Pascual. El Estado realizó el abono de la licencia de obra del Parador proyectado en la localidad, 400.000 euros. Pascual tiene claro el fin al que se destinarán estos fondos: el abono de las nóminas que se adeudan a los trabajadores del Consistorio. Sin embargo, no es el único pago que considera necesario priorizar.

  El primer edil también apunta su intención de abonar las deudas que tiene con el proveedor de gasóleo del colegio, ya que es el combustible que se emplea para alimentar el sistema de calefacción. Su decisión llega en un momento en el que las bajas temperaturas amenazan de manera especial a la comarca. Lo que todavía no sabe es cuantas nóminas podrá abonar con este dinero. Hoy mismo tiene previsto mantener una reunión con el administrador del Ayuntamiento para encontrar la mejor forma de realizar los pagos.

  Un paso adelante La noticia tiene un doble matiz positivo. Además de suponer la llegada de 400.000 euros a un Consistorio que estaba pasando graves apuros económicos, significa otro paso adelante en la ejecución de un proyecto largamente esperado: el del Parador de Molina. Ramón Aguirre, ex diputado por la provincia, realizó un compromiso firme con él hace pocas semanas, cuando asumió la dirección del SEPI, del que dependen tanto Turespaña como a Tragsa, empresa pública que se encarga de la ejecución del Parador.

  Entonces aseguró que en breve se realizará la adjudicación de las obras del edificio y ahora hace efectivo el pago de la licencia de obras. Aunque no sabe cuando arrancarán los trabajos, Pascual cree que “si nos han pagado ya es que tienen pensado empezar de inmediato o en muy poco tiempo”. Sin embargo, antes de que eso ocurra, aclara, es necesario que se firme el acta de replanteo.

  Aunque el Ayuntamiento ya cuenta con 400.000 euros que emplear en el pago de sus nóminas, este dinero no forma parte de las deudas que tiene contraídas con él la Junta de Comunidades. De hecho, Pascual asegura que todavía “tenemos un agujero muy importante”. En este sentido, recuerda que necesitan que el Gobierno regional les vaya abonando parte de los 1,5 millones que les adeudan para “poder seguir funcionando”.