El CAI de Rafael de la Rica ya tiene adjudicataria para su urbanización
01/10/2010 - 09:45
Barroso Nava y Compañía S.A., la empresa adjudicataria de las obras de construcción del nuevo Centro de Atención a la Infancia de la calle Doctor Rafael de la Rica, ha sido también la adjudicataria del proyecto de ejecución de las obras para desarrollar el proyecto complementario de urbanización e instalación de energía solar en este centro. El importe de la adjudicación asciende a 114.470 euros, más 18.315 en concepto de IVA.
La construcción de este nuevo recurso de titularidad pública lleva un retraso de más de dos años por encima del plazo previsto inicialmente. Complicaciones en el proyecto y un modificado de última hora han sido las culpables de que, a día de hoy, las familias de Guadalajara no puedan hacer uso de sus 95 plazas para niños de cero a tres años de edad.
Las 2.100 metros cuadrados de extensión que ocupa la parcela del UP-7 darán cabida a los aularios para los niños, así como a despachos, zonas comunes, aseos, comedor y cocina. El 20 por ciento del coste será asumido por el Ayuntamiento, mientras que el 80 por ciento restante correrá a cargo de las arcas regionales.
Desde el Ayuntamiento se ha reiterado el interés por abrir este recurso lo antes posible, aunque ya no coincidiera con el inicio del curso. La concejala del área, Carmen Heredia, aseguró que, una vez finalizadas las últimas tareas y con las obras recepcionadas, se procedería a la adjudicación de la empresa gestora del servicio de guardería y se abrirían sus puertas con la condición de que hubiese un número de demandantes suficiente.
A falta de abrir esta nueva guardería y con el cierre inminente de la guardería del centro San José, la cobertura de plazas infantiles sostenidas con fondos públicos en la capital sigue siendo deficiente restará 80 plazas.
La alternativa a estos centros la ofrecen las guarderías privadas, casi una veintena en la capital, lo que supone un incremento de la oferta que supera el millar. La diferencia entre ambas opciones es su coste mensual. Mientras que en el caso de las guarderías públicas o conveniadas la cuantía ronda los 200 euros, dependiendo de los servicios y condiciones que se contraten, las privadas añaden unos 40 euros más de promedio al mes.
Las 2.100 metros cuadrados de extensión que ocupa la parcela del UP-7 darán cabida a los aularios para los niños, así como a despachos, zonas comunes, aseos, comedor y cocina. El 20 por ciento del coste será asumido por el Ayuntamiento, mientras que el 80 por ciento restante correrá a cargo de las arcas regionales.
Desde el Ayuntamiento se ha reiterado el interés por abrir este recurso lo antes posible, aunque ya no coincidiera con el inicio del curso. La concejala del área, Carmen Heredia, aseguró que, una vez finalizadas las últimas tareas y con las obras recepcionadas, se procedería a la adjudicación de la empresa gestora del servicio de guardería y se abrirían sus puertas con la condición de que hubiese un número de demandantes suficiente.
A falta de abrir esta nueva guardería y con el cierre inminente de la guardería del centro San José, la cobertura de plazas infantiles sostenidas con fondos públicos en la capital sigue siendo deficiente restará 80 plazas.
La alternativa a estos centros la ofrecen las guarderías privadas, casi una veintena en la capital, lo que supone un incremento de la oferta que supera el millar. La diferencia entre ambas opciones es su coste mensual. Mientras que en el caso de las guarderías públicas o conveniadas la cuantía ronda los 200 euros, dependiendo de los servicios y condiciones que se contraten, las privadas añaden unos 40 euros más de promedio al mes.