El Casar pide colaboración a Madrid para arreglar la GU-193 y la M-117

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: M.TOVAR ATANCE
Intentará además que la C-4 llegue desde Algete hasta El Casar
El alcalde de El Casar, Ramón Vidal, ha remitido una carta al consejero de Transportes de la comunidad vecina, José Ignacio Echevarría, para que ambas administraciones colaboren en la mejora de la GU-193 y la M-117 que une estos municipios. El objetivo es que se ensanche, pues carece de arcenes, y el primer edil estima que el 90 por ciento de la población trabaja en Madrid, por lo que utilizan a diario esta vía y soporta “mucho tráfico”.
El alcalde afirma que se trata de un “tema arduo y lento”, ya que se trata de poner de acuerdo a dos comunidades. De momento, él ya ha dado el primer paso con esta petición, pues considera que es su obligación.
Para desplazarse por carretera a la comunidad de Madrid, los casareños tienen que recorrer 11 kilómetros, que son sobre los que se pretende actuar, de los que dos corresponden a la carretera GU-193 que después se une con la M-117 , cuyo trazado coincide con la denominada Carretera de Fuente el Saz y la Avenida de Madrid en el callejero de El Casar y sus urbanizaciones.
El crecimiento poblacional que ha experimentado la localidad se ha debido, en su mayoría, a la llegada de vecinos madrileños que han decidido asentar en la provincia alcarreña su residencia, aunque no su trabajo, gracias a la cercanía de El Casar con Madrid. Por ello, la mejora de las comunicaciones se ha convertido en la mayor reivindicación del equipo de Gobierno. Una de sus demandas históricas es la conexión directa con el futuro Metro Norte. Vidal ha hecho múltiples peticiones a los responsables de la comunidad vecina, aunque, el alcalde cree que, tal vez, esta conexión no sea del todo efectiva.
Tras el anuncio de la prolongación de la línea C-4 de Cercanías hasta Algete, como ha manifestado el grupo de IU, el alcalde se plantea pedir su prolongación hasta el El Casar. Sin embargo, Ramón Vidal es consciente del lugar en el que se encuentra, en una comunidad distinta, a pesar de que les separa un trayecto de seis minutos por carretera. “Si es difícil llegar a un acuerdo sobre las carreteras, imagínese esto”, dice. Aun así, insiste, “hay que intentar llamar a todas las puertas”. Es consciente además que uno de sus incovenientes sería el desfase entre la población de hecho y de derecho. A pesar de que se calcula que hay 24.000 personas viviendo en el municipio, sólo la mitad están empadronadas, por lo que este desfase es un dato en contra a la hora de pedir mejoras.