El casco histórico y la variante de la A-2 preocupan a las fuerzas vivas de la ciudad

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: BEATRIZ PARIENTE
Tras la ronda de encuentros entre los redactores del POM y diferentes colectivos
El Ayuntamiento de Guadalajara y el equipo redactor del avance del Plan de Ordenación Municipal (POM) quieren contar con la opinión de las principales fuerzas vivas para elaborar el modelo de crecimiento que seguirá la ciudad en los próximos años. Al término de la ronda de encuentros con los consejos de barrio, los colegios de arquitectos técnicos, ingenieros industriales, abogados, la Cámara de Comercio y CEOE-Cepyme.
En ellas participaron el alcalde, Antonio Román, el concejal de Urbanismo, Juan Antonio de las Heras, técnicos municipales y el jefe del equipo redactor del avance, el arquitecto José María Ezquiaga.
Aunque aún no se han formalizado alegaciones por escrito, Ezquiaga se ha hecho una composición de las principales inquietudes que tienen los colectivos consultados. “En general, sus preocupaciones coinciden con aspectos que ya se incluyen en el avance del Plan”. Entre las sugerencias que han realizado los vecinos se encuentran las de escala más pequeña, que “serán muy importantes para acertar en el detalle”. En cuanto a aspectos más generales “a la gente le preocupa especialmente que el casco no quede de manera marginada, como una zona en ruina o declive. Le preocupa también la vinculación del AVE con la ciudad, el problema de los tiempos de ejecución de la variante de la A-2”.
Otro de los aspectos que se preguntaba la ciudadanía era si tal número de viviendas era necesario. A esta duda, Ezquiaga señala que “el problema no es cuántas viviendas se prevén, sino en qué orden se van a ejecutar y a qué van a estar vinculadas”.
En cuanto a otros temas menores también consultaron la densidad de las viviendas, el tema de los dedos verdes del río Henares. En este caso, el director de la redacción del nuevo POM aclara que en la parte que va por suelo rústico pertenecerán a suelo rústico pero en la parte urbana van a pertenecer a cada plan parcial, de manera que los propietarios afectados por estas zonas verdes repartirán sus beneficios y sus cargas como los propietarios de suelo que va a ser edificable.