El centro de acogida de animales abandonados, desbordado, pide ayuda a ciudadanía e instituciones

16/06/2017 - 20:06

La tenencia responsable de animales es el objetivo que desde hace años persiguen los trabajadores y voluntarios del Centro de Acogida de Animales Abandonados de Guadalajara, como arma de combate contra ‘el paseo’ al que se somete a perros y gatos en Guadalajara.

La protectora La Camada está desbordada y preocupada por la situación actual. Esta asociación, que gestiona el Centro municipal de Acogida de animales abandonados de Guadalajara, ha realizado un llamamiento urgente a la población y a las administraciones de la provincia para que tomen conciencia del problema de abandono de perros y gatos.
    Resulta acuciante tomar cartas en el asunto porque las instalaciones de la capital se encuentran más que al límite con 225 perros y 217 gatos, cuando lo ideal sería 150 de cada especie. Por este motivo se ha visto mermada la calidad de vida de las mascotas, que ahora sufren limitaciones de espacio al convivir con más compañeros de lo deseable. “Hay gatos que no se adaptan y se dejan morir”. Además, genera un nivel de estrés tanto en los animales como en los propios cuidadores de la asociación que tampoco es de recibo.

Principales causas
Las causas para esta situación extrema son, como siempre, la irresponsabilidad en la tenencia de animales. “No se lo toman en serio, en cuanto surge el más mínimo problema ya no quieren al animal”. Este incremento comenzó “en octubre, que es cuando comienza la temporada de caza”, apunta Tello. Además, desde La Camada también han detectado que existe la necesidad de que se recojan animales en toda la provincia. “Nosotros sólo recogemos en la capital y es algo que a veces la gente no entiende”, asegura. Es necesario recordar que el Centro de Acogida es de titularidad municipal y que, por tanto, sólo funciona en el término municipal capitalino. “Lo ideal es que la provincia esté atendida y que no sea la ciudad la que esté soportando el peso del abandono”, considera la presidenta. Los motivos para esta petición son varios: el primero que “nuestra economía es limitada” y el segundo que “todas las localidades deberían estar preparadas para el abandono, aunque fuera con un pequeño espacio donde dejar el animal hasta que pudiera llevarse, por ejemplo, a Hogar Amigo”.
    Pese a sus problemas, La Camada tiene absolutamente claro que seguirán manteniendo su filosofía de sacrificio cero. Por eso piden a las instituciones que se establezca “un nuevo modelo de entidad para dar soluciones a estos problemas”. De hecho considera que “muchas veces desconocen en el problema porque no les llega. Cuando a la gente les decimos que no pueden dejar a los animales que han encontrado  (en los casos en que no son de la capital) nos preguntan ¿entonces qué hago? ¿Miro para otro lado?”.
    Por eso la Camada pone a disposición su propio modelo para que aquellas localidades que lo deseen puedan poner en práctica servicios similares. “Yo lo he hablado ya con alcaldes y nos brindamos a informar”, apunta Tello.
    Por todos estos motivos y ante la llegada inminente del verano, otra época del año mala para las adopciones, la presidenta anima, en primer lugar, a realizar adopciones responsables y, en segundo, si no se puede, a ayudar convirtiéndose en casa de acogida. En primavera, por ejemplo, el problema de las camadas de gatitos es evidente, algunos de ellos tan pequeños que resulta difícil que sobrevivan sin su madre. Los mimos de voluntarios y casas de acogida son básicas para sacarles adelante.
    “Os animamos a visitar nuestras instalaciones para conocer mejor a nuestros perros y gatos, para darles esa oportunidad que tanto merecen. Tenemos la esperanza de que alguno de ellos encuentre un hueco en vuestro corazón y en vuestro hogar. Para siempre”, cuentan desde la protectora La Camada en su afán por salvar y proteger al mayor número de mascotas abandonadas.

 

TRES TRISTES HISTORIAS DEL ABANDONO ANIMAL EN GUADALAJARA

Rocky  (14 años)

Tenía unos 10 años cuando la única vida que conocía, de repente, se esfumó.

¿Se cansaron de él?, ¿dejó de importarles y simplemente lo abandonaron? Rocky es un podenco, una de las razas más castigadas, y ahora tiene 14 años. Tiene carácter tranquilo y amable. Busca confiado las caricias y dedica largas miradas de agradecimiento. Un abuelito entrañable.

 

 

Jazmín (9 años)

Es menuda de tamaño y grande en experiencia.

Jazmín  es una pequeña pantera que llegó al albergue cuando tenía 6 años y que está a punto de cumplir 10.

Tiene un carácter sumamente tranquilo y, además, es cariñosa y afectuosa, un amor de felina ideal para completar una familia que ame y respete a los animales.

 

 

 

Simply Red

Simply Red es un cachorro que se encuentra ahora en casa de acogida. Le encontraron junto a otros tres hermanos. Por ahora se han salvado tres de los cuatro.

Como él, La Camada cuenta con muchos cachorros en primavera que necesitan una adopción responsable y para toda la vida o, al menos, una casa de acogida. Son sólo bebés que necesitan unos cuidados que sus madres ya no pueden ofrecerles.