El colegio San José albergó ayer las más de 157 especies de hongos que tiene la provincia

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: M.TOVAR ATANCE
La Asociación Micológica Alcarreña La Senderuela expuso ayer, por segundo año consecutivo, en el hall del Centro San José, las setas recogidas en la provincia durante las últimas semanas, de 157 especies distintas, aunque son muchas más las existentes. Desde la famosa ‘amanita muscaria’ a la más venenosa, la ‘amanita faloides’, que estaba convenientemente precintada, todas estaban clasificadas e identificadas por especie y género. Durante las cuatro horas que duró la exposición, se registró gran afluencia de curiosos ciudadanos.
La provincia de Guadalajara cuenta con más de 157 especies distintas de setas, unas comestibles y otras tóxicas que es preciso conocer de forma correcta. Todas estas variedades las expuso ayer la Asociación Micológica Alcarreña La Senderuela en el hall del Centro San José, tras sus salidas al campo de la última semana y el sábado. Algunas otras se quedaron fuera de la muestra por falta de tiempo para clasificarlas.
Desde las más comunes como la seta de cardo, el níscalo o el boletus a otras más especiales como la amanita faloides, todas estaban identificadas con su nombre en latín, numeradas, y ordenadas según la guía de clasificación de hongos y setas. Cada ejemplar tenía su etiqueta de un color diferente según fuera comestible (verde), tóxica (roja), comestible en caso de que se cocine, pero tóxica en crudo (amarilla) y sin valor culinario (blanca). Precisamente la amanita faloides estaba guardada en una caja con el fin de que nadie pudiera, ni siquiera, tocarla, porque es mortal. “Ésta hay que conocerla muy bien. Los que salgan al campo la tienen que tener muy bien clasificada”, explicaba ayer el presidente de la asociación, Santiago Muñoz. También había otras más famosas, fácilmente reconocibles por su color rojo con pintas blancas, que suele aparecer en los dibujos, aunque se trata de una amanita muscaria. No es comestible y, según Muñoz, la leyenda dice que es alucinógena “pero habría que comer mucha cantidad”, apunta.
Durante las cuatro horas que duró la exposición fueron centenares de personas las que se acercaron hasta el San José para conocer un poco más la riqueza micológica de la provincia, que por segundo año consecutivo ha llevado hasta este centro La Senderuela.