El consumo cae a su nivel más bajo en siete años
01/10/2010 - 09:45
Los españoles gastaron el pasado año un total 64.200 millones de euros en productos de consumo básico para el hogar, un 5,5% más que el año anterior. Este crecimiento es el más bajo de los últimos siete años, según el Anuario Nielsen presentado ayer que asegura que la ralentización de consumo se ha producido por la psicosis entre los compradores con respecto a la subida de algunos precios.
En este contexto, la compra de marcas blancas más económicas se han disparado y suponen ya el 26% del total de las ventas.
Los españoles continúan gastando aunque el repunte de precios del ultimo año ha provocado una desaceleración en el crecimiento de la demanda. Así, el gasto en productos de consumo básico para el hogar en España creció en 2007 un 5,5%, nueve décimas menos que el ejercicio anterior y el menor incremento registrado desde la entrada del euro en 2002, hasta alcanzar un volumen total de 64.200 millones de euros, según datos del Anuario Nielsen 2008 difundidos ayer.
El director general de Nielsen España, José Luis García Fuentes, explicó que en el último trimestre de 2007 se ha producido una "psicosis de consumo muy fuerte", debido a las tensiones inflacionistas y a las noticias que aludían a la posible entrada en una recesión económica, lo que ha propiciado que el consumidor cambie de marca o apueste por las denominadas 'marcas blancas'.
Estas marcas de la distribución siguen ganando adeptos y ya representan el 25,9% del total de ventas de alimentación envasada y droguería y perfumería, hasta los 9.910 millones de euros. La cuota es superior en algunos productos, como en las conservas (42,4% del total), los congelados (34,3%) y leches y batidos (34,1%).
Las ventas de la alimentación envasada crecieron un 5,5%, hasta representar el 47,2% del total del gasto, mientras que los productos frescos aumentaron sus ventas un 5,3%, hasta aglutinar el 37,7%. Por su parte, los artículos de droguería y perfumería repuntaron un 6,1% y alcanzaron el 15,1% del total.
El crecimiento registrado en los productos frescos se debió fundamentalmente a un aumento de precios del 4,5%, dado que el volumen de ventas sólo subió un 0,8%, frente al incremento del 3,2% en las ventas de la alimentación envasada y productos de droguería, cuyos precios aumentaron un 2,4%.
Respecto a la evolución de los canales de distribución, destaca el aumento del 3% en el número de hipermercados y supermercados, hasta los 15.413, frente al descenso paulatino de las tiendas tradicionales de alimentación y supermercados de menos de 100 metros cuadrados, que actualmente se sitúan en 36.069, un 2% menos que en 2006. El descenso de los pequeños establecimientos se ha suavizado por la proliferación de "tiendas étnicas", dirigidas a la población inmigrante.
El deseo de ahorrar hace que los supermercados acaparen casi el 70% de todas las ventas de alimentación envasada, frente al 21,5% que se hace en los hipermercados y el 8,6% de las tiendas tradicionales de alimentación que pierden cuota.
La mayor partida de gasto en productos frescos en los hogares españoles corresponde a la carne, que supone el 33,9% del total; seguida de la verdura, con un 18,1%; el pescado, un 17,3%; la fruta, un 16,4%; panadería, el 11,2%; y los huevos, que representan el 3,2% de todas las ventas de fresco en establecimientos de libre servicio.
Los españoles continúan gastando aunque el repunte de precios del ultimo año ha provocado una desaceleración en el crecimiento de la demanda. Así, el gasto en productos de consumo básico para el hogar en España creció en 2007 un 5,5%, nueve décimas menos que el ejercicio anterior y el menor incremento registrado desde la entrada del euro en 2002, hasta alcanzar un volumen total de 64.200 millones de euros, según datos del Anuario Nielsen 2008 difundidos ayer.
El director general de Nielsen España, José Luis García Fuentes, explicó que en el último trimestre de 2007 se ha producido una "psicosis de consumo muy fuerte", debido a las tensiones inflacionistas y a las noticias que aludían a la posible entrada en una recesión económica, lo que ha propiciado que el consumidor cambie de marca o apueste por las denominadas 'marcas blancas'.
Estas marcas de la distribución siguen ganando adeptos y ya representan el 25,9% del total de ventas de alimentación envasada y droguería y perfumería, hasta los 9.910 millones de euros. La cuota es superior en algunos productos, como en las conservas (42,4% del total), los congelados (34,3%) y leches y batidos (34,1%).
Las ventas de la alimentación envasada crecieron un 5,5%, hasta representar el 47,2% del total del gasto, mientras que los productos frescos aumentaron sus ventas un 5,3%, hasta aglutinar el 37,7%. Por su parte, los artículos de droguería y perfumería repuntaron un 6,1% y alcanzaron el 15,1% del total.
El crecimiento registrado en los productos frescos se debió fundamentalmente a un aumento de precios del 4,5%, dado que el volumen de ventas sólo subió un 0,8%, frente al incremento del 3,2% en las ventas de la alimentación envasada y productos de droguería, cuyos precios aumentaron un 2,4%.
Respecto a la evolución de los canales de distribución, destaca el aumento del 3% en el número de hipermercados y supermercados, hasta los 15.413, frente al descenso paulatino de las tiendas tradicionales de alimentación y supermercados de menos de 100 metros cuadrados, que actualmente se sitúan en 36.069, un 2% menos que en 2006. El descenso de los pequeños establecimientos se ha suavizado por la proliferación de "tiendas étnicas", dirigidas a la población inmigrante.
El deseo de ahorrar hace que los supermercados acaparen casi el 70% de todas las ventas de alimentación envasada, frente al 21,5% que se hace en los hipermercados y el 8,6% de las tiendas tradicionales de alimentación que pierden cuota.
La mayor partida de gasto en productos frescos en los hogares españoles corresponde a la carne, que supone el 33,9% del total; seguida de la verdura, con un 18,1%; el pescado, un 17,3%; la fruta, un 16,4%; panadería, el 11,2%; y los huevos, que representan el 3,2% de todas las ventas de fresco en establecimientos de libre servicio.