El CSIC no excavará este año en Abánades tras agotar la financiación
05/07/2013 - 13:04
El Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) no acudirá este año a Abánades para realizar la que sería la tercera excavación en los escenarios de una de las batallas más importantes de la Guerra Civil. El arqueólogo Alfredo González, responsable de los trabajos, reconoce que el motivo principal de esta decisión ha sido la terminación de la financiación, que procedía fundamentalmente del propio CSIC y del Ministerio de Cultura de Noruega. Estábamos a la espera de la concesión de un nuevo proyecto que finalmente no hemos conseguido, salvo sorpresa de última hora. En concreto, se ha solicitado una subvención europea que, de cualquier forma, no podría utilizarse para este año. A grandes rasgos, las excavaciones realizadas hasta ahora, con una duración de entre tres y cuatro semanas, suponen un gasto de entre 6.000 y 8.000 euros, siendo la partida más importante la del personal. En los últimos años nos hemos rebajado el sueldo para poder realizar la excavación, llegando incluso a poner dinero en ello. Hay que recordar que en los últimos trabajos colaboró, además de voluntarios, un grupo de presos de la cárcel de Alcalá-Meco alumnos de un taller de arqueología.
Pese a todo, González asegura que aunque este año no se trabaje en la zona, el próximo año sí se retomarán las excavaciones. Después de tres años con este proyecto, no está mal parar un año para publicar los resultados.
Desde la Asociación de Amigos de los Espacios Históricos de Abánades, su presidente, Ismael Gallego, el objetivo es que no se pierda la dinámica de actuaciones que vienen realizando desde hace un par de años, y que han permitido recuperar objetos personales de soldados de ambos bandos que lucharon en Abánades, pudiendo de esta forma reconstruir la vida de las trincheras y el frente, así como la actitud de la población local.
Basándose en el conocimiento del terreno de las gentes del lugar, los próximos trabajos que se realicen en el municipio serán en algunas posiciones entre Abánades y Torrecuadradilla por las que aún no han pasado los furtivos. También excavarán en una zona en las que han ido apareciendo restos de huesos de soldados.
Pese a todo, González asegura que aunque este año no se trabaje en la zona, el próximo año sí se retomarán las excavaciones. Después de tres años con este proyecto, no está mal parar un año para publicar los resultados.
Desde la Asociación de Amigos de los Espacios Históricos de Abánades, su presidente, Ismael Gallego, el objetivo es que no se pierda la dinámica de actuaciones que vienen realizando desde hace un par de años, y que han permitido recuperar objetos personales de soldados de ambos bandos que lucharon en Abánades, pudiendo de esta forma reconstruir la vida de las trincheras y el frente, así como la actitud de la población local.
Basándose en el conocimiento del terreno de las gentes del lugar, los próximos trabajos que se realicen en el municipio serán en algunas posiciones entre Abánades y Torrecuadradilla por las que aún no han pasado los furtivos. También excavarán en una zona en las que han ido apareciendo restos de huesos de soldados.
Cuerpos hallados
En septiembre del pasado año, en la que fue la tercera excavación del CSIC, se encontraron los restos de siete soldados, que están siendo analizados con el fin de encontrar a sus familiares. En el caso de que esto sea imposible, se barajó la posibilidad de enterrarlos en el cementerio de Abánades. Algunos de los restos tenían la chapa identificativa de la Falange de Valladolid, con lo que se podría haber encontrado algún pariente, explica Ismael Gallego, que desconoce el punto exacto en el que se encuentra la investigación. Se sabe que la mayoría eran muy jóvenes, de entre 16 y 18 años, excepto uno mayor, de entre 30 y 40, del ejército republicano. Estamos en un inmenso campo de batalla que está lleno de restos, por lo que a poco que se pongan a excavar van a seguir apareciendo. Por su parte, Alfredo González reconoce que la identificación se está complicando ante la ausencia de listas de bajas. El ejército franquista recogía los nombres de los oficiales que fallecían, pero de la tropa sólo se apuntaba el número de muertos. Con todo, el estudio antropológico está a punto de concluir y se podrán conocer más datos que ayuden a la identificación.
Respecto al museo que está preparando la Asociación de los Espacios Históricos de Abánades, su presidente reconoce que aunque se ha dado otro empujoncito con motivo de la última celebración de la Batalla Olvidada, es necesario contar con la categoría de museo. Ahora mismo es municipal, y no contamos con las medidas de seguridad ni de control de temperaturas exigido para dar ese paso. Por ello, de momento sólo albergan material donado por vecinos y otra personas, como ropa para vestir algún que otro maniquí.
Con todo, Ismael Gallego subraya que la filosofía de todos los que integran este proyecto es evitar sectarimos y analizar los hechos históricos, además de dinamizar culturalmente esta zona, que está un poco olvidada.
En septiembre del pasado año, en la que fue la tercera excavación del CSIC, se encontraron los restos de siete soldados, que están siendo analizados con el fin de encontrar a sus familiares. En el caso de que esto sea imposible, se barajó la posibilidad de enterrarlos en el cementerio de Abánades. Algunos de los restos tenían la chapa identificativa de la Falange de Valladolid, con lo que se podría haber encontrado algún pariente, explica Ismael Gallego, que desconoce el punto exacto en el que se encuentra la investigación. Se sabe que la mayoría eran muy jóvenes, de entre 16 y 18 años, excepto uno mayor, de entre 30 y 40, del ejército republicano. Estamos en un inmenso campo de batalla que está lleno de restos, por lo que a poco que se pongan a excavar van a seguir apareciendo. Por su parte, Alfredo González reconoce que la identificación se está complicando ante la ausencia de listas de bajas. El ejército franquista recogía los nombres de los oficiales que fallecían, pero de la tropa sólo se apuntaba el número de muertos. Con todo, el estudio antropológico está a punto de concluir y se podrán conocer más datos que ayuden a la identificación.
Respecto al museo que está preparando la Asociación de los Espacios Históricos de Abánades, su presidente reconoce que aunque se ha dado otro empujoncito con motivo de la última celebración de la Batalla Olvidada, es necesario contar con la categoría de museo. Ahora mismo es municipal, y no contamos con las medidas de seguridad ni de control de temperaturas exigido para dar ese paso. Por ello, de momento sólo albergan material donado por vecinos y otra personas, como ropa para vestir algún que otro maniquí.
Con todo, Ismael Gallego subraya que la filosofía de todos los que integran este proyecto es evitar sectarimos y analizar los hechos históricos, además de dinamizar culturalmente esta zona, que está un poco olvidada.
