El director del Reina Sofía considera "positivo" el nombramiento de Marí en el Macba y lo califica de "continuidad"
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
El director del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Manuel Borja-Villel, elogió hoy el nombramiento de Bartomeu Marí como director del Museo de Arte Contemperáneo de Barcelona (Macba) y consideró que su sucesor en el cargo representa "la continuidad que el centro necesitaba".
En declaraciones para Europa Press, Borja-Villel defendió el proceso de elección del nuevo responsable del museo barcelonés, tras el acto de presentación de la exposición 'Disidanzas'. Se trata de la primera gran exposición retrospectiva sobre la artista norteamericana Nancy Spero que se realiza en Europa y Estados Unidos, y que impulsan de forma conjunta el Macba y el Reina Sofía.
"Se ha seguido un proceso de buenas prácticas, lo que significa que la selección se ha basado en un proyecto y no tanto en el nombre", afirmó. "Pero que además, que sea él, que ha estado conmigo durante cuatro años, obviamente me parece importante", añadió el director del Reina Sofía.
En este sentido, Borja-Villel subrayó que "el Macba como modelo estaba establecido, y ahora de lo que se trataba no era de reinventarse, sino de continuar". Aunque desde su perspectiva, Bartomeu represente esa continuidad, "cada persona es distinta, y continuidad no quiere decir clon o repetición, sino el cambio a partir de unas premisas que ya están establecidas".
NECESIDAD DE TRABAJAR EN RED.
Borja-Villel hizo referencia también al futuro del museo nacional que dirige. "Siempre he dicho que debemos ser el museo nacional y por lo tanto el museo de todo el Estado". Sin embargo, la idea de un centro ligado a una periferia de un modo tradicional ya no tiene sentido para el responsable del museo madrileño.
"Debemos trabajar en red, con múltiples centros ligados entre ellos", insistió. Para recalcar esta idea utilizó la metáfora del Reina Sofía como un 'hub', "un aeropuerto que tenga relación con otros aeropuertos".
Por eso resaltó que las relaciones con el Macba, la Fundación Oteiza, la Calder Foundation e instituciones latinoamericanas son básicas para trabajar en red. "Si el Reina Sofía quiere ser realmente el museo del Estado, debe representar todas las complejidades de la cultura contemporánea española", remarcó Borja-Villel. Un cambio que también debe incidir en la mentalidad del museo, ya que "nuestra identidad debe pasar de pensar todavía en parámetros demasiado modernistas a una que piense en parámetros actuales".
"Se ha seguido un proceso de buenas prácticas, lo que significa que la selección se ha basado en un proyecto y no tanto en el nombre", afirmó. "Pero que además, que sea él, que ha estado conmigo durante cuatro años, obviamente me parece importante", añadió el director del Reina Sofía.
En este sentido, Borja-Villel subrayó que "el Macba como modelo estaba establecido, y ahora de lo que se trataba no era de reinventarse, sino de continuar". Aunque desde su perspectiva, Bartomeu represente esa continuidad, "cada persona es distinta, y continuidad no quiere decir clon o repetición, sino el cambio a partir de unas premisas que ya están establecidas".
NECESIDAD DE TRABAJAR EN RED.
Borja-Villel hizo referencia también al futuro del museo nacional que dirige. "Siempre he dicho que debemos ser el museo nacional y por lo tanto el museo de todo el Estado". Sin embargo, la idea de un centro ligado a una periferia de un modo tradicional ya no tiene sentido para el responsable del museo madrileño.
"Debemos trabajar en red, con múltiples centros ligados entre ellos", insistió. Para recalcar esta idea utilizó la metáfora del Reina Sofía como un 'hub', "un aeropuerto que tenga relación con otros aeropuertos".
Por eso resaltó que las relaciones con el Macba, la Fundación Oteiza, la Calder Foundation e instituciones latinoamericanas son básicas para trabajar en red. "Si el Reina Sofía quiere ser realmente el museo del Estado, debe representar todas las complejidades de la cultura contemporánea española", remarcó Borja-Villel. Un cambio que también debe incidir en la mentalidad del museo, ya que "nuestra identidad debe pasar de pensar todavía en parámetros demasiado modernistas a una que piense en parámetros actuales".