El edificio del Obispado se muestra ante los ciudadanos en una jornada de puertas abiertas
Al cumplirse una semana de su inauguración oficial con la presencia del nuncio apostólico en España, Renzo Fratini, la nueva sede del Obispado de Sigüenza-Guadalajara en la capital abrió ayer sus puertas a toda la ciudadanía. En torno a un centenar de personas, entre religiosas y vecinos, acudieron a la llamada de la Diócesis para conocer más de cerca sus servicios y sus flamantes nuevas instalaciones, de diseño marcadamente modernista, aunque sin perder el espíritu y funcionalidad religiosa, tareas que han sido encomendadas al estudio de arquitectura Arnaiz Consultores Julián Vegas y Alfredo Lezeta y a la constructora Guillermo Alguacil.
Las visitas, de poco menos de una hora de duración, se iniciaron en el salón de actos de la planta semisótano con la proyección de un pequeño documental animado de ocho minutos. En él, el discípulo Cleofás de Emaús fue el encargado de contextualizar la creación de las nuevas instalaciones, motivada por el deseo de acercar los servicios diocesanos a las zonas más pobladas, Guadalajara y el Corredor del Henares; un hecho del que da buena cuenta las cifras que baraja la Diócesis de Sigüenza-Guadalajara, que da cobertura a 246.000 habitantes, está integrada por 471 parroquias, 2 curias, 2 seminarios, 169 sacerdotes en activo, 49 jubilados, 14 en misiones y 31 en otras Diócesis, 54 comunidades de vida consagrada y 22 movimientos o asociaciones laicales. A las primeras nociones serviciales y distribución del edificio le seguiría el recorrido propiamente dicho. El obispo de Sigüenza-Guadalajara, José Sánchez, tomaría el relevo del vicario general, Eugenio Abad, para mostrar las distintas dependencias del edificio, esta vez centradas en los despachos y la casa del Obispo. Precediendo ambas estancias se erige a un lado un cuadro del pintor guadalajareño Pradillo, cedido por Salesianos, y una Virgen de bronce procedente de la antigua Casa Cuna o de la Misericordia, dependiente de la Diputación provincial de Guadalajara. Piezas de arte que vienen a equipararse a otros elementos muebles que salpican las instalaciones, esencialmente en la Casa del Obispo, o elementos que proceden de las donaciones de dos familias y que "da prestancia al edificio", apostilló Abad, serán algunas de las pequeñas joyas que alberga un edificio asentado en los patios de la antigua Casa de Expósitos y que ha costado 4.100.000 euros, 900.000 euros más de los previstos a desembolsar inicialmente debido a un cambio en el proyecto, que contempló elevar el edificio una planta más.