El encierro campero de Robledillo de Mohernando acogió el fin de semana más de un millar de aficionados
Un participante se fracturó una pierna tras ser embestido por la primera res
El pueblo de Robledillo de Mohernando vivió este fin de semana una emocionante mañana taurina con la celebración de su tradicional encierro por el campo, que congregó a más de un millar personas ávidas de sentir la emoción y la adrenalina de esta arraigada fiesta. La cita estuvo protagonizada por dos imponentes astado de la ganadería briocense Campo Bravo Alcarreño.
El transcurso del encierro se vió momentáneamente eclipsado por un pequeño incidente en el que un valiente participante se llevó un buen susto. El toro, enérgico y decidido desde el primer instante, embistió contra este aficionado, que se encontraba subido a una alpaca de paja. Afortunadamente, el astado no le ha causado directamente ningún daño al mozo, aunque éste sufrió una aparatosa fractura en la pierna al caer hacia atrás. En un abrir y cerrar de ojos, el accidentado fue trasladado al quirófano móvil para recibir la atención médica necesaria necesaria. "Desde la corporación municipal y la comisión de Festejos lamentamos este desafortunado accidente y le deseamos una pronta recuperación", manifiesta el nuevo alcalde de Robledillo de Mohernando, Rubén Marchamalo, en exclusiva para este medio.
La suelta de la segunda res "dio mucho más juego", apuntan desde el Ayuntamiento, y en términos generales la valoración de la fiesta taurina de este año es "positiva", ya que consiguieron mantener a los astados muy cerca de la plaza para el disfrute de todos, juzga Manzano.