El encierro del 16 de agosto ya es Fiesta de Interés Turístico Regional

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: Redacción
BRIHUEGA
Cada año acuden a este atractivo evento taurino más de 20.000 personas
El Gobierno de Casilla-La Mancha ha acordado conceder la declaración de Fiesta de Interés Turístico Regional al Encierro de Brihuega, que se lleva a cabo durante la tarde y noche del 16 de agosto, coincidiendo con los actos que se desarrollan en honor a Nuestra Señora de la Peña, patrona de la localidad.
Este reconocimiento supone además un gran atractivo para los visitantes, que superan los 20.000 cada año.
Las celebraciones con toros son parte fundamental de las fiestas populares tradicionales de España, y en el caso de Brihuega, la prueba documental más antigua de espectáculos taurinos data del año 1531. Tal y como refleja el libro de Actas de dicho año, conservado en el Ayuntamiento briocense, con fecha 21 de mayo se establecen las condiciones para conceder la explotación a la carnicería de la villa, entre las que se exigía aportar un novillo para San Juan y otro para el día del Corpus Christi. En el origen, estos eran los momentos en que se celebraban los festejos en la localidad, pasando después esta fiesta a honrar a la Virgen de la Peña, patrona del municipio.
Esta actividad ha sido galardonada recientemente por la página web www.tradicionestaurinas.com, con el trofeo al Mejor Encierro por el Campo y Mejor Organización de la temporada 2008.
En la actualidad, el desarrollo del encierro comprende tres fases, denominadas el parapachumba, la suelta y la subida. La primera de ellas consiste en el despeje de las calles, ya que media hora antes del inicio de la carrera, la Banda de Música realiza el recorrido al son del pasodoble Sangre Torera para dejar libre el paso de los toros. A las 18.30 horas, después de los tres petardos de rigor, se sueltan las reses desde la Plaza de Toros La Muralla, y en su recorrido atraviesan las calles principales del casco antiguo, hasta desembocar en la carretera principal y llegar al Parque de las Eras. Desde allí se dirigen por el campo al enclave denominado Valdeatienza, con el fin de que alcancen el paraje La Boquilla, donde permanecerán hasta su regreso al pueblo con la llegada de la noche. Éste es, sin duda, el momento de mayor dificultad de todo el festejo y en su desarrollo es fundamental la pericia de los jinetes miembros de la organización.
Con la subida o fin del encierro, los toros inician su carrera hacia la localidad, donde llegan en medio de la noche hasta la Plaza de San Felipe, donde son recluidos en el corral. Ahí permanecerán hasta que al día siguiente se les conduzca a su destino definitivo, la plaza de toros, donde serán lidiados.
El teniente de alcalde del Ayuntamiento de Brihuega, Abelardo Mazo, mostró ayer su satisfacción por esta noticia. “No pensaron nuestros antepasados de 1534 que la herencia que nos dejaron sobre las fiestas de Brihuega, y más concretamente, el tradicional encierro iba a alcanzar las cotas de ser declarado como Fiesta de Interés Turístico Regiona”. Mazo recordó que este encierro es el segundo más antiguo de los que se celebran en España. “Este hecho hace que su atracción turístico taurina supere los límites regionales en asistencia de aficionados llegando a superar los 25.000 seguidores atraídos por la magia, el riesgo y el respeto que impone la figura del toro uno de los emblemas característicos de nuestra España”.
En total, Guadalajara cuenta con tres Fiestas de Interés Turístico Regional: la Caballada de Atienza y el Festival de Hita.