El euribor vuelve a niveles de hace ocho años
01/10/2010 - 09:45
Por: COLPISA
El euribor ha vuelto a dar un serio disgusto a los sufridores de hipotecas al cerrar el mes de abril en el 4,82%, su valor más alto en ocho años, según los datos provisionales del mercado interbancario que deberá confirmar el Banco de España a mediados de mayo.
Este nuevo repunte, alentado por la negativa del Banco Central Europeo (BCE) a recortar los tipos de interés oficiales en la zona euro, hará que las revisiones anuales de un crédito medio (148.965 euros) se encarezcan en más de 600 euros a lo largo de toda una anualidad. La posibilidad de acogerse a la ampliación de plazo gratuita promovida por el Gobierno tiene truco, ya que en el caso del contrato tipo permite un ahorro de 105 euros al mes pero conlleva también un sobrecoste al final del crédito de más de 60.000 euros.
Suma y sigue. El euribor, que en enero y febrero dio un pequeño respiro con ligeras bajadas mensuales, retomó en marzo la senda alcista y ahora, en abril, ha dejado claro que no piensa retroceder. El indicador que en realidad es una media del tipo de interés a un año al que cada día se prestan el dinero entre sí los bancos de la eurozona- ha retrocedido a niveles de diciembre de 2000. A lo largo del mes, el tipo mantuvo un vigor constante que se convirtió en pura efervescencia a partir del día 20. El pasado martes llegó incluso a marcar un 4,965%.
Las constantes declaraciones del máximo responsable del BCE, Jean-Claude Trichet, y de sus compañeros en el consejo de gobierno del organismo regulador empeñados en mantener a raya la inflación- han dado al traste con las ilusiones de unos y las predicciones de otros, que contaban con una bajada de los tipos. El euribor, que se considera una especie de señal adelantada de lo que hará el banco central, ha ganado 0,230 puntos porcentuales respecto a marzo y un 0,567 sobre abril de 2007. Algunos analistas, sin embargo, insisten en que el dinero se abaratará antes de finales de año.
Revisiones
Por ahora, la revisión de las hipotecas seguirá siendo más gravosa. Si se considera el contrato tipo que maneja el Instituto Nacional de Estadística (INE) de 148.965 euros a un plazo de 26 años- y se aplica el euribor más un 0,75%, la cuota mensual en el caso de las revisiones con carácter anual pasará de 854,34 euros a 904,78 euros. Esto es, 50,44 euros más cada mes o, lo que es lo mismo, 605 euros añadidos en toda una anualidad. Por cada 10.000 euros prestados, el disgusto será de 40,6 euros anuales.
Eso para los que tienen suscrita la revisión anual:más o menos la mitad de quienes cada mes ven modificado su contrato. Pero el susto no se queda ahí, ya que las revisiones semestrales (que toman como referencia el euribor del pasado octubre, que era del 4,647%) también salen más caras. En concreto, y para esa hipoteca media, el coste mensual pasaría de 889,24 euros a los consabidos 904,78 euros: 15,54 euros más al mes o 186,48 más en todo un año. En definitiva, 12,51 euros inesperados cada año por cada 10.000 euros concedidos.
Plazos más largos
Este martes, el Gobierno firmó con la banca, los notarios y los registradores un pacto para garantizar la gratuidad de la ampliación de las hipotecas. Una medida de la que, en todo caso, sólo se podrán beneficiar aquellos a los que su banco, caja o entidad financiera se lo permita, en función de su solvencia. Ese paso, que puede suponer un alivio para aquellos con más problemas para llegar a fin de mes, no puede darse a la ligera. Y es que ese dinero de bolsillo añadido que hoy viene muy bien supone al final del crédito un sobrecoste notable.
Suma y sigue. El euribor, que en enero y febrero dio un pequeño respiro con ligeras bajadas mensuales, retomó en marzo la senda alcista y ahora, en abril, ha dejado claro que no piensa retroceder. El indicador que en realidad es una media del tipo de interés a un año al que cada día se prestan el dinero entre sí los bancos de la eurozona- ha retrocedido a niveles de diciembre de 2000. A lo largo del mes, el tipo mantuvo un vigor constante que se convirtió en pura efervescencia a partir del día 20. El pasado martes llegó incluso a marcar un 4,965%.
Las constantes declaraciones del máximo responsable del BCE, Jean-Claude Trichet, y de sus compañeros en el consejo de gobierno del organismo regulador empeñados en mantener a raya la inflación- han dado al traste con las ilusiones de unos y las predicciones de otros, que contaban con una bajada de los tipos. El euribor, que se considera una especie de señal adelantada de lo que hará el banco central, ha ganado 0,230 puntos porcentuales respecto a marzo y un 0,567 sobre abril de 2007. Algunos analistas, sin embargo, insisten en que el dinero se abaratará antes de finales de año.
Revisiones
Por ahora, la revisión de las hipotecas seguirá siendo más gravosa. Si se considera el contrato tipo que maneja el Instituto Nacional de Estadística (INE) de 148.965 euros a un plazo de 26 años- y se aplica el euribor más un 0,75%, la cuota mensual en el caso de las revisiones con carácter anual pasará de 854,34 euros a 904,78 euros. Esto es, 50,44 euros más cada mes o, lo que es lo mismo, 605 euros añadidos en toda una anualidad. Por cada 10.000 euros prestados, el disgusto será de 40,6 euros anuales.
Eso para los que tienen suscrita la revisión anual:más o menos la mitad de quienes cada mes ven modificado su contrato. Pero el susto no se queda ahí, ya que las revisiones semestrales (que toman como referencia el euribor del pasado octubre, que era del 4,647%) también salen más caras. En concreto, y para esa hipoteca media, el coste mensual pasaría de 889,24 euros a los consabidos 904,78 euros: 15,54 euros más al mes o 186,48 más en todo un año. En definitiva, 12,51 euros inesperados cada año por cada 10.000 euros concedidos.
Plazos más largos
Este martes, el Gobierno firmó con la banca, los notarios y los registradores un pacto para garantizar la gratuidad de la ampliación de las hipotecas. Una medida de la que, en todo caso, sólo se podrán beneficiar aquellos a los que su banco, caja o entidad financiera se lo permita, en función de su solvencia. Ese paso, que puede suponer un alivio para aquellos con más problemas para llegar a fin de mes, no puede darse a la ligera. Y es que ese dinero de bolsillo añadido que hoy viene muy bien supone al final del crédito un sobrecoste notable.