El festival benéfico de El Casar permite recaudar 1.400 euros para los niños de Uganda
07/08/2011 - 12:48
El festival infantil benéfico a favor de los niños del orfanato de San Jude de Uganda permitió recaudar 1.400 euros, que les permitirán empezar a construir un pozo con el que regar sus cultivos sin necesidad de desplazarse un kilómetro hasta el río. Ha sido un éxito absoluto y rotundo confirmaba la organizadora y coordinadora en España de este Hogar Infantil, Marta Sanz, orgollusa y agradecida por la solidaridad mostrada por los casareños, y la colaboración desinteresada de los Payasos Patosos, que protagonizaron la actuación principal de este evento, en el que además se proyectó un vídeo y la joven Carolina García contó su experiencia como voluntaria en la zona.
El Casar volvió a demostrar su solidaridad con los más necesitados. El festival infantil benéfico organizado para recaudar fondos para los 104 niños que viven en el orfanato San Judes, en Uganda, abarrotó el auditorio casareño convirtiendo esta cita en un éxito absoluto y rotundo, decía ayer orgullosa la coordinadora en España de este Hogar Infantil y organizadora del evento, Marta Sanz.
La actuación altruista de los Payasos Patosos, que fue la principal actuación, además de la proyección de un video y el testimonio de la voluntaria europea más joven, Carolina García Sanz, de 14 años, hicieron posible que se recaudaran 1.400 euros.
Este importe permitirá iniciar la construcción de un pozo en este orfanato para que los niños puedan regar su campo de cultivo sin tener que desplazarse un kilómetro caminando con los cántaros a la cabeza hasta el río para coger agua. Este campo les permite variar su alimentación, que antes sólo se limitaba al maíz, al cacahuete y la patata, pues han plantado kasaba, judías y girasoles, de los que podrán extraer aceite, y mejorar así su nutrición.
Gracias a las numerosas aportaciones de esta localidad, organizadas a instancias de esta casareña, se ha construido ya una sala de fisioterapia para los 24 niños discapacitados, diversas placas solares, agua caliente, una cocina y numerosas mejoras en las instalaciones del orfanato.Las diversas iniciativas organizadas en los dos últimos años han permitido mejorar poco a poco la calidad de vida de estos niños, la mayoría de ellos huérfanos por la guerra que durante 20 años ha asolado el país. Además de dar cobijo a estos niños, San Judes ofrece una base para la educación escolar en un jardín de infancia que sirve tanto a los niños que viven dentro del recinto como a los de las comunidades cercanas. En la actualidad, 220 niños reciben educación infantil gracias a 40 empleados.