El Gobierno regional imparte un curso sobre las ayudas para el cultivo de plantas aromáticas para la mejora de la biodiversidad
Más de medio centenar de personas participan estos días en un curso organizado, en Brihuega, por la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, sobre las ayudas para el cultivo de plantas aromáticas para la mejora de la biodiversidad. El curso, que es necesario tener certificado para la recepción de dichas ayudas, se desarrolla durante tres jornadas teórico y prácticas.
La directora general de Políticas Agroambientales, Silvia Nieto, fue la encargada ayer de dar inicio a esta iniciativa formativa, acompañada por el delegado provincial de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Santos López, y el acalde de Brihuega, Luis Viejo.
En la provincia hay 124 productores de plantas aromáticas repartidos en 68 municipios, siendo el de Brihuega el que mayor superficie destina a este tipo de plantación, con cerca de 900 hectáreas dedicadas a estos cultivos. Las solicitudes de estas ayudas agroambientales se han multiplicado por seis en el último año en Guadalajara, pasando de 13 durante el pasado ejercicio a las 78 del actual, lo que refleja la gran expansión de estos cultivos.
El delegado de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural ha valorado el desarrollo que las plantas aromáticas están teniendo en la provincia, “lo que supone un doble impulso ya que a la economía que genera el cultivo en sí, se suma el atractivo turístico que se crea en torno al mismo”. Asimismo, Santos López ha manifestado su satisfacción ante el hecho de que la Comisión Europea haya pospuesto hasta finales de 2023 la revisión del borrador del denominado Pacto Verde que contemplaba considerar los aceites esenciales de lavanda y lavandín como productos químicos.