El juego de las alianzas

31/03/2019 - 12:56 Pedro Villaverde Martínez

 El que manda quiere seguir mandando y las alianzas pueden llegar a ser muy raras con tal de no dejar que ese poder pase a otros o bien para alcanzarlo.

Titulamos con juego porque pareciera que la Política es un juego aunque nosotros estemos más de acuerdo con Pío Baroja al que en alguna parte nos ha parecido leer que “la política es un juego sucio entre compadres” Tremenda definición si es que la dijo porque el noble arte de la Política es algo sin lo cual resultaría imposible la convivencia. Cuando escuchamos a los políticos hablar por televisión casi es rabia lo que a veces pueden causar, pero así es la realidad. Es típica la frase un tanto infantil de “y tú más” cuando uno le dice a otros alguna lindeza, pero si bien recapacitamos nos daremos cuenta que eso, aunque de otro modo más sofisticado, es lo que podemos escuchar en el mismísimo Parlamento cuando diputados o senadores discuten y de temas que importan mucho al resto de la ciudadanía. El que manda quiere seguir mandando y las alianzas pueden llegar a ser muy raras con tal de no dejar que ese poder pase a otros o bien para alcanzarlo. 
   En esta precampaña electoral que vivimos, más que propuestas, oímos hablar de con quién o con quienes se estaría dispuestos a pactar después de las votaciones y algunos con firmeza aseguran que no lo harían con este o aquel, aunque la experiencia demuestra que su palabra muchas veces se incumple y terminan haciendo lo que más les conviene. Es pura estrategia para confundir o convencer al votante. Las alianzas entre partidos seguirán siendo y mandando las pautas para seguir gobernándonos. Menos mal que, como dice el dicho, los ciudadanos no somos  tontos… y  siempre debe haber  nuevas esperanzas. Ahora puede que haya sorpresas hasta el último  momento e incluso después, o hasta que se repitan las elecciones si el circulo no cuadra. Pero hemos de creer que no hay otras formas mejores de gobernarnos y si alguien las inventara seguramente sería el que mandara siempre. Cada cual opinará como mejor le parezca, pero no desesperemos que siempre ese animal político que es el hombre encuentra  una solución a cualquier problema. Lo que importa es que luego de buenos resultados para todos.