El mayor polígono industrial y tecnológico de Guadalajara comienza su urbanización

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: ANDRÉS BACHILLER. GUADALAJARA
URBANISMO. POLÍGONO EL RUISEÑOR
Las obras concluirán en año y medio, aunque las del campus y el parque científico podrán iniciarse antes de su finalización
Se notaba que el simbólico acto de ayer será decisivo para el futuro de Guadalajara. Casi en mitad del campo, rodeados de maleza, el despliegue de personalidades –políticas y empresariales, sobre todo– de la sociedad guadalajareña era macanudo para asistir a la puesta de la primera piedra de la urbanización del polígono El Ruiseñor, un espacio mixto donde tendrá cabida la industria, la logística y la ciencia y la investigación y donde nacerá el nuevo campus universitario y un parque científico y tecnológico.
Entre muchos otros, allí estaban el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda; el alcalde de Guadalajara, Antonio Román; la consejera de Educación, María Ángeles García; y el vicerrector de la Universidad de Alcalá de Henares, Michel Heykoop. Ellos protagonizaron, junto al presidente de Hercesa Inmobiliaria, Juan José Cercadillo –como una de las firmas que se encargarán de urbanizar el polígono– el referido acto de colocación de la primera piedra. Por delante quedarán entre 15 y 18 meses, que es el plazo temporal estimado para esta urbanización. Otra cosa será el tiempo que pasará para ver hecho realidad el campus universitario y el parque tecnológico y científico, aunque la intención es hacer simultánea su edificación con la urbanización una vez que ésta se encuentre al menos al 50 por ciento.

Características
El futuro parque tecnológico y empresarial El Ruiseñor –así se ha bautizado al proyecto– no tendrá parangón en Guadalajara. No en vano, con 1,7 millones metros cuadrados, será más grande que las dos zonas industriales juntas de Guadalajara, El Henares y El Balconcillo. La inversión privada prevista solamente para la urbanización se ha cifrado en unos 55 millones de euros, según adelantó el arquitecto, Javier Solano, quien recalcó que, además, será el primer sector de la capital alcarreña que cuente con una ordenación urbanística específica, en este caso referida al uso tecnológico. “Algo pionero en Guadalajara”, abundó. Las obras de urbanización corresponderán a la Unión Temporal de Empresas (UTE) Hercesa Inmobiliaria-Afirma Grupo Inmobiliario, dos empresas alcarreñas lideradas, respectivamente, por Juan José Cercadillo y Félix Abánades, que a cambio del desembolso económico necesario recibirán una superficie de suelo urbanizado proporcional para uso industrial, tecnológico o terciario.
El sector, a espaldas de Renfe y ubicado entre la carretera de Marchamalo (CM-1002) y la de Cabanillas (CM-9100) contará con unas excelentes comunicaciones. Una vez finiquitadas las obras de conexión de los polígonos de El Henares y Cabanillas –que el propio Solano vaticinó que será como la M-30 guadalajareña–, la Ronda Norte y la A-2 y R-2 estarán a tiro de piedra y se creará una circunvalación prácticamente completa a toda la metrópoli alcarreña.
De los 1.672.017 metros cuadrados de El Ruiseñor, 658.529 están destinados a suelo industrial; 238.163 para uso tecnológico; 93.532 para el terciario; 168.571 corresponderán a la mencionada ronda de conexión de polígonos; 151.007 para zonas verdes; 286.710 para viario público; y 75.505 para dotaciones.

Aviso para navegantes
Junto a los políticos, también el presidente de Hercesa tomó la palabra para dirigirse a los presentes durante el acto de inauguración. Tras la larga tramitación administrativa y las dificultades habidas para poner de acuerdo a todas las instituciones públicas implicadas y a los propietarios de los terrenos, Cercadillo advirtió que aún queda recorrido antes de que el proyecto vea la luz. “Vamos a seguir necesitando el apoyo de las administraciones”, recordó. “Si bien es verdad que está todo aprobado, también lo es que en el camino vamos a encontrar espinas”.
El representante de la Universidad de Alcalá de Henares, Michel Heykoop, subrayó que “espero que en no demasiado tiempo podamos disponer de estas instalaciones”. Heykoop abundó en el “acierto y la gran visión de futuro” que han tenido los que han apostado por construir un campus universitario ligado a un parque tecnológico, científico e industrial. Con este proyecto, la Universidad de Alcalá no sólo trasladará a esta zona las actuales disciplinas que ya tienen presencia en Guadalajara, sino que sumará otras cuatro nuevas carreras: Traducción e Interpretación, Comunicación Audiovisual, Odontología e Ingeniería Industrial. En cuanto al parque tecnológico y científico, que fue presentado esta misma semana, estará construido en una tercera parte en 2013 –según las previsiones– y para entonces ya se quiere contar en él con al menos 20 empresas dedicadas a la I+D+i y centros de investigación del INTA y del CSIC.
El que también deberá de ganar con la urbanización de este espacio será la zona residencial de la parte trasera de Renfe, “tradicionalmente desgajado de la estructura urbana de Guadalajara”, según reconoció ayer el arquitecto Javier Solano, y cuyos vecinos precisamente han elevado en los últimos meses el tono de demanda de reformas en su barrio al Ayuntamiento.