El ministro de Industria supervisa los últimos trabajos del Parador de Molina, antes de su apertura en septiembre
El presidente Page también viaja este viernes hasta Molina, junto con representantes de Paradores.
Importante visita la que se desarrollará este viernes en la capital del Señorío. El ministro de Industria,Jordi Hereu, supervisará las obras de un proyecto historico para la provincia de Guadalajara y la comarca molinesa, en particular, que se ha demorado en el tiempo durante casi veinte años. Ahora ya es una realidad, y este viernes, autoridades a todos los niveles podrán comprobar el estado de los trabajos, que se centran ahora en el interior.
El ministro estará acompañado por el director de Turespaña, Miguel Sanz, el presidente del Gobierno de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y la delegada del Gobierno en Castilla- La Mancha, Milagros Tolón, y el alcalde de la localidad, Francisco Montes, además del presidente de las cortes, Pablo Bellido.
El Parador de Turismo de Molina de Aragón forma parte de la red de Paradores, que preside, desde enero, Raquel Sánchez, también presente en la visita de hoy.
FOTO: OSCAR GIL/NUEVA ALCARRIA
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, asistirá así al acto de recepción, por parte de Paradores, del nuevo Parador de Turismo de Molina de Aragón.
Fernando Tizón, director del Parador de Sigüenza, dirige el nuevo establecimiento, y se ecargará de guiar a toda la comitiva por el que se configura como emblema turístico en la comarca. Se trata de un hotel de cuatro de 4 estrellas con 22 habitaciones, dos de ellas suites.
De arquitectura moderna, lineas rectas, grandes ventanales y con amplias zonas verdes, El Parador de Molina es fruto de una inversión de 20 millones de euros.
Tiene 7.000 metros cuadrados que se ubican en una parcela de 42.000. Dispone de 22 habitaciones distribuidas en tres plantas, bar-cafetería, comedores, dos salones de convenciones con un aforo de entre 300 y 500 personas, salones sociales, jardines y aparcamiento para 60 vehículos.
Los trabajos continuarán durante estos dos meses y, según está previsto, será en el mes de setiembre cuando comiéncen a llegar los primeros huéspedes.
Por delante queda todavía mucho trabajo para estos meses de julio y agosto, en materia instalaciones, decoración, selección de personal, formación, además de acondicionar las calles del entorno. En las más próximas al edifico principal los trabajos están ultimados pero ahora falta la actuación en las más alejadas.