El Papa y Zapatero denuncian la "inmoralidad de los especuladores" en su primer encuentro en el Vaticano
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
El Papa Benedicto XVI y el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, abordaron esta mañana el tema de la crisis económica y reafirmaron los "valores y principios" que deben caracterizar al sistema económico, el cual "no se debe centrar en la especulación".
El Pontífice y Zapatero hablaron a solas, con la ayuda de un intérprete, durante alrededor de media hora. Según explicó más tarde Zapatero a los medios de comunicación, uno de los principales temas del encuentro fue "la crisis y la respuesta que estamos dando a nivel europeo para afrontarla".
En particular, resaltaron la necesidad de "reafirmar los valores y principios" que deberían caracterizar una economía que esté "al servicio de los ciudadanos" y que "no se debe centrar en la especulación", detalló el presidente del Gobierno.
Fuentes de Moncloa explicaron que ambos coincidieron en denunciar "la situación de desamparo" en que se encuentran actualmente tantas personas a causa de la crisis, así como "la inmoralidad de los especuladores".
Zapatero, que precisó que el encuentro "se corresponde con la tradición" de que los presidentes de turno de la Unión Europea mantengan una comunicación fluida con el Vaticano, también habló con el Pontífice de algunos "temas en los que ha habido debate" con respecto a las posiciones de la Iglesia, tales como la "educación y la libertad religiosa", concretó. Aun con todo, precisó, que el intercambio de puntos de vista entre ambos se desarrolló en un "tono absolutamente correcto".
El presidente español también relató al Pontífice los propósitos y contenidos de la Alianza de Civilizaciones que está promoviendo desde que llegó al Gobierno y cuya intención es promover "el espíritu de libertad y convivencia" entre todas las religiones, explicó.
El Papa, por su parte, "manifestó su agradecimiento al Gobierno español por su colaboración" en la preparación de las próximas visitas que el Pontífice realizará a España, la primera a Santiago de Compostela y Barcelona, en noviembre de este año, y la segunda a Madrid, en agosto de 2011.
"BUEN MOMENTO" RELACIONES CON VATICANO
Con todo, Zapatero concluyó que las relaciones entre el Gobierno y el Vaticano atraviesan "un buen momento" y reiteró "la máxima disponibilidad" del Gobierno para que estos dos viajes del Papa a España sean "un éxito".
Tras el encuentro con el Papa, el presidente español se reunió con el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Tarcisio Bertone, y el secretario para las Relaciones con los Estados, el arzobispo Dominique Mamberti.
En esta segunda reunión, en el que también participaron el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, y el secretario general de la presidencia del Gobierno, Bernardino León, también se habló de la situación en Cuba.
En concreto, fuentes de Moncloa explicaron que Zapatero "apreció el papel muy positivo y constructivo" y la "sensibilidad" que está teniendo la Iglesia católica en las negociaciones con el Gobierno cubano. Ambas partes subrayaron su intención de "cooperar" para promover "un diálogo exigente" con Cuba.
Otro de los temas de política internacional que se afrontaron en estos coloquios es el conflicto en Oriente Próximo, sobre el que se destacó que, "a pesar de lo sucedido", en referencia al ataque de Israel a la flotilla humanitaria, "es importante seguir apostando por el diálogo", concretó el portavoz de Moncloa.
La visita, que fue calificada de "cordial" por el Vaticano, también dio lugar a un intercambio de regalos. El Pontífice agasajó a Zapatero con un bajo-relieve en bronce y le explicó que es "la representación del Vaticano tal y como era en 1600". El presidente ofreció al Pontífice un libro de historia del Real Monasterio de El Escorial (Madrid), que éste consideró "muy bonito".
PRIMERA VISITA AL VATICANO
Se trata de la primera visita que Zapatero realiza al Vaticano desde que Benedicto XVI fue elegido Papa, en abril de 2005. Aun con todo, es el segundo encuentro que ambos mantienen tras el que celebraron en junio de 2006 con motivo de la Jornada Mundial de la Familia (JMJ) de Valencia.
Al término de su visita, Zapatero se trasladó a la sede del Gobierno italiano, el Palazzo Chigi, para entrevistarse con el primer ministro del país, Silvio Berlusconi. El objetivo de este encuentro es preparar el Consejo Europeo que se celebrará en Bruselas la semana que viene y que se centrará en la crisis y las medidas de ajuste tomadas por los distintos países para afrontarla.
En seguimiento del protocolo Vaticano, los mandatarios extranjeros que visitan al Papa intentan evitar reunirse el mismo día con el primer ministro italiano. El motivo de esta indicación es dejar claro que la soberanía del Vaticano es distinta a la de Italia. Sin embargo, fuentes de Moncloa explicaron que, en este caso, la Santa Sede ha entendido el interés que tenía este segundo encuentro con Berlusconi, dado el actual contexto económico y la cercanía de la próxima cumbre de líderes europeos.
En particular, resaltaron la necesidad de "reafirmar los valores y principios" que deberían caracterizar una economía que esté "al servicio de los ciudadanos" y que "no se debe centrar en la especulación", detalló el presidente del Gobierno.
Fuentes de Moncloa explicaron que ambos coincidieron en denunciar "la situación de desamparo" en que se encuentran actualmente tantas personas a causa de la crisis, así como "la inmoralidad de los especuladores".
Zapatero, que precisó que el encuentro "se corresponde con la tradición" de que los presidentes de turno de la Unión Europea mantengan una comunicación fluida con el Vaticano, también habló con el Pontífice de algunos "temas en los que ha habido debate" con respecto a las posiciones de la Iglesia, tales como la "educación y la libertad religiosa", concretó. Aun con todo, precisó, que el intercambio de puntos de vista entre ambos se desarrolló en un "tono absolutamente correcto".
El presidente español también relató al Pontífice los propósitos y contenidos de la Alianza de Civilizaciones que está promoviendo desde que llegó al Gobierno y cuya intención es promover "el espíritu de libertad y convivencia" entre todas las religiones, explicó.
El Papa, por su parte, "manifestó su agradecimiento al Gobierno español por su colaboración" en la preparación de las próximas visitas que el Pontífice realizará a España, la primera a Santiago de Compostela y Barcelona, en noviembre de este año, y la segunda a Madrid, en agosto de 2011.
"BUEN MOMENTO" RELACIONES CON VATICANO
Con todo, Zapatero concluyó que las relaciones entre el Gobierno y el Vaticano atraviesan "un buen momento" y reiteró "la máxima disponibilidad" del Gobierno para que estos dos viajes del Papa a España sean "un éxito".
Tras el encuentro con el Papa, el presidente español se reunió con el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Tarcisio Bertone, y el secretario para las Relaciones con los Estados, el arzobispo Dominique Mamberti.
En esta segunda reunión, en el que también participaron el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, y el secretario general de la presidencia del Gobierno, Bernardino León, también se habló de la situación en Cuba.
En concreto, fuentes de Moncloa explicaron que Zapatero "apreció el papel muy positivo y constructivo" y la "sensibilidad" que está teniendo la Iglesia católica en las negociaciones con el Gobierno cubano. Ambas partes subrayaron su intención de "cooperar" para promover "un diálogo exigente" con Cuba.
Otro de los temas de política internacional que se afrontaron en estos coloquios es el conflicto en Oriente Próximo, sobre el que se destacó que, "a pesar de lo sucedido", en referencia al ataque de Israel a la flotilla humanitaria, "es importante seguir apostando por el diálogo", concretó el portavoz de Moncloa.
La visita, que fue calificada de "cordial" por el Vaticano, también dio lugar a un intercambio de regalos. El Pontífice agasajó a Zapatero con un bajo-relieve en bronce y le explicó que es "la representación del Vaticano tal y como era en 1600". El presidente ofreció al Pontífice un libro de historia del Real Monasterio de El Escorial (Madrid), que éste consideró "muy bonito".
PRIMERA VISITA AL VATICANO
Se trata de la primera visita que Zapatero realiza al Vaticano desde que Benedicto XVI fue elegido Papa, en abril de 2005. Aun con todo, es el segundo encuentro que ambos mantienen tras el que celebraron en junio de 2006 con motivo de la Jornada Mundial de la Familia (JMJ) de Valencia.
Al término de su visita, Zapatero se trasladó a la sede del Gobierno italiano, el Palazzo Chigi, para entrevistarse con el primer ministro del país, Silvio Berlusconi. El objetivo de este encuentro es preparar el Consejo Europeo que se celebrará en Bruselas la semana que viene y que se centrará en la crisis y las medidas de ajuste tomadas por los distintos países para afrontarla.
En seguimiento del protocolo Vaticano, los mandatarios extranjeros que visitan al Papa intentan evitar reunirse el mismo día con el primer ministro italiano. El motivo de esta indicación es dejar claro que la soberanía del Vaticano es distinta a la de Italia. Sin embargo, fuentes de Moncloa explicaron que, en este caso, la Santa Sede ha entendido el interés que tenía este segundo encuentro con Berlusconi, dado el actual contexto económico y la cercanía de la próxima cumbre de líderes europeos.