El parque de Bomberos recibe mejoras en sus instalaciones y nuevos equipos de trabajo

Tras varios años viendo cómo se iba deteriorando su lugar de trabajo habitual, la plantilla del Cuerpo de Bomberos de Guadalajara está por estos días de enhorabuena, después de que el Ayuntamiento capitalino haya invertido 140.000 euros en diversas mejoras de sus instalaciones y en adquirir nuevo material que asegurará la labor de los efectivos, lo que redundará en beneficios para los ciudadanos. Se trata de la primera gran reforma para gran parte de las instalaciones del parque, que se encontraban ya muy deterioradas y obsoletas.
El alcalde de la ciudad, Antonio Román, acompañado del jefe del Servicio de Extinción de Incendios, Alberto Oliver –que ejerció de guía–, y la concejala de Seguridad, María José Agudo, visitó ayer las instalaciones para comprobar “el resultado de la inversión que, producto de la última modificación de crédito del pasado ejercicio, se ha realizado aquí, en el parque de Bomberos”, como dijo el propio alcalde.
Como prosiguió Román, “hemos destinado un total de 140.000 euros, una cantidad de dinero importante, en mejorar los recursos materiales de este parque de Bomberos”.

Mejoras exteriores e interiores
Se ha llevado a cabo un lavado de cara tanto en las instalaciones externas del parque, como en sus estancias interiores, donde los efectivos pasan gran parte de su tiempo. Concretamente, entre las mejoras realizadas en el exterior, destaca la construcción de un nuevo almacén de seguridad. Con el objetivo de “cumplir la normativa de seguridad y para garantizar la seguridad de los bomberos”, se ha construido esta nueva caseta donde, además de la limpieza de material, se va a realizar, principalmente, la carga de las botellas de oxígeno que llevan los bomberos cuando tienen que actuar en situaciones de riesgo en las que se hace necesario el uso de estos dispositivos –por las condiciones de densidad de humo–.
Román también pudo comprobar cómo, gracias a la inversión municipal, se ha recuperado un viejo camión que hacía tiempo que no se utilizaba. “Se ha carrozado completamente, consiguiendo compartimentalizar todo el camión”, señaló el alcalde, además de equiparlo y prepararlo para cualquier salida de los efectivos.
La nueva pintura del parque –un trabajo que llevaba mucho tiempo sin realizarse– contribuye a dar una nueva imagen al mismo, así como las nuevas seis puertas automáticas, todas de color rojo, que dan salida y entrada a los camiones de los Bomberos. En lo que concierne a las mejoras externas, los trabajos han concluido con la cobertura, con planchas metálicas de seguridad, de los dos fosos existentes.
Respecto a las estancias interiores, la reforma más notable ha sido la de la cocina, pues se ha sustituido por completo, algo que no se había hecho desde la misma construcción del parque, a pesar del uso diario que se le da a la misma. Igualmente, el comedor de los bomberos –que tampoco se había cambiado nunca– se ha pintado y se ha renovado con nuevo mobiliario –sillones, tresillos, mesas, sillas, etcétera–.

Nuevos equipos y material
Además de las mejoras en la estructura y en las instalaciones del parque de Bomberos, el Servicio de Extinción de Incendios ha destinado parte de la inversión municipal a distintos equipos de trabajo, así como a material necesario para sus labores de atención y rescate. Como señaló el propio Román, “se han adquirido nuevas camillas para realizar la inmovilización y para sacar a posibles heridos en situaciones de dificultad, y se ha comprado material nuevo para ello”. Concretamente se trata de camillas especiales de rescate para espacios confinados que tanto Román como Agudo pudieron observar.
Ambos ediles también vieron in situ el funcionamiento de unos nuevos estabilizadores de vehículos, “necesarios”, como explicó Román, “para cuando hay que actuar, en caso de vuelco, para garantizar la seguridad tanto del bombero como de los propios accidentados que pudieran estar en el interior del vehículo cuando hay que proceder a cortarlo”. El Cuerpo preparó una demostración de su funcionamiento colocando un vehículo volcado en el exterior del parque.
Además, se han adquirido nuevas espalderas, botellas de oxígeno, varias unidades generadoras automáticas de espuma, una devanadera, puntales para la estabilización de los vehículos, dos bombas de achique, tres aparatos GPS y una rampa de seguridad de recarga de botellas, equipos todos ellos dirigidos a asegurar el trabajo diario de los propios bomberos.
Todo, como concluyó Román, con el objetivo de “mejorar los recursos materiales de uno de los cuerpos de seguridad del Ayuntamiento, es un compromiso”. Un compromiso que no quedará ahí, pues el alcalde anunció más inversiones para los Bomberos de Guadalajara durante el ejercicio 2010. “Las solicitudes que me ha hecho –el jefe del Servicio– creo que podremos atenderlas a lo largo del presente año y, en el momento en que estén definidas y tengamos consignación presupuestaria, las anunciaremos”.

Cubriendo plazas vacantes
Por último, el alcalde de la ciudad explicó el punto en el que se encuentran las oposiciones para cubrir las plazas que durante el pasado año quedaron vacantes en el Cuerpo de Bomberos por jubilaciones y defunciones –cabe recordar que en 2009 fallecieron dos bomberos que se encontraban en activo–, proceso que culminará cubriendo dichas plazas hasta alcanzar nuevamente los 62 efectivos. En los últimos años se ha incrementado la plantilla real en 12 o 13 bomberos, como recordó el alcalde, cifra que por las nombradas bajas ha vuelto a dejar a la plantilla en menos del número ideal, aunque se volverá a recuperar en pocos meses. “En el presente año se van a celebrar las oposiciones, ya están en marcha las de sargento, y posteriormente se cubrirán las que quedan vacantes producto de estas jubilaciones y de estos fallecimientos para llegar al total de la plantilla”, dijo Román. Por su parte, Oliver confirmó que se trata de un buen número, que respeta las condiciones pactadas en el acuerdo económico y social de la plantilla y que les permite “trabajar bien”.