El parque de la Alameda

Muchos seguntinos, también los que disfrutamos allí de los siempre agradables días de verano y nos sentimos un poco como tales, estamos ilusionados con la firma del protocolo para la remodelación del parque de la Alameda, lugar de ocio, recreo, paseo, encuentros y caña o chocolate, de obligado y feliz paso. El compromiso ya lo anunció casi hace un año el presidente regional, pero ahora firma un papel con la alcaldesa y nos avanzan algo sobre el proyecto en el que se invertirá un millón de euros por parte de la Junta con la participación de la Diputación. Además, el consejero, Nacho Hernando, pone como fecha de arranque septiembre. No sabemos plazos, aunque confiamos en verlo avanzado al menos antes de las elecciones de 2023 por como es la política.

  Nos encanta ir a la Alameda, sentarnos un rato en una terraza, ver a los pequeños en los columpios, entrar a las Clarisas o llegar hasta la puerta de las Ursulinas, pero no comprendemos bien que haya que ponerse zapatillas o volver a casa con los zapatos llenos de polvo, que algunos amigos nos digan que no pueden bajar por alergia, su poca iluminación, la carencia o vejez de algunos elementos de ornamentación, ni siquiera  dispone de unos bancos con respaldo para sentarse. Precisa de esa reforma en sus puertas, quioscos, pirámides, señalizaciones, de renovado mobiliario urbano, mejor pavimentación, más allá del estado en que se encuentren sus canalizaciones de agua, saneamiento, instalaciones eléctricas o telecomunicaciones. 

  Del proyecto nos hubiese gustado ver planos, imágenes, más en estos tiempos en que la tecnología permite hacerse una idea bastante aproximada a la realidad. De momento sabemos que habrá reagrupación de los juegos y de la zona de restauración y de uso comercial, o sea de los puestos que llenan cada año el paseo en fiestas. Nos quedan dudas sobre los kioscos del centro, la chocolatería o el templete de la música. Pero, poco a poco, iremos conociendo detalles, de momento estamos contentos porque algo importante avanza para hacer aún más especial acogedor, agradable y bonito un parque al que tenemos como uno de nuestros lugares de preferencia.