El Pleno de Cabanillas aprueba el Presupuesto de 2021 con 11 votos a favor, 5 abstenciones y sólo 1 en contra
El Pleno del Ayuntamiento de Cabanillas del Campo ha aprobado este jueves 18 de febrero el Proyecto de Presupuestos para 2021. Las estimación de cuentas de este ejercicio ha salido adelante con 11 votos favorables (de los 9 concejales del Equipo de Gobierno de PSOE y Unidas Podemos, más los dos ediles de Ciudadanos), mientras que los 5 ediles del el Grupo Popular se han abstenido, y el único voto en contra ha sido el del concejal de Vox. El edil de este grupo político presentó a su vez una enmienda a la totalidad contra el Presupuesto planteado por el Equipo de Gobierno, pero su moción fue ampliamente rechazada, con el voto en contra de los otros 16 ediles del consistorio.
“Este es un Presupuesto razonable, que está bien calculado como lo estuvieron los anteriores que hemos elaborado, y que responde a las necesidades de la localidad, especialmente teniendo en cuenta la posibilidad que al fin tendremos este año de ejecutar muchas obras e inversiones que hasta ahora no podíamos acometer por las restricciones del techo de gasto. El Presupuesto atiende a todos los servicios y programas municipales que desarrollamos en ámbitos como el Empleo, la Cultura o los Servicios Sociales, y al resto de obligaciones y gastos fijos”, explicaba el alcalde, José García Salinas, en la presentación de las cuentas. “Tiene todos los informes de los técnicos municipales firmados favorablemente, lo que avala que están técnicamente bien realizados y que cumplen la legislación sobre estabilidad presupuestaria. Y responde, como hemos hecho siempre, a criterios de prudencia a la hora de estimar los ingresos y los gastos”, añadía.
Salinas comentó que es el sexto Presupuesto que presenta desde que llegó a la Alcaldía, y recordó que los cinco anteriores han demostrado la capacidad de gestión económica del Equipo de Gobierno: “Hemos demostrado que somos muy pulcros en este aspecto; en todo este tiempo hemos logrado no incurrir en déficit ningún año, tenemos el Ayuntamiento completamente saneado, atendemos las obligaciones de pago en tiempo y forma, se recauda lo previsto, y desde hace dos años incluso funcionamos sin deber un euro en préstamos bancarios, porque logramos eliminar toda la deuda financiera del consistorio”, exponía el alcalde.
Como ya informó el Ayuntamiento cuando se presentó el proyecto, las cuentas establecidas para 2021 hacen una estimación de ingresos y gastos de 12’2 millones de euros. Es ligeramente inferior al Presupuesto de 2020, que fue de 12’6 millones, algo que se explica fundamentalmente en que este año se recaudarán unos 400.000 euros menos en concepto de IBI, ya que este impuesto se ha reducido un 6'5%. Por lo demás, las cuentas son bastante similares a las del año anterior en todos los capítulos de gasto, y la única diferencia sustancial está en la parte de inversiones: Dotada inicialmente con 500.000 euros, se irá complementando con ingresos procedentes de remanentes de tesorería, aprovechando la modificación legal que ha eliminado en la práctica este año el “techo de gasto” que se imponía por el Ministerio de Economía.
De hecho, hay que reseñar que en esta misma sesión plenaria, además del Presupuesto, se aprobaban las dos primeras incorporaciones sometidas a financiación afectada para este año, por montante de casi 1'3 millones de euros para inversión. Son 862.000 euros para la futura sede de Policía Local y Protección Civil (que salió adelante con los votos de PSOE, Unidas Podemos y Ciudadanos, y la abstención de PP y Vox); y casi 500.000 euros para finalizar la renovación de colectores de la zona baja del municipio, que se aprobó por unanimidad.
Otras inversiones que recoge el Presupuesto son 235.000€ para finalizar el kiosco del Parque Elena de la Cruz; 87.000€ para pavimentaciones; 50.000€ para un vehículo policial todo terreno, y otros 50.000€ para reponer mobiliario en parques y jardines, entre otras partidas menores. Entre las obras que el alcalde anunció que se acometerán con ingresos de remanentes de tesorería citó proyectos como la construcción del Centro Fitness, la ampliación de la Biblioteca, más trabajos de acerados y pavimentos, un carril verde hasta “El Soto”, o dar los primeros pasos de la nueva piscina cubierta.
En el debate de las cuentas, los portavoces de Unidas Podemos y Ciudadanos coincidieron al señalar que el Presupuesto estaba bien ajustado y que responde a las necesidades del municipio. Manuel Gallego, de UP, destacó que “consolidan el escudo social” planteado para ayudar a sectores que están sufriendo la crisis derivada de la pandemia de COVID-19; y Almudena Sanz, de Ciudadanos, defendió que están hechos “con sentido común”, y destacó que el Equipo de Gobierno haya escuchado y recogido algunas de sus propuestas.
La única oposición frontal al Presupuesto fue la del concejal de Vox, Serafín Tallón, que insistió reiteradamente en que a su juicio las cuentas “inflan artificialmente el gasto por encima de las obligaciones”, y consideró que el Ayuntamiento tiene “demasiados ingresos”.
Por su parte, el portavoz del PP, Jaime Celada, reconoció que efectivamente son unos presupuestos similares a los del año anterior, pero planteó discrepancias en algunas de las prioridades que marcan estas cuentas: “Nosotros las haríamos de otra manera”, dijo. No obstante, anunció que su grupo se abstenía y no votaba en contra para colaborar con la gestión del Ayuntamiento en un año de dificultades económicas derivadas de la pandemia.
Otros asuntos económicos
Además del Presupuesto, el Pleno abordó otros asuntos económicos. Así, se aprobó por unanimidad la devolución de unos avales retenidos a la empresa Jesthisa desde el año 2013, por trabajos de urbanización en sectores residenciales de los nuevos desarrollos (SR-8, SR-9 y SR-10), por un montante de casi 1'2 millones de euros en concepto de garantías, que ahora se procede a reponer, como marca la legislación.
Otro asunto del ámbito económico que salió aprobado fue una petición cursada al Ayuntamiento por la asociación regional que representa a los supermercados y grandes superficies, en la que se pedía que se habilite como festivo de apertura comercial el viernes 30 de abril, que es festivo local, en lugar del inicialmente previsto domingo 2 de mayo. El punto contó con la unanimidad de los 17 concejales.