El PP dice que "las aguas están revueltas" en el PSOE por los últimos acontecimientos en Aranzueque y Fontanar
01/10/2010 - 09:45
Por: Redacción
El secretario general del Partido Popular de Guadalajara y diputado regional, Porfirio Herrero, ha mostrado su sorpresa y su preocupación por los últimos hechos que han acontecido en dos municipios de la provincia como son Aranzueque y Fontanar. Herrero se ha cuestionado hasta qué punto deben estar enfrentados en el PSOE sus propios dirigentes cuando ni tan siquiera se apoyan en público, airean sus propias diferencias y no cumplen la disciplina de partido.
El secretario general del Partido Popular de Guadalajara y diputado regional, Porfirio Herrero, ha mostrado su sorpresa y su preocupación por los últimos hechos que han acontecido en dos municipios de la provincia como son Aranzueque y Fontanar.
Herrero se ha cuestionado hasta qué punto deben estar enfrentados en el PSOE sus propios dirigentes cuando ni tan siquiera se apoyan en público, airean sus propias diferencias y no cumplen la disciplina de partido. No en vano, cabe recordar que en el caso de Aranzueque, el nuevo alcalde tan sólo salió con tres votos favorables, pertenecientes a tres de los concejales socialistas, y cuatro votos en blanco (los tres del Partido Popular y uno de los ediles del PSOE). Para el diputado regional, si después de dimitir a un alcalde propio, no son capaces de obtener la mayoría con una nueva propuesta de alcalde, mal empiezan y seguramente, mal acabarán.
En el caso de Fontanar, Herrero ha desvelado que tras las últimas informaciones que ha conocido, parece que la totalidad de los concejales del PSOE están enfrentados abiertamente con la alcaldesa de su propio partido, el PSOE, y amenazan con presentar su dimisión para obligarla a que cese en todos sus cargos.
Según el secretario provincial, si a esta cadena de despropósitos le unimos el escándalo y el pelotazo que ha propiciado la aprobación de la
LOTAU, se demuestra una vez el estado de descomposición interno que vive el PSOE. No en vano, es manifiesta la falta evidente de apoyos con los que cuentan los socialistas tanto en sus propias filas como en la sociedad al aprobar dos leyes tan sumamente importantes para el futuro de Castilla La Mancha como la Ley Electoral y la LOTAU.
Porfirio Herrero ha lamentado este panorama caracterizado por el sectarismo, la división y el interés particular de unos pocos. Parece que las aguas bajan revueltas en el PSOE; los hechos no pintan nada bien ni para el PSOE provincial, ni para el regional, ha concluido.
Herrero se ha cuestionado hasta qué punto deben estar enfrentados en el PSOE sus propios dirigentes cuando ni tan siquiera se apoyan en público, airean sus propias diferencias y no cumplen la disciplina de partido. No en vano, cabe recordar que en el caso de Aranzueque, el nuevo alcalde tan sólo salió con tres votos favorables, pertenecientes a tres de los concejales socialistas, y cuatro votos en blanco (los tres del Partido Popular y uno de los ediles del PSOE). Para el diputado regional, si después de dimitir a un alcalde propio, no son capaces de obtener la mayoría con una nueva propuesta de alcalde, mal empiezan y seguramente, mal acabarán.
En el caso de Fontanar, Herrero ha desvelado que tras las últimas informaciones que ha conocido, parece que la totalidad de los concejales del PSOE están enfrentados abiertamente con la alcaldesa de su propio partido, el PSOE, y amenazan con presentar su dimisión para obligarla a que cese en todos sus cargos.
Según el secretario provincial, si a esta cadena de despropósitos le unimos el escándalo y el pelotazo que ha propiciado la aprobación de la
LOTAU, se demuestra una vez el estado de descomposición interno que vive el PSOE. No en vano, es manifiesta la falta evidente de apoyos con los que cuentan los socialistas tanto en sus propias filas como en la sociedad al aprobar dos leyes tan sumamente importantes para el futuro de Castilla La Mancha como la Ley Electoral y la LOTAU.
Porfirio Herrero ha lamentado este panorama caracterizado por el sectarismo, la división y el interés particular de unos pocos. Parece que las aguas bajan revueltas en el PSOE; los hechos no pintan nada bien ni para el PSOE provincial, ni para el regional, ha concluido.