El primer pregón femenino abre las fiestas

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

 (Foto: NA)
Por: Javier Pastrana
SIGÜENZA
Miles de personas se dieron cita ayer en la plaza Mayor de Sigüenza para presenciar el pregón que daba el pistoletazo de salida a los festejos de la localidad. En esta ocasión, la encargada de desear una fiestas perfectas a los vecinos era la peña El Regate, que también cumplía su 25 aniversario.
Para terminar de aderezar la cita, una fecha que ya quedará grabada en los anales de la historia seguntina. Por primera vez una mujer, dos en este caso, leían el pregón. Las elegidas fueron Belén López y Begoña Peña. “Todo fue mejor de lo que esperaba. Nunca había leído nada delante de tanta gente y en una ocasión tan especial. Era el aniversario de la peña y nosotras las primeras pregoneras”, explica López. Todos estos detalles hicieron de ésta una ocasión “cargada de emoción”. En su pregón, compuesto por ocho octavas asonantadas, se relata “la vivencia de los que durante años hemos vivido estas fiestas”. La fiesta, el alcohol, “los ligoteos entre chicos y chicas”, y otros aspectos, fueron recordados ante los miembros de las más de 40 peñas que hay en el municipio. El propio alcalde, Francisco Domingo, destacó el elevado número de asistentes a la lectura del pregón y el hecho de que “no se produjo ningún incidente durante los festejos”. Posteriormente, horas después, los más pequeños retomaron el protagonismo con un encierro infantil y los gigantes y cabezudos. Además se celebró una de las novedades de este año, el espectáculo de caballos.

Del pregón al libro de firmas del Ayuntamiento

Las mujeres adquirieron un papel fundamental en el primer día de la fiestas de la Ciudad del Doncel. A la presencia de la reina hubo que sumar la de las representantes de la peña El regate. Tanto Belén López, como Begoña Peña, primeras mujeres en dar el pregón en la historia de las fiestas seguntinas, dejaron su estampa en al libro de honor del Ayuntamiento, según relata la propia Belén. El resto de la noche la dedicaron a la primera toma de contacto con las fiestas. Las visitas obligadas a la Alameda y al propio local se complementaron con otro recorrido ineludible, el que se hace por el resto de peñas que se despliegan a lo largo de la localidad.