El PSOE denuncia el mal estado del Barranco del Alamín "que va de mal en peor"
01/10/2010 - 09:45

Por: Redacción
La dejadez y la desidia de este equipo de gobierno empiezan a tener graves consecuencias en la ciudad. Así lo entiende el grupo socialista tras visitar una vez más (lo han hecho hasta diez veces en el último año) el Barranco del Alamín. Este parque que fue la obra más emblemática del gobierno de José María Bris y que durante el mandato de Jesús Alique obtuvo todo tipo de cuidados y un mantenimiento adecuado, va camino de convertirse con Antonio Román en un vertedero.
El parque está muy sucio pero lo más grave es el estado del arroyo, el elemento más característico de esta zona, que se ha convertido en una balsa maloliente de fango y basuras. Luis Sevillano, concejal socialista, responsabiliza de esta situación a la desidia del concejal de parques y jardines, quien no muestra ningún interés por el mantenimiento y la limpieza del sistema de bombeo del agua lo que ha hecho que no funcione y que el agua lleve más de quince días sin correr por el arroyo.
La consecuencia de este abandono es que en pleno verano y con las altas temperaturas propias de esta época, el agua del arroyo en vez de ser un elemento refrescante se ha convertido en un charco lleno de lodo y fango que despide muy mal olor.
El concejal del PSOE también ha alertado de la existencia de algunas vallas rotas en la zona del auditorio del Barranco que suponen un peligro para los niños que se acercan a ellas.
Ante esta situación, vuelve a hace un llamamiento al equipo de gobierno para que visite el Barranco y tome medidas inmediatas para que este parque que era una de las señas de identidad de Guadalajara no termine convertido en lo que lleva camino de ser: un basurero.
La consecuencia de este abandono es que en pleno verano y con las altas temperaturas propias de esta época, el agua del arroyo en vez de ser un elemento refrescante se ha convertido en un charco lleno de lodo y fango que despide muy mal olor.
El concejal del PSOE también ha alertado de la existencia de algunas vallas rotas en la zona del auditorio del Barranco que suponen un peligro para los niños que se acercan a ellas.
Ante esta situación, vuelve a hace un llamamiento al equipo de gobierno para que visite el Barranco y tome medidas inmediatas para que este parque que era una de las señas de identidad de Guadalajara no termine convertido en lo que lleva camino de ser: un basurero.