El PSOE denuncia que Román se carga el Programa de Integración Social que atendía a 800 personas
01/10/2010 - 09:45
Por: Redacción
El alcalde de Guadalajara, Antonio Román, culminará el año que viene lo que ha empezado este año: la desaparición del Plan de Integración Social, conocido como PRIS, un programa a través del cual más de 800 personas que viven en una situación de exclusión social y de pobreza recibían atención social, psicológica, familiar, personal y laboral.
Este plan que venía funcionando desde hace más de seis años ha dejado de prestarse en 2008 por la falta de sensibilidad del Alcalde, que no trabaja por lo ciudadanos más desfavorecidos de la sociedad y que no tiene las políticas sociales entre sus prioridades, señala Ángela Ambite, concejala del PSOE. Con ello, el Ayuntamiento de Guadalajara se convierte en el único de la provincia que no desarrolla este plan.
La concejala socialista ha dado un perfil de las personas que venían recibiendo atención a través de este programa. Se trata de personas de lo barrios más deprimidos de la ciudad, entre ellos Las Ramblas, Escritores, Bejanque, Alamín, San Vicente de Paúl y el poblado de la Hispano Suiza. Un 45% de ellos son menores y un 35% mujeres. Son, en su mayoría, familias jóvenes con niños a su cargo, el 69% de ellas españolas y el 31% inmigrantes.
En cuanto a sus circunstancias personales, hay que destacar que son, fundamentalmente, personas en situación de pobreza económica, con ingresos muy bajos, con un alto grado de analfabetismo funcional, parados de larga duración o con empleos precarios o sumergidos. No suelen tener vivienda propia sino en alquiler o de alguna entidad social. El nivel de absentismo y de fracaso escolar entre los niños es muy alto. Estas personas sufren frecuentes problemas de depresión mientras que sus familias están, en muchos casos, en situación de aislamiento social o desestructuradas.
Ángela Ambite señala que la de estas familias es una cruda realidad que en tiempos de crisis se hace aún más cruda por lo que estas personas necesitan más que nadie del apoyo y de la solidaridad de las administraciones públicas. Además, destaca la importancia que tenía la coordinación de este programa con otros que llevan a cabo organizaciones altruistas como Cruz Roja, Cáritas, Accem, Guadacoge, etc.
La concejala socialista ha hecho un repaso por los hechos que han precedido la desaparición del PRIS. El primero de ellos fue el despido injusto, caprichoso y arbitrario de nueve trabajadores del PRIS por parte del Alcalde de Guadalajara en diciembre de 2007. Estos despidos fueron considerados improcedentes por nueve sentencias de los juzgados de la social, lo que costó cerca de 200.000 euros al Ayuntamiento de la capital.
El segundo paso para eliminar el PRIS se produjo en enero, cuando la Consejería de Bienestar Social publicó la orden para dar ayudas a los ayuntamientos para la puesta en marcha de los planes de integración social. El Ayuntamiento de Guadalajara solicitó ayuda para dos proyectos pero lo hizo careciendo de gran parte de la documentación exigida, la cual le fue pedida por la Junta de Comunidades hasta en tres ocasiones.
En julio de este año, la concejala de Servicios Sociales decidió renunciar a estos dos proyectos y solicitar subvención para otro distinto pero lo hizo fuera de plazo por lo que fue rechazado por los técnicos de la Consejería de Bienestar Social.
El resultado de la desidia y de la falta de voluntad del PP es que, a punto de finalizar el año 2008, no se ha desarrollado el PRIS en todo el año en la ciudad de Guadalajara, se ha perdido la subvención del Gobierno regional para este concepto y se han tenido que pagar las indemnizaciones por los nueve despidos improcedentes. Ángela Ambite valora todo este dinero en cerca de 500.000 euros que el Alcalde ha despreciado. Por ello, pide a Román que deje de practicar el victimismo de manera sectaria y partidista para conseguir votos porque sólo hay dos víctimas, los más de 800 ciudadanos que se han quedado sin recibir atención social y los nueve trabajadores que han perdido su empleo por un capricho del Alcalde.
Ambite teme que la desaparición del PRIS en Guadalajara se culminará en 2009 ya que el PP ha disminuido la partida destinada a estos programas en un 92%, pasando de 247.000 a 20.000 euros lo que nos hace temer que ni siquiera se molestarán en presentar proyectos a la convocatoria de la Junta de Comunidades.
Disminución drástica de la plantilla
Por otro lado, la concejala del PSOE ha denunciado que, desde que gobierna el PP, la plantilla de trabajadores de los Servicios Sociales del Ayuntamiento ha sufrido una reducción drástica. A los nueve trabajadores del PRIS despedidos hay que sumar dos vacantes que hay sin cubrir y otros cuatro trabajadores que debían haber contratado dentro del Plan Concertado. Esto hace que a fecha de hoy haya sólo 14 funcionarios intentando sacar adelante los Servicios Sociales del Ayuntamiento los cuales a pesar de contar con una plantilla muy mermada, hacen su trabajo con gran profesionalidad.
Ángela Ambite considera que con este equipo de gobierno, los servicios sociales en Guadalajara han tocado fondo y muchos nos tememos que la situación puede empeorar aún más en los próximos meses.
La concejala socialista ha dado un perfil de las personas que venían recibiendo atención a través de este programa. Se trata de personas de lo barrios más deprimidos de la ciudad, entre ellos Las Ramblas, Escritores, Bejanque, Alamín, San Vicente de Paúl y el poblado de la Hispano Suiza. Un 45% de ellos son menores y un 35% mujeres. Son, en su mayoría, familias jóvenes con niños a su cargo, el 69% de ellas españolas y el 31% inmigrantes.
En cuanto a sus circunstancias personales, hay que destacar que son, fundamentalmente, personas en situación de pobreza económica, con ingresos muy bajos, con un alto grado de analfabetismo funcional, parados de larga duración o con empleos precarios o sumergidos. No suelen tener vivienda propia sino en alquiler o de alguna entidad social. El nivel de absentismo y de fracaso escolar entre los niños es muy alto. Estas personas sufren frecuentes problemas de depresión mientras que sus familias están, en muchos casos, en situación de aislamiento social o desestructuradas.
Ángela Ambite señala que la de estas familias es una cruda realidad que en tiempos de crisis se hace aún más cruda por lo que estas personas necesitan más que nadie del apoyo y de la solidaridad de las administraciones públicas. Además, destaca la importancia que tenía la coordinación de este programa con otros que llevan a cabo organizaciones altruistas como Cruz Roja, Cáritas, Accem, Guadacoge, etc.
La concejala socialista ha hecho un repaso por los hechos que han precedido la desaparición del PRIS. El primero de ellos fue el despido injusto, caprichoso y arbitrario de nueve trabajadores del PRIS por parte del Alcalde de Guadalajara en diciembre de 2007. Estos despidos fueron considerados improcedentes por nueve sentencias de los juzgados de la social, lo que costó cerca de 200.000 euros al Ayuntamiento de la capital.
El segundo paso para eliminar el PRIS se produjo en enero, cuando la Consejería de Bienestar Social publicó la orden para dar ayudas a los ayuntamientos para la puesta en marcha de los planes de integración social. El Ayuntamiento de Guadalajara solicitó ayuda para dos proyectos pero lo hizo careciendo de gran parte de la documentación exigida, la cual le fue pedida por la Junta de Comunidades hasta en tres ocasiones.
En julio de este año, la concejala de Servicios Sociales decidió renunciar a estos dos proyectos y solicitar subvención para otro distinto pero lo hizo fuera de plazo por lo que fue rechazado por los técnicos de la Consejería de Bienestar Social.
El resultado de la desidia y de la falta de voluntad del PP es que, a punto de finalizar el año 2008, no se ha desarrollado el PRIS en todo el año en la ciudad de Guadalajara, se ha perdido la subvención del Gobierno regional para este concepto y se han tenido que pagar las indemnizaciones por los nueve despidos improcedentes. Ángela Ambite valora todo este dinero en cerca de 500.000 euros que el Alcalde ha despreciado. Por ello, pide a Román que deje de practicar el victimismo de manera sectaria y partidista para conseguir votos porque sólo hay dos víctimas, los más de 800 ciudadanos que se han quedado sin recibir atención social y los nueve trabajadores que han perdido su empleo por un capricho del Alcalde.
Ambite teme que la desaparición del PRIS en Guadalajara se culminará en 2009 ya que el PP ha disminuido la partida destinada a estos programas en un 92%, pasando de 247.000 a 20.000 euros lo que nos hace temer que ni siquiera se molestarán en presentar proyectos a la convocatoria de la Junta de Comunidades.
Disminución drástica de la plantilla
Por otro lado, la concejala del PSOE ha denunciado que, desde que gobierna el PP, la plantilla de trabajadores de los Servicios Sociales del Ayuntamiento ha sufrido una reducción drástica. A los nueve trabajadores del PRIS despedidos hay que sumar dos vacantes que hay sin cubrir y otros cuatro trabajadores que debían haber contratado dentro del Plan Concertado. Esto hace que a fecha de hoy haya sólo 14 funcionarios intentando sacar adelante los Servicios Sociales del Ayuntamiento los cuales a pesar de contar con una plantilla muy mermada, hacen su trabajo con gran profesionalidad.
Ángela Ambite considera que con este equipo de gobierno, los servicios sociales en Guadalajara han tocado fondo y muchos nos tememos que la situación puede empeorar aún más en los próximos meses.