El PSOE exige "respeto, limpieza y decoro" al PP con su proceso de elecciones primarias
El PSOE exige respeto, limpieza y decoro por parte de Antonio Román y los dirigentes del Partido Popular en relación con el proceso de elección de candidatos a la Alcaldía de Guadalajara, que se ha iniciado esta semana y que en esta fase de presentación de precandidaturas concluirá el próximo 21 de septiembre. La dirección socialista advierte que no va a consentir ni ingerencias ni intrusismos de ningún tipo a lo largo de este proceso, ni por parte de la derecha ni de nadie.
Luis Santiago Tierraseca ha reclamado ese mismo respeto para Magdalena Valerio y Araceli Muñoz, y ha recordado que ni Antonio Román, que fue proclamado candidato del PP a la Alcaldía de Guadalajara por Mª Dolores de Cospedal el pasado 5 de mayo en Cuenca, ni Ana Guarinos, que tuvo que salir por pies de Molina de Aragón porque allí no la querían y buscar acomodo en Guadalajara, están en condiciones de dar lecciones de democracia y participación a nadie.
La Dirección socialista opina que frente al proceso democrático, transparente, participativo y plural que se ha abierto en este partido, el PP contrapone el sistema de dedocracia para designar a sus candidatos. Los populares no han tardado lo más mínimo en intentar desacreditar este procedimiento de elección con el que se ha dotado el PSOE. Y se les ha visto el plumero. Román dice respetar el proceso para, a renglón seguido, intentar situar a las candidatas en distintos niveles. Hace esas afirmaciones de forma torticera y desde el desconocimiento porque el único proceso democrático interno que conoce es el de la imposición. En el Partido Socialista los militantes deciden, mientras que en el PP obedecen. No vamos a aceptar que pretenda darnos lecciones de democracia. ¡Hasta ahí podíamos llegar!, asegura Luis S. Tierraseca, secretario de Organización del PSOE de Guadalajara.
Sobre la supuesta división de la que habla Ana Guarinos, el dirigente socialista precisa que a los ciudadanos de nuestra provincia no le interesan lo más mínimo sus apreciaciones sobre el proceso abierto en la agrupación local de Guadalajara. Lo que de verdad les preocupa es su opinión respecto a la lámina estable de agua en los pueblos ribereños o la candidatura de Yebra al cementerio nuclear. Y a Guarinos esos asuntos le incomodan y repelen, al igual que a su jefa Mª Dolores de Cospedal, de ahí que prefieran hacer mutis. Es la escenificación de la traición que el PP ha perpetrado a Guadalajara. El único mérito político que se le conoce a la portavoz del Grupo Popular en las Cortes regionales es haber hecho carrera a costa de las víctimas del incendio y el dolor de sus familias, señala Tierraseca.
En cuanto a las referencias expresas a la recolocación de cargos públicos, el PSOE recuerda que si hay un ejemplo palpable de arribismo político es el que representa Ana Guarinos, que en 2003 entregó su escaño del Senado a Antonio Román a cambio de otro asiento en las Cortes de Castilla-La Mancha. En lugar de querer barrer la casa ajena, más le valdría al alcalde de Guadalajara y presidente provincial poner un poco de orden en la suya. Porque su evidente falta de autoridad en el seno del PP está convirtiendo el caso del expediente abierto al alcalde de Yebra, que merece figurar con letras mayúsculas en la antología de los disparates, en un ridículo esperpento que no se merece la ciudadanía, concluye el secretario de Organización del Partido Socialista de Guadalajara.