El PSOE pide a Román que rectifique el "desbarajuste" de las líneas de autobús

 

  Los concejales socialistas han dedicado esta semana a recorrer los nuevos trayectos, y han tenido la oportunidad de recoger constantes quejas de los usuarios por deficiencias en el servicio y desinformación. Por eso, han pedido al alcalde, Antonio Román, que convoque de inmediato la Mesa de Movilidad para rectificar el “desbarajuste” que ha montado con unas líneas que no responden a las necesidades de la mayoría de los usuarios. Este órgano de participación ciudadana, del que forman parte asociaciones vecinales, agentes sociales y grupos políticos, no se reúne desde finales de 2010. “Es decir, ha adjudicado las nuevas líneas de transporte urbano sin haberlo convocado ni una sola vez en todo el proceso”, ha lamentado Valerio.

 

  Para el Grupo Socialista, la rectificación es obligada. “Que no crea Román que los ciudadanos se van a acostumbrar. Llegará un momento en que la desinformación se compense con la experiencia, pero el empeoramiento del servicio es tan grande que no da cobertura a las necesidades de los ciudadanos, y eso no se va a solucionar con el tiempo”, ha asegurado. También ha echado en falta la presencia de los responsables del Equipo de Gobierno a pie de calle para dar explicaciones a los usuarios. La portavoz socialista ha recordado que el alcalde de Marchamalo, localidad que también ha reorganizado estos días el servicio de transporte urbano, ha estado haciendo los nuevos recorridos con los vecinos. “Mientras, Román se ha ido de vacaciones”, ha afirmado.

 

  De hecho, ha querido reconocer expresamente la labor de los conductores, obligados a hacer de informadores de los usuarios ante la despreocupación del Equipo de Gobierno. La portavoz socialista ha relatado un amplio catálogo de carencias, que van desde barrios enteros sin comunicación con el centro de la ciudad o con puntos neurálgicos como el Hospital Universitario y la estación de ferrocarril, a la ausencia de paradas en centros de salud, residencias de mayores y lugares de gran afluencia de público, como el teatro Buero Vallejo.

 

  En otros casos, el diseño de las líneas hace que los autobuses pasen por zonas aún sin habitar, donde apenas recogen viajeros, y acaben parados “30 minutos cada hora” en la cabecera, porque hacen el recorrido la mitad del tiempo del previsto. Valerio también ha calificado como “un derroche económico” la utilización de vehículos de 90 plazas para el transporte a demanda de los barrios anexionados, y ha denunciado que el servicio del polígono del Henares se dé por finalizado antes de las cinco de la tarde. El resultado es que los usuarios se ven obligados a recorrer centenares de metros hasta la parada más cercana, esperan más que antes la llegada del autobús, y a menudo incluso tienen que hacer transbordo para llegar a su destino, multiplicando los tiempos del trayecto.

 

  “Hemos tardado más de un hora en recorridos que deberían hacerse en 15 ó 20 minutos”, ha indicado la portavoz socialista. Como ejemplo, ha explicado que para llegar desde La Concordia hasta el barrio de Aguas Vivas hay que llegar a la estación de ferrocarril y allí coger una línea que pasa cada media hora.

 

  “Esto es un despropósito”, ha resumido. Además, los más perjudicados están siendo las personas mayores y con movilidad reducida, que son usuarios habituales del transporte urbano, “y ahora tendrán que recurrir a un taxi, si pueden pagarlo”. Por eso, ha calificado de “insulto” que el concejal responsable de Movilidad, Juan Antonio de las Heras, reaccionara a las críticas hablando de “descoordinación de los ciudadanos” y diciendo que “se tienen que acostumbrar a andar”.