El PSOE pide una línea de ayudas para los comercios afectados por las obras de la zona centro

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: Redacción

El Grupo municipal Socialista presentará ante el próximo pleno una moción para instar al alcalde de la ciudad, Antonio Román, a que establezca una línea de ayudas y subvenciones que puedan solicitar los comerciantes que se están viendo afectados directamente por las obras que se desarrollan en el entorno de las calles Barrionuevo, Ángel Martín Puebla y Pareja Serrada, de modo que puedan subsanar, en parte, las pérdidas que están teniendo por la caída de ventas, que en algunos casos se cifra hasta en un 85 por ciento, asegura, y aliviar su situación económica.

 

 "Lo que queremos es reclamar al alcalde de Guadalajara una línea de ayudas al comercio de esta zona, al comercio de la calle Barrionuevo, de Pareja Serrada, de Ángel Martín Puebla, a los comerciantes que cada día abren su negocio y que están teniendo unas pérdidas millonarias", en palabras del portavoz del PSOE en la capital, Daniel Jiménez.

Según el concejal socialista, la situación que atraviesan los comerciantes y vecinos de esta céntrica zona es consecuencia directa de la falta de coordinación en el desarrollo de los trabajos. "Son unas obras que no han sido en absoluto planificadas, que son un total descontrol y descoordinación del Gobierno municipal, que debiendo buscar la menor molestia a los vecinos y a los comerciantes, les ha dejado desamparados y, como consecuencia de ello, están siendo unas obras terriblemente perjudiciales".

Entre las medidas propuestas por el PSOE, Jiménez explicó la posibilidad de que el comerciante que quiera hacer una acción de promoción para volver a impulsar su negocio "pueda tener al 100 por 100 ese dinero pagado vía subvención" o, por ejemplo, que el comerciante que quiera recuperar el estado de su fachada "tenga el respaldo municipal, subvencionando al 100 por 100 la actuación".

Por último, Jiménez pidió que "de una vez por todas" se ponga en marcha un plan de movilidad en la zona, pues "a día de hoy se siguen cortando las calles, se sigue cambiando el sentido y la dirección de las calles, se sigue actuando por un lado y se sigue actuando por otro y no hay ningún tipo de plan ni de cartel que al vecino le diga por dónde tiene que ir con mayor seguridad", y, por otro lado, que se lleve a cabo la campaña de información que anunció que desarrollaría el equipo de Gobierno al inicio de las obras, al objeto de que los vecinos y comerciantes sepan qué calles se irán abriendo y en qué plazos. Además, el concejal socialista echa en falta la "cercanía" de los miembros del Gobierno municipal, que "no pisan el terreno y en su lugar les han dicho que se aguanten y que les toca esto".

 

"Nos está afectando muchísimo"

Algunos comerciantes de la zona tratan de sobrellevar la situación con todo el humor que pueden, pero también con toda su resignación. Otros, los casos más graves, aseguran que podrán aguantar poco más esta situación y señalan que ya están al límite. Es el caso de dos comercios concretos, la Papelería Abascal y el Bar El Paso, ambos situados en la calle Barrionuevo, la que antes se cortó al tráfico y más tiempo lleva "empantanada", concretamente desde principios de marzo. Noelia, empleada de la papelería considera que "es la obra más desastrosa que ha habido en Guadalajara, yo creo, en mucho tiempo". Critica que durante los meses de verano apenas haya habido cuatro obreros trabajando y lamenta que sea ahora, cuando ellos también empiezan a tener más trabajo, cuando lleguen las prisas. "La gente viene a por material que pesa, y quiere venir en coche, y si no puede venir aquí porque está cortado, pues se va a otra tienda". En su caso, asegura que la reducción de la facturación desde que comenzaron las obras se acerca al 50 por ciento.

Peor es el trago para el Bar El Paso que, de seguir así, "nos veremos en la obligación de cerrar", asegura Nora, la propietaria del establecimiento. "Nos está afectando muchísimo, tenemos un bajón de un 80 por ciento de clientes", señala la hostelera visiblemente abatida, al ver que su negocio se va a pique por el polvo, el constante ruido y porque sus clientes e incluso sus propios trabajadores encuentran muchas molestias para acceder al bar.

 

"Somos conscientes"

Desde el equipo de Gobierno aseguran ser "conscientes" de las molestias que están causando las obras y entienden las quejas de vecinos y comerciantes, pero señalan que están haciendo todo lo posible para minimizarlas. El concejal de Obras, Jaime Carnicero, que contestó a las críticas socialistas, asegura que visita constantemente la zona, que se reúne a menudo con los afectados y que el plan de movilidad ideado para conducir el tráfico y a los peatones sí se está aplicando.