El PSOE reclama a De Cospedal que aplique medidas restrictivas del gasto público en las regiones que gobierna
De burlesca pantomima califica el PSOE de Guadalajara el acto que el Partido Popular celebrará mañana en la capital para protestar por la subida del IVA, que entrará en vigor el 1 de julio. Los socialistas consideran que la recogida de firmas en contra de esta medida es un simple gesto de cara a la galería sin ninguna trascendencia ni validez legal con el que pretenden llamar la atención para conseguir una fotografía de portada. Esperanza Aguirre encabeza esta movimiento de insumisión fiscal, al que ahora se ha sumado Mª Dolores de Cospedal, que debería dejar de mirar para otro lado y recomendar a la propia presidenta de la Comunidad de Madrid y a algunas otras regiones gobernadas por el PP, como la Comunidad Valenciana, donde los tipos impositivos que son de su competencia se sitúan en los primeros puestos del ranking nacional, que pongan en marcha medidas que contribuyan a reducir las tasas e impuestos de sus conciudadanos.
La presión fiscal en España es de las menores de Unión Europea y el Impuesto sobre el Valor Añadido se sitúa en los porcentajes más bajos entre los países miembros. En contraposición, las prestaciones sociales en nuestro país están hoy entre las de primer nivel europeo, así como las infraestructuras de carreteras, ferrocarriles y aeropuertos. El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero bajó los impuestos cuando la economía estaba en crecimiento, pero ahora que atravesamos por una grave crisis económica y que los ingresos del Estado son menores, se ha decidido una moderada subida fiscal para atender el aumento del gasto en protección social y reducir el déficit público.
La subida del IVA general será de dos puntos porcentuales, mientras que el reducido pasará del siete al 8%. Sin embargo, el tipo superreducido que afecta, por ejemplo, a los alimentos de primera necesidad, medicamentos libros o viviendas de Protección Oficial, no subirá. El PSOE recuerda que países con gobiernos conservadores como Alemania o Inglaterra han decidido incrementos del IVA superiores, sin que se haya registrado ningún llamamiento por parte de la oposición a la insumisión fiscal.
A estas alturas, aún desconocemos las propuestas del PP para reducir el déficit público, de acuerdo con la recomendación que las autoridades financieras han hecho a diversos países de la UE. Ni Rajoy ni Cospedal han propuesto alternativa alguna a las medidas del Gobierno ni han instado a sus ejecutivos autonómicos a que reduzcan los impuestos de ámbito regional o el número de consejerías y altos cargos, que en regiones como Madrid o Valencia suponen un auténtico despilfarro. La propia Cospedal podría recomendar a Esperanza Aguirre que acometa con urgencia la reducción de departamentos, tal y como ha hecho José Mª Barreda, que ha entendido cuál es su responsabilidad en esta situación de crisis financiera, apunta Luis S. Tierraseca, secretario de Organización del PSOE de Guadalajara.
Con los ingresos que se obtengan con esta subida se financiarán, por ejemplo, 490.000 pensiones anuales de jubilación, más de 2 millones de Rentas Básicas de Emancipación para jóvenes cada año, 827.000 prestaciones por atención a personas dependientes de máxima severidad durante un año o un tercio de la inversión pública y privada en I+D+i.
El PSOE niega que el PP recorte gastos y no suba impuestos allí donde gobierna, tal y como reitera Rajoy. Este año, la Comunidad de Madrid ha subido un 22% el precio del metrobús de 10 viajes, muy por encima del IPC del 2009, que aumentó un 0,8%. Por si fuera poco, Madrid es la tercera Comunidad Autónoma con mayor deuda en términos absolutos, un 14% más que el año anterior. Por su parte, el Ayuntamiento de la capital de España es el más endeudado de España, casi el doble que la que acumulan Barcelona, Valencia, Zaragoza, Málaga y Sevilla juntas. Es la quinta parte de la deuda total de los más de 8.000 municipios que hay en nuestro país. Desde 2004, ambos organismos han duplicado el número de cargos de libre designación y confianza y ha triplicado los gastos en altos cargos.
Éste es el momento de la responsabilidad porque así lo requiere la situación económica por la que atraviesa nuestro país y las grandes economías del mundo. Todos los países de la órbita europea están adoptando medidas de contención y reducción del gasto público, y todos los partidos de la oposición se han coaligado con sus gobiernos, a excepción del PP de Rajoy y Cospedal, cuya actitud es incomprensible, intolerable y, sobre todo, irresponsable, contradice las opiniones de los organismos autorizados, que han aplaudido las iniciativas de Zapatero. Éste es el patriotismo de hojalata de los populares, a los que les importan un bledo los intereses y el futuro de España y sólo pretenden derribar el edificio con tal de quedarse con el solar. Los ciudadanos tienen memoria y aún recuerdan que en febrero de 2009, el propio PP de Cospedal reclamó un aumento de la recaudación pública con el aumento del IVA, puntualiza Tierraseca.