El sentimiento de un apellido

27/09/2018 - 20:27 C. Sevilla

Entrevista realizada a Ricardo Espíritu Santo, cuarta generación de una familia dedicada a la industria del automóvil y propietarios de Santogal Motor, concesionario de coches Mercedes-Benz y Nissan en Guadalajara.

Frente a su proyecto profesional en Lisboa, saltó a Madrid con la motivación y la valentía de afrontar un nuevo horizonte profesional. Con él encuentras siempre la promesa de ganar.

 

Ricardo Espirito Santo Bravo, es la cuarta generación de una familia que fue valiente hace setenta y dos años apostando por la industria del automóvil. Su bisabuelo, Fernando Moniz Galvão, comenzó  importando Alfa Romeo desde Lisboa. El mundo de los coches pasó de ser una aventura atractiva para llegar a ser una empresa consolidada con su abuela, María do Carmo, y su tio, Fernando Espirito Santo Silva. Hoy por hoy, Santogal, es una de las empresas más significativas y relevantes de la capital de Portugal. 

Santogal, el mundo del automóvil, hace más de setenta años que proporciona prácticamente todas las marcas de coches al público portugués. Hace una década decidieron establecer también sus servicios en Madrid, y en este gran salto cualitativo y cuantitativo es donde encontramos a Ricardo Bravo, Director General Santogal en España.

Con una logística estudiada, un equipo humano excelente y una cuota de mercado envidiable en Lisboa, Santogal establece bases en nuestro país, concretamente en Madrid con marcas como Ferrari, Mercedes-Benz, Smart, Peugeot, Citroën y Nissan.

¿Por qué decidió dedicarse al mundo de la automoción?

La automoción está en mi ADN desde que nací, debido a mi familia. Desde pequeño vivo con esta pasión por los coches, y desde siempre fue mi objetivo vivir en este mundo. Empecé en 2002 en una empresa en Oporto, donde estuve tres años en un concesionario de Mercedes-Benz y en 2005 me fui a Lisboa a Santogal, desde entonces llevo trece años.

Desde hace un año vive en España gestionando la dirección de Santogal ¿Qué tal la experiencia de vivir en Madrid?

Llegué en agosto de 2017 y estoy establecido con mi familia, nos sentimos muy cómodos, estamos encantados con la experiencia.

¿Qué lugares de España le han gustado más?

España es un país que siempre me gustó. Entre 2005 y 2009 realicé el Campeonato de España GT, venía todos los meses, además fui campeón con un Ferrari 430 GT2 en 2009. Durante estos cinco años conocí muchos lugares de España, como Madrid, Barcelona, Valencia, Navarra, Albacete, Andalucía.

En mi adolescencia iba mucho a Baleares y Sierra Nevada, ambos lugares son de mis sitios preferidos, me trae muy buenos recuerdos.

¿Qué es Santogal?

Santogal es un grupo de automoción familiar, que empezó en 1946 con Alfa Romeo, en Lisboa, con mi bisabuelo. Los siguientes años incorporamos Honda y Peugeot, que han sido desde entonces marcas de referencia en el grupo, hoy en día  tenemos en Portugal treinta marcas, y es uno de los mayores y más respetados de nuestro país.

Aquí en Madrid, empezamos en 2007, después lo hicimos en Guadalajara, y nuestro objetivo es seguir creciendo y ser una referencia en España, como en Portugal.

Como dato puedo decir que en 2017 Santogal ha vendido 35.000 coches.

¿Qué diferencias considera significativas entre el mercado portugués y el español?

Lo más significativo es sin duda la competencia. En Madrid el mercado es mucho más grande, hay más “jugadores”, por lo tanto, más difícil. Pero creo que estamos en el buen camino, estamos creciendo, y posicionando el nombre de Santogal.

Las marcas creo que miran a los dos países como uno, debido a su cercanía y similitudes, y cada vez más, las directivas son ibéricas.

Si tuviese que elegir un modelo de coche ¿cuál sería?

¡El Peugeot 205! (se ríe, consciente de saber que en su respuesta esperaba que me dijese un modelo de Ferrari). El Peugeot 205 es un coche icónico, con mucha historia y que ha marcado mi vida.

Dígame un sueño que le gustaría realizar

Soy la cuarta generación de mi familia, y mi sueño es que continúe con las siguientes, y así seguir el legado de mi bisabuelo.