El Servicio de Promoción Económica promueve la creación de nuevos establecimientos en el mundo rural

Tras comprobar el resultado favorable que está dando en muchos de nuestros pueblos esta iniciativa de la Diputación, Pastrana ha señalado su convicción de que “este el camino que tenemos que seguir, porque se ha visto como con el asesoramiento adecuado se crean pequeñas empresas que generan empleo y contribuyen a consolidar población en nuestros pueblos, que es nuestro principal empeño”.

Bar Restaurante “La Romana” en Lupiana

El bar restaurante “La Romana”  ha sido abierto en Lupiana por Gema Adalia Rodríguez, que tenía experiencia en este sector como trabajadora por cuenta ajena, aunque al encontrarse en desempleo, y considerando que había mercado para un pequeño restaurante en la localidad, adquirió un inmueble nuevo con planta baja comercial y planta superior de uso residencial, para fijar su empresa y su residencia.  Ejerce la actividad desde el año 2007, mostrándose “muy satisfecha de la marcha de su actividad, de la decisión de establecerme por cuenta propia, y por las rentabilidad” que le proporciona su empresa  hasta el punto de haber contratado otra trabajadora a jornada completa y tiempo indefinido con la que reparte las tareas de atención al cliente en barra y pequeño comedor para 25 cubiertos  y cocina.

Tienda “La Tita” en Lupiana      

También en la misma localidad de Lupiana, Laura Adalia Rodríguez, que había trabajado con anterioridad en el sector avícola y se encontraba en desempleo decidió montar una pequeña tienda para vender pan, alimentos y bebidas envasados, así como productos de droguería, un servicio que se venía prestando en el pueblo por vendedores ambulantes, para lo que también recibió el correspondiente asesoramiento sobre trámites a realizar y las posibles ayudas y subvenciones que podía recibir. Así, inicio la actividad en la tienda “La Tita” en abril del presente año 2010.

Aunque el pueblo es pequeño, se muestra “satisfecha de la marcha de la empresa y de poder dar un servicio de productos de primera necesidad  en horario continuado a los vecinos de su pueblo”.

Casa Rural “El Empecinado” en Fuentelviejo

María Jesús de la Cruz había trabajado siempre como ama de casa. Disponía  junto a su esposo de un inmueble histórico de grandes proporciones, aunque en estado semirruinoso, en la localidad de Fuentelviejo. Decidió invertir para transformarlo en una casa rural, con el correspondiente apoyo legal y asesoramiento del Servicio de Promoción Económica en esta materia concreta, incluso con la ayuda necesaria para la tramitación de las correspondientes subvenciones.

Abrió en el año 2008 y lleva la gestión junto a su hija, ambas como trabajadoras autónomas, con un resultado muy satisfactorio, aunque asume “que este tipo de negocio la amortización de la inversión es a largo plazo”. Es de las casas rurales de más categoría (dos espigas) y capacidad (10 habitaciones) de la provincia.

Café-Bar Restaurante  en Alhóndiga

Como en casos anteriores, Javier Cano, se encontraba en situación de desempleo, a pesar de tener una amplia experiencia en hostelería por cuenta ajena, por lo que no dudó en alquilar un bar en Alhóndiga, ya montado, para ofrecer este servicio tan necesario en las pequeñas poblaciones del medio rural. Como en los casos anteriores, fue asesorado por el Servicio de Promoción Económica de la Diputación.

Actualmente, tiene contratada a otra trabajadora a jornada completa y los fines de semana dos más a tiempo parcial. Se muestra tan satisfecho “de la buena marcha de su empresa” que piensa hacerse cargo de otros negocios que le han ofrecido en otras localidades y contratar nuevo personal