El Supremo da la razón a la AMAC y anula los planes de emergencia exterior de las nucleares
01/10/2010 - 09:45
Una sentencia del Tribunal Supremo ha anulado los Planes de Emergencia Nuclear Exteriores aprobados en 2006 el Pengua en la provincia de Guadalajara al considerar que en su elaboración no se había tenido en cuenta a los ayuntamientos próximos, como había denunciado asociación de municipios con nucleares (AMAC). Ésta considera imprescindible colaborar con Protección Civil en la elaboración del nuevo documento con la mayor celeridad posible. A partir de ahora estará vigente el Plan Básico de Emergencia Nuclear (Plaben) de 2004.
El nuevo Plan de Emergencia Nuclear Exterior (PEN) que elabore el Gobierno central tendrá que contar con la opinión de AMAC (Asociación de Municipios Afectados por Centrales Nucleares), después de que el Tribunal Supremo haya anulado los aprobados en 2006, en respuesta al recurso presentado por dicha asociación en el que pedían tener voz en la elaboración de estos documentos.
Esto no impedirá, sin embargo, que la central nuclear Trillo I y la José Cabrera, en Almonacid de Zorita, sigan adelante con su actividad normal que desarrollan en la actualidad. Una vez anulados estos planes que a su vez se incluyen en un Plan de Emergencia Matriz, según la información facilitada ayer por el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), pasa a estar vigente el protocolo de actuación que se aprobó en 2004, y que se seguiría en caso de que hasta la creación del nuevo se produjera algún incidente.
Según la sentencia emitida por la Sala de lo Contencioso Administrativo se estima la demanda de AMAC y se anulan los cinco planes que afectaban las siete plantas que hay en España. Considera que el Gobierno no se ajustó a derecho porque elaboró los planes de seguridad sin contar con los municipios afectados, y reconoce el derecho de esta asociación a que tengan, al menos, voz. Contra esta sentencia no hay posibilidad de presentar recurso.
Desde la AMAC han valorado positivamente esta decisión, ya que hasta ahora los ayuntamientos no participaban en la elaboración de estos planes, y consideran imprescindible que Protección Civil, en colaboración con AMAC, acometa la elaboración de los nuevos planes con la mayor celeridad.
El propósito de dicha Asociación es lograr una mayor coordinación en los planes de emergencia donde es imprescindible que los municipios estén representados, afirman. Tras esta sentencia, propondrán la participación del mundo municipal en los Comités de Gestión de los PEN, en la Comisión Nacional de Protección Civil, y una mayor concreción de los medios y responsabilidades derivados del Plan de Emergencia Nuclear. Recuerdan que el objetivo de la asociación siempre ha sido garantizar la seguridad de los ciudadanos, y por ello entendemos que unos planes de emergencia que se deben aplicar en los municipios, no pueden elaborarse sin escuchar la voz de los alcaldes, según han explicado.
Desde Ecologistas en Acción pidieron ayer la paralización cautelar de las centrales nucleares dada la gravedad de la situación. Según explicaron en nota de prensa, de acuerdo con la Ley de Seguridad Nuclear, una central no puede funcionar sin un PEN vigente que ordene las actuaciones en caso de accidente nuclear. La anulación de los PEN implica que las centrales deben parar. Desde Ecologistas volvieron a denunciar ayer la mala aplicación de los PEN hasta ayer vigentes, ya que, según explicaron, en numerosos pueblos de los entornos nucleares no se encuentran las preceptivas pastillas de yodo, ni las mantas, ni otros equipos. Los alcaldes y miembros de protección civil no conocían los detalles de los PEN y no sabían cómo actuar en detalle y numerosas mejoras de las carreteras ordenadas en los PEN no se han llevado a cabo.
Esto no impedirá, sin embargo, que la central nuclear Trillo I y la José Cabrera, en Almonacid de Zorita, sigan adelante con su actividad normal que desarrollan en la actualidad. Una vez anulados estos planes que a su vez se incluyen en un Plan de Emergencia Matriz, según la información facilitada ayer por el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), pasa a estar vigente el protocolo de actuación que se aprobó en 2004, y que se seguiría en caso de que hasta la creación del nuevo se produjera algún incidente.
Según la sentencia emitida por la Sala de lo Contencioso Administrativo se estima la demanda de AMAC y se anulan los cinco planes que afectaban las siete plantas que hay en España. Considera que el Gobierno no se ajustó a derecho porque elaboró los planes de seguridad sin contar con los municipios afectados, y reconoce el derecho de esta asociación a que tengan, al menos, voz. Contra esta sentencia no hay posibilidad de presentar recurso.
Desde la AMAC han valorado positivamente esta decisión, ya que hasta ahora los ayuntamientos no participaban en la elaboración de estos planes, y consideran imprescindible que Protección Civil, en colaboración con AMAC, acometa la elaboración de los nuevos planes con la mayor celeridad.
El propósito de dicha Asociación es lograr una mayor coordinación en los planes de emergencia donde es imprescindible que los municipios estén representados, afirman. Tras esta sentencia, propondrán la participación del mundo municipal en los Comités de Gestión de los PEN, en la Comisión Nacional de Protección Civil, y una mayor concreción de los medios y responsabilidades derivados del Plan de Emergencia Nuclear. Recuerdan que el objetivo de la asociación siempre ha sido garantizar la seguridad de los ciudadanos, y por ello entendemos que unos planes de emergencia que se deben aplicar en los municipios, no pueden elaborarse sin escuchar la voz de los alcaldes, según han explicado.
Desde Ecologistas en Acción pidieron ayer la paralización cautelar de las centrales nucleares dada la gravedad de la situación. Según explicaron en nota de prensa, de acuerdo con la Ley de Seguridad Nuclear, una central no puede funcionar sin un PEN vigente que ordene las actuaciones en caso de accidente nuclear. La anulación de los PEN implica que las centrales deben parar. Desde Ecologistas volvieron a denunciar ayer la mala aplicación de los PEN hasta ayer vigentes, ya que, según explicaron, en numerosos pueblos de los entornos nucleares no se encuentran las preceptivas pastillas de yodo, ni las mantas, ni otros equipos. Los alcaldes y miembros de protección civil no conocían los detalles de los PEN y no sabían cómo actuar en detalle y numerosas mejoras de las carreteras ordenadas en los PEN no se han llevado a cabo.
