Empujados al hogar

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Ortiga
La crisis económica tiene sus cosas buenas y sus cosas malas. ¿Hace cuánto que padres e hijos no se sientan juntos para echar una partida al Monopoly? Imágenes como esa, tan comunes hace años, se habían llegado a convertir en algo realmente raro. Unos tenían demasiadas cosas que hacer, estaban eternamente ocupados.
Los otros ya disponían de amiguitos virtuales con los que juegas. Las consolas amenazan con convertirse en una gama de electrodomésticos del hogar repleto de posibilidades, tamaños y opciones distintas. Sin embargo, ahora la crisis empuja por otros caminos. Ya no hay dinero para salir a cenar tanto como antes ni para ir al cine. No queda más remedio que quedarse en casa viendo la televisión... o disfrutando de los niños. Tampoco se les puede comprar a ellos el último juego de la Play3, así que tienen que buscar compañía real. Los juegos de mesa vuelven a la carga presentando su mejor cara y haciendo que el contacto familiar sea una buena forma de plantarle cara a estos tiempos difíciles.