Entra en coma irreversible una de las heridas en el accidente de Barajas
01/10/2010 - 09:45
Por: COLPISA
El sábado murió la mujer ingresada en la unidad de quemados de La Paz
Gregoria Mendiola Rodríguez, que sobrevivió al accidente del avión de Spanair del pasado miércoles, entró hoy en un coma que los médicos que la atienden en el hospital Ramón y Cajal de Madrid creen irreversible, según informó la Consejería de Salud de la Comunidad de Madrid. El resto de los heridos en el siniestro no ha experimentado cambios significativos, según las mismas fuentes. María Luisa Estévez González, de 31 años, se convirtió en la tarde de este sábado en la víctima número 154 del accidente del vuelo Spanair JK-5022, que se estrelló el miércoles pasado en Madrid.
Gregoria Mendiola Rodríguez, que sobrevivió al accidente del avión de Spanair del pasado miércoles, entró hoy en un coma que los médicos que la atienden en el hospital Ramón y Cajal de Madrid creen irreversible, según informó la Consejería de Salud de la Comunidad de Madrid. El resto de los heridos en el siniestro no ha experimentado cambios significativos, según las mismas fuentes.
Gregoria, de 44 años y de nacionalidad colombiana, sufre traumatismo craneoencefálico severo y diversas heridas, por lo que se encuentra sedada, intubada e hemodinámicamente estable en la Unidad de Cuidados Intensivos del centro hospitalario, cuyos responsables médicos temen por su vida. La mujer perdió a su marido en el accidente, y es madre del pequeño Alfredo Acosta, de 8 años, que se recupera en el Hospital Niño Jesús de la capital de una fractura de pierna abierta que tuvo que ser operada.
El parte médico difundido hoy por la Consejería madrileña de Salud establece que son dos los heridos en el accidente aéreo que continúan con pronóstico muy grave, otro sigue grave, y tres estables dentro de la gravedad. La evolución de los restantes lesionados es positiva.
Además de Gregoria, sigue muy grave Pedro Hernán Gómez. De 57 años, natural de Valdeseca (Segovia) y residente en Canarias, también permanece en la UCI del Ramón y Cajal sedado y con ventilación mecánica, aquejado de una contusión pulmonar, una fractura malar, una herida inciso contusa y fracturas en el fémur derecho y tobillo izquierdo. Intervenido el sábado por el servicio de Traumatología y Cirugía Maxilofacial de sus múltiples heridas en miembros y en cara, hoy sufrió un síndrome febril importante que obliga a los médicos a mantener el pronóstico de muy grave.
Mejorías
Los responsables del Hospital de La Princesa mantienen el pronóstico de grave para Antonia Martínez Jiménez, de 27 años, la única superviviente de la tripulación del avión accidentado, azafata y jienense, que tiene quemaduras faciales. Ha recuperado la consciencia y su evolución es favorable.
Rafael Vidal Rodríguez, de 31 años, que presenta contusión pulmonar bilateral y diversas heridas de distinta consideración, sigue estable dentro de la gravedad según los responsables del hospital Infanta Sofía donde es atendido. El mismo diagnóstico sirve para Ángeles Carpintero Ruiz, de 67 años, tiene un traumatismo craneoencefálico severo y una fractura abierta de la tibia izquierda de la que es tratada en la UCI del Hospital Doce de Octubre
Por último, la niña de 11 años María Alonso Filloy, que tiene una fractura abierta de fémur, sigue estable dentro de la gravedad y en observación en el Hospital de La Paz.
Próximos altas
Los restantes heridos presentan diagnósticos leves, y varios de ellos podrán empezar a recibir las altas médicas a partir de este mismo lunes. Es el caso de Beatriz Reyes Ojeda, de 41 años, nacida en Las Palmas, directora de Caixa Galicia. Sufre una fractura abierta en la pierna derecha y mejora en una habitación de plata del hospital Infanta Sofía.
Leandro Ortega, de 22 años, tiene una contusión pulmonar y fractura de esternón y vértebras. Evoluciona favorablemente y ha pasado a planta del hospital Doce de Octubre.
En el complejo hospitalario de La Paz, José Alonso Alonso, de 47 años, tiene una fractura de pelvis y traumatismo torácico, continúa ingresado en la UCI y evoluciona favorablemente. Natural de Fregeneda (Salamanca) y residente en Las Palmas, es funcionario de prisiones y padre de María. El técnico del Samur José Pablo Flórez García, de 29 años, con fracturas costales y traumatismo torácico con hemoneumotorax, sigue en la UCI pese a su positiva evolución. Rafael Moreno Pérez, de 68 años, tiene quemaduras por inhalación. Y Pedro Antonio González Díaz, de 40 años, tiene fracturas de fémures y pelvis, ya ha sido ingresado en planta y por la mejoría experimentada.
Kim Yvonne Tate Pérez, de 30 años, profesora y residente en Canarias, evoluciona bien de su neumotórax izquierdo y politraumatismo en el Hospital de La Princesa.
Por último, en el Hospital Ramón y Cajal ha sido trasladada a planta Anna Stefanides, de 56 años, finlandesa afincada en Suecia, con traumatismo craneoencefálico y contusiones. Ligia Palomino Riveros, de 42 años, colombiana, con fractura de fémur izquierdo, tiene diagnóstico leve. El niño de seis años Roberto Alvarez Carretero tiene traumatismo craneal con scalp, heridas inciso contusas en cara y ambas extremidades. Y M. L. González Cabana, mujer de 54 años, tiene un traumatismo craneoencefálico y torácico con neumotórax y fracturas en miembros inferiores, ase recupera de la intervención a la que fue sometida el sábado por el Servicio de Traumatología.
María Luisa Estévez González, de 31 años, se convirtió en la tarde de este sábado en la víctima número 154 del accidente del vuelo Spanair JK-5022, que se estrelló el miércoles pasado en Madrid. Esta mujer, de 31 años, permanecía ingresada en el madrileño hospital de La Paz tras sobrevivir al accidente aéreo del pasado miércoles en Barajas, pero en estado muy grave al sufrir quemaduras en el 72 por ciento de su cuerpo. La Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid informó de su fallecimiento, sobre las 19:30 horas.
Pedro Hernán Gómez, otro de los supervivientes del siniestro que permanecen hospitalizados en Madrid, empeoró también de sus lesiones en las últimas horas, y su estado es muy grave, según el parte facilitado al mediodía por la Consejería de Salud. De 57 años, natural de Valdeseca (Segovia) y residente en Canarias, Hernán Gómez permanece en la unidad de vigilancia intensiva del hospital Ramón y Cajal, donde los facultativos le tratan una contusión pulmonar, una fractura malar, una herida inciso contusa y fracturas en el fémur derecho y tobillo izquierdo.
Por su parte, Rafael Vidal Rodríguez, de 31 años, que presenta contusión pulmonar bilateral y diversas heridas de distinta consideración, ha dejado de evolucionar de manera favorable y se mantiene estable dentro de la gravedad de sus lesiones, según los responsables del hospital Infanta Sofía, donde es atendido.
Sigue también muy grave Gregoria Mendiola Rodríguez, de 44 años, que sufre un traumatismo craneoencefálico severo y diversas heridas. Su pronóstico es muy grave y continúa en la UCI del Hospital Severo Ochoa. En la misma unidad del Hospital Doce de Octubre está ingresada Ángeles Carpintero Ruiz, de 67 años, tiene un traumatismo craneoencefálico severo y una fractura abierta de la tibia izquierda. Su estado también es estable dentro de la gravedad.
Mejorías
El resto de los heridos evoluciona de manera positiva y algunos podrían empezar a recibir el alta el próximo lunes. Es el caso de Beatriz Reyes Ojeda, de 41 años, nacida en Las Palmas y directora de Caixa Galicia, que sufre una fractura abierta de miembro inferior derecho y se encuentra ya en planta del hospital Infanta Sofía de San Sebastián de los Reyes, con pronóstico leve.
En el Hospital Doce de Octubre, Leandro Ortega, de 22 años, evoluciona de manera satisfactoria de una contusión pulmonar, y fractura de esternón y vértebras, y ha pasado ya a planta.
La evolución de cinco de los ingresados en el Hospital La Paz es también favorable. José Alonso Alonso, de 47 años, tiene una fractura de pelvis y traumatismo torácico y su pronóstico es estable dentro de la gravedad, tras una cierta mejoría comprobada en las últimas horas.
Natural de Fregeneda (Salamanca) y residente en Las Palmas, Alonso Alonso es funcionario de prisiones y padre de María, de 11 años, ingresada en el mismo hospital y que mejora de la fractura abierta de fémur que sufrió en el accidente.
El técnico del Samur José Pablo Flórez García, de 29 años, con fracturas costales y traumatismo torácico con hemoneumotorax, sigue en la UCI con evolución positiva, como la de Rafael Moreno Pérez, de 68 años, que sufre quemaduras por inhalación de humo. Por último, Pedro Antonio González Díaz, de 40 años, con fracturas de fémures y pelvis, mejora con rapidez ya fue trasladado a planta.
Niños
Sigue en el Hospital infantil Niño Jesús el pequeño Alfredo Jesús Acosta Mendiola, de 8 años, con una fractura abierta de una pierna que ya ha sido operada. Y en el Ramón y Cajal mejora Roberto Álvarez Carretero, de 6, con traumatismo craneal con scalp, y heridas inciso contusas en cara y ambas extremidades.
También en el Ramón y Cajal evolucionan de manera positiva: Anna Stefanides, de 56 años, finlandesa afincada en Suecia, con traumatismo craneoencefálico y policontusiones; Ligia Palomino Riveros, de 42 años, colombiana, con una fractura de fémur izquierdo, y M. L. González Cabana, mujer, de 54 años, con traumatismo craneoencefálico y torácico, neumotórax y fracturas en miembros inferiores de pronóstico grave.
Por último, en el Hospital de La Princesa Kim Yvonne Tate Pérez, de 30 años, profesora residente en Canarias con neumotórax izquierdo y un politraumatismo, tiene pronóstico grave, mientras que Antonia Martínez Jiménez, de 27 años, jienense, única superviviente de la tripulación del avión accidentado, azafata y jienense, tiene quemaduras faciales y está consciente. Su pronóstico
Gregoria, de 44 años y de nacionalidad colombiana, sufre traumatismo craneoencefálico severo y diversas heridas, por lo que se encuentra sedada, intubada e hemodinámicamente estable en la Unidad de Cuidados Intensivos del centro hospitalario, cuyos responsables médicos temen por su vida. La mujer perdió a su marido en el accidente, y es madre del pequeño Alfredo Acosta, de 8 años, que se recupera en el Hospital Niño Jesús de la capital de una fractura de pierna abierta que tuvo que ser operada.
El parte médico difundido hoy por la Consejería madrileña de Salud establece que son dos los heridos en el accidente aéreo que continúan con pronóstico muy grave, otro sigue grave, y tres estables dentro de la gravedad. La evolución de los restantes lesionados es positiva.
Además de Gregoria, sigue muy grave Pedro Hernán Gómez. De 57 años, natural de Valdeseca (Segovia) y residente en Canarias, también permanece en la UCI del Ramón y Cajal sedado y con ventilación mecánica, aquejado de una contusión pulmonar, una fractura malar, una herida inciso contusa y fracturas en el fémur derecho y tobillo izquierdo. Intervenido el sábado por el servicio de Traumatología y Cirugía Maxilofacial de sus múltiples heridas en miembros y en cara, hoy sufrió un síndrome febril importante que obliga a los médicos a mantener el pronóstico de muy grave.
Mejorías
Los responsables del Hospital de La Princesa mantienen el pronóstico de grave para Antonia Martínez Jiménez, de 27 años, la única superviviente de la tripulación del avión accidentado, azafata y jienense, que tiene quemaduras faciales. Ha recuperado la consciencia y su evolución es favorable.
Rafael Vidal Rodríguez, de 31 años, que presenta contusión pulmonar bilateral y diversas heridas de distinta consideración, sigue estable dentro de la gravedad según los responsables del hospital Infanta Sofía donde es atendido. El mismo diagnóstico sirve para Ángeles Carpintero Ruiz, de 67 años, tiene un traumatismo craneoencefálico severo y una fractura abierta de la tibia izquierda de la que es tratada en la UCI del Hospital Doce de Octubre
Por último, la niña de 11 años María Alonso Filloy, que tiene una fractura abierta de fémur, sigue estable dentro de la gravedad y en observación en el Hospital de La Paz.
Próximos altas
Los restantes heridos presentan diagnósticos leves, y varios de ellos podrán empezar a recibir las altas médicas a partir de este mismo lunes. Es el caso de Beatriz Reyes Ojeda, de 41 años, nacida en Las Palmas, directora de Caixa Galicia. Sufre una fractura abierta en la pierna derecha y mejora en una habitación de plata del hospital Infanta Sofía.
Leandro Ortega, de 22 años, tiene una contusión pulmonar y fractura de esternón y vértebras. Evoluciona favorablemente y ha pasado a planta del hospital Doce de Octubre.
En el complejo hospitalario de La Paz, José Alonso Alonso, de 47 años, tiene una fractura de pelvis y traumatismo torácico, continúa ingresado en la UCI y evoluciona favorablemente. Natural de Fregeneda (Salamanca) y residente en Las Palmas, es funcionario de prisiones y padre de María. El técnico del Samur José Pablo Flórez García, de 29 años, con fracturas costales y traumatismo torácico con hemoneumotorax, sigue en la UCI pese a su positiva evolución. Rafael Moreno Pérez, de 68 años, tiene quemaduras por inhalación. Y Pedro Antonio González Díaz, de 40 años, tiene fracturas de fémures y pelvis, ya ha sido ingresado en planta y por la mejoría experimentada.
Kim Yvonne Tate Pérez, de 30 años, profesora y residente en Canarias, evoluciona bien de su neumotórax izquierdo y politraumatismo en el Hospital de La Princesa.
Por último, en el Hospital Ramón y Cajal ha sido trasladada a planta Anna Stefanides, de 56 años, finlandesa afincada en Suecia, con traumatismo craneoencefálico y contusiones. Ligia Palomino Riveros, de 42 años, colombiana, con fractura de fémur izquierdo, tiene diagnóstico leve. El niño de seis años Roberto Alvarez Carretero tiene traumatismo craneal con scalp, heridas inciso contusas en cara y ambas extremidades. Y M. L. González Cabana, mujer de 54 años, tiene un traumatismo craneoencefálico y torácico con neumotórax y fracturas en miembros inferiores, ase recupera de la intervención a la que fue sometida el sábado por el Servicio de Traumatología.
María Luisa Estévez González, de 31 años, se convirtió en la tarde de este sábado en la víctima número 154 del accidente del vuelo Spanair JK-5022, que se estrelló el miércoles pasado en Madrid. Esta mujer, de 31 años, permanecía ingresada en el madrileño hospital de La Paz tras sobrevivir al accidente aéreo del pasado miércoles en Barajas, pero en estado muy grave al sufrir quemaduras en el 72 por ciento de su cuerpo. La Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid informó de su fallecimiento, sobre las 19:30 horas.
Pedro Hernán Gómez, otro de los supervivientes del siniestro que permanecen hospitalizados en Madrid, empeoró también de sus lesiones en las últimas horas, y su estado es muy grave, según el parte facilitado al mediodía por la Consejería de Salud. De 57 años, natural de Valdeseca (Segovia) y residente en Canarias, Hernán Gómez permanece en la unidad de vigilancia intensiva del hospital Ramón y Cajal, donde los facultativos le tratan una contusión pulmonar, una fractura malar, una herida inciso contusa y fracturas en el fémur derecho y tobillo izquierdo.
Por su parte, Rafael Vidal Rodríguez, de 31 años, que presenta contusión pulmonar bilateral y diversas heridas de distinta consideración, ha dejado de evolucionar de manera favorable y se mantiene estable dentro de la gravedad de sus lesiones, según los responsables del hospital Infanta Sofía, donde es atendido.
Sigue también muy grave Gregoria Mendiola Rodríguez, de 44 años, que sufre un traumatismo craneoencefálico severo y diversas heridas. Su pronóstico es muy grave y continúa en la UCI del Hospital Severo Ochoa. En la misma unidad del Hospital Doce de Octubre está ingresada Ángeles Carpintero Ruiz, de 67 años, tiene un traumatismo craneoencefálico severo y una fractura abierta de la tibia izquierda. Su estado también es estable dentro de la gravedad.
Mejorías
El resto de los heridos evoluciona de manera positiva y algunos podrían empezar a recibir el alta el próximo lunes. Es el caso de Beatriz Reyes Ojeda, de 41 años, nacida en Las Palmas y directora de Caixa Galicia, que sufre una fractura abierta de miembro inferior derecho y se encuentra ya en planta del hospital Infanta Sofía de San Sebastián de los Reyes, con pronóstico leve.
En el Hospital Doce de Octubre, Leandro Ortega, de 22 años, evoluciona de manera satisfactoria de una contusión pulmonar, y fractura de esternón y vértebras, y ha pasado ya a planta.
La evolución de cinco de los ingresados en el Hospital La Paz es también favorable. José Alonso Alonso, de 47 años, tiene una fractura de pelvis y traumatismo torácico y su pronóstico es estable dentro de la gravedad, tras una cierta mejoría comprobada en las últimas horas.
Natural de Fregeneda (Salamanca) y residente en Las Palmas, Alonso Alonso es funcionario de prisiones y padre de María, de 11 años, ingresada en el mismo hospital y que mejora de la fractura abierta de fémur que sufrió en el accidente.
El técnico del Samur José Pablo Flórez García, de 29 años, con fracturas costales y traumatismo torácico con hemoneumotorax, sigue en la UCI con evolución positiva, como la de Rafael Moreno Pérez, de 68 años, que sufre quemaduras por inhalación de humo. Por último, Pedro Antonio González Díaz, de 40 años, con fracturas de fémures y pelvis, mejora con rapidez ya fue trasladado a planta.
Niños
Sigue en el Hospital infantil Niño Jesús el pequeño Alfredo Jesús Acosta Mendiola, de 8 años, con una fractura abierta de una pierna que ya ha sido operada. Y en el Ramón y Cajal mejora Roberto Álvarez Carretero, de 6, con traumatismo craneal con scalp, y heridas inciso contusas en cara y ambas extremidades.
También en el Ramón y Cajal evolucionan de manera positiva: Anna Stefanides, de 56 años, finlandesa afincada en Suecia, con traumatismo craneoencefálico y policontusiones; Ligia Palomino Riveros, de 42 años, colombiana, con una fractura de fémur izquierdo, y M. L. González Cabana, mujer, de 54 años, con traumatismo craneoencefálico y torácico, neumotórax y fracturas en miembros inferiores de pronóstico grave.
Por último, en el Hospital de La Princesa Kim Yvonne Tate Pérez, de 30 años, profesora residente en Canarias con neumotórax izquierdo y un politraumatismo, tiene pronóstico grave, mientras que Antonia Martínez Jiménez, de 27 años, jienense, única superviviente de la tripulación del avión accidentado, azafata y jienense, tiene quemaduras faciales y está consciente. Su pronóstico