Diputación en Valencia: "Al ver las máquinas han gritado ‘que viene la caballería’”
Los efectivos de CEIS y centros comarcales de la Diputación de Guadalajara se encuentran en Massanassa (Valencia), una localidad a la que aún no había llegado más ayuda que la de los voluntarios tras el paso de la DANA.
En la madrugada del lunes un contingente de medios materiales y humanos Consorcio Provincial de Bomberos salía hacia a Valencia tras haber sido asignado por la Dirección Operativa de Emergencia al Centro de Recepción de Medios de Ikea Alfafar (Valencia), desde donde se les asignó un lugar concreto de trabajo, la localidad de Sedaví.
Según explica Miguel Estévez, Director Técnico del CEIS, en aquella primera jornada realizaron trabajos puntuales de achique de bajos o restitución de servicios junto con efectivos de otras comunidades autónomas. "Hay muchos medios, y cuando tienes tantos es difícil darles tarea a todos. La descoordinación era patente", señala, pero la situación ha mejorado notablemente tras la llegada de la maquinaria de los centros comarcales. "Desde hoy a las 7.30 estamos en el sector 3, en Massanassa, tanto los medios del CEIS como del Centro Comarcal. Ahora nos estamos augestionando y está todo más coordinado".
Según explica Estévez, el panorama que encontraron al llegar todavía era duro. "Estaban todos los viales saturados de vegetación, enseres, vehículos... La imagen impactaba mucho, pero ahora ya los estamos limpiando". A eso hay que sumar el estado anímico de personas "que lo han perdido todo, incluso seres queridos".
El vicepresidente segundo de la Diputación y delegado de Infraestructuras y centros comarcales, David Pardo, es aún más explícito: "Esto es un desastre. Lo que ha caido aquí es un desastre. Lo ves en la tele y no te lo crees hasta que lo ves. Esto va a llevar mucho tiempo devolverlo a la normalidad".
En el caso de la Diputación, los medios han sido enviados además a un punto en el que hasta ahora no habían recibido más que ayuda de voluntarios y los propios vecinos. "La gente estaba dándonos las gracias, ofreciéndonos todo, incluso sus casas. Nos decían que era la primera ayuda que recibían desde que esto cayó. Algunos han salido a las puertas y ventana a grabar videos. Al ver las máquinas gritaban ‘Ha llegado la caballería’".
Aunque la situación es dura, tanto los bomberos como los operarios de los centros comarcales la enfrentan con seguridad. "Muchas de estas cosas van en nuestra profesión", indica Estévez, a lo que Pardo recuerda que "no es la primera vez que tenemos que trabajar en condiciones duras", señalando casos como el de Filomena, que también obligó a realizar un gran esfuerzo, "pero tenemos maquinaria y el mejor personal". Eso sí, la diferencia es que ahora resulta imposible saber cuándo terminarán los trabajos. "No hay forma de calcular lo que vamos a tardar. Hay mucho que hacer".
Por el momento, los trabajadores de la Diputación se encuentran alojados en un hotel realizando jornadas de trabajo organizadas "para que puedan trabajar de forma eficaz". Y aunque no hay fecha de vuelta prevista, sí que está todo listo para dar el primer relevo cuando sea necesario. "Eso tampoco tiene fecha, se irá viendo más por la carga de trabajo que tenga que ir soportando cada uno".
Medios desplazados
El contingente desplazado hasta Valencia por el CEIS estaba compuesto por una bomba rural pesada, una bomba urbana ligera, una bomba rural ligera tipo pick up, dos vehículos 4x4 para transporte de material y personal, un furgón ligero de nueve plazas, un remolque de usos varios, nueve equipos de rescate acuático en superficie, una embarcación de salvamento acuático, dos generadores eléctricos, un dron, equipos de desescombro y equipos de comunicaciones.
Como recursos humanos también se han desplazado hasta allí un jefe de guardia–coordinador del contingente, dos cabos jefes de equipo y seis bomberos especialistas.
El martes también se desplazó al CRM otro 4x4 de la Diputación para transporte de personal y material, junto con un coordinador del contingente y un jefe de equipo.
Desde los centros comarcales han salido una máquina excavadora de 17 toneladas, una retroexcavadora, dos máquinas minicargadoras, dos camiones de carga de cuatro ejes, un camión de desatascos, un camión cisterna de baldeo, dos camiones cuba móvil de 3.000 litros, dos camiones cuchilla, un remolque cisterna combustible, un furgón de nueve plazas y dos vehículos 4x4 para transporte de personal y material.
Como medios humanos: tres jefes de equipo, cuatro profesionales de diversos oficios (albañil, fontanero, electricista, etc.) así como 23 conductores-maquinistas.