Final de curso

El curso escolar toca a su fin en estas fechas. Los estudiantes, que todavía no lo han finalizado, y sobre todo los que tienen la temida Selectividad, ahora llamada EVAU, andan nerviosos con sus exámenes sabedores de que se juegan mucho en ellos. Es tiempo de insomnio porque se madruga y hasta se trasnocha en ese afán de llegar a los exámenes con la lección bien aprendida. Muchos dirán que tiempo hubo durante todo el curso de aprender, pero todos sabemos que suele dejarse hasta el final el último apretón de codos...Eso que se decía de ‘aquí yace quién no tembló’...y alguien añadió ‘porque no se examinó’ suele ser más corriente de lo que se cree. Recordemos lo de la liebre y la tortuga...Porque casi siempre se suele dejar para última hora lo que tal vez no pueda ser abarcado en ese tiempo, pero ya no es cuestión de regañinas...sino de dar ánimos para hacer el último esfuerzo ante los exámenes finales porque  mejor es prevenir que curar. Pensemos en un verano tranquilo porque hemos terminado un curso positivamente... 

   Hoy no vamos a escribir sobre la política porque estamos convencidos de que ella se colará sin duda hasta en la sopa. Pensemos, pues, en el verano, ya a pocas horas de su inicio oficial que coincide con el levantamiento del estado de alarma que tantas prohibiciones,por el bien de nuestra salud, ha significado. Aprovechémoslo para descansar y disfrutar en la mejor compañía, con la tranquilidad que da el saber que hemos cumplido con el deber de estudiar a su debido tiempo.Pero dejemos de hablar del estudio y todo lo que nos supone durante él muchas veces pesado curso y pensemos en ese maravilloso tiempo libre que nos brinda el estío para descansar y dedicarnos a hacer aquello para lo que durante el curso resultaba siempre escaso. Seguro que cada uno sabrá hacer lo que más le guste y sacar provecho también de ese merecido descanso que el verano suele traer sobre todo en lo tocante al estudio y hacerlo con las precauciones aconsejadas para evitar rebrotes y nuevos confinamientos después de un año especialmente difícil y doloroso.

  A los que todavía les quedan exámenes la mejor de las suertes y para los demás estudiantes que disfruten ya, con esa cautela, de un largo y feliz verano.