Guadalajara entre en el grupo operativo RESINLAB con una parcela de experimentación en Cobeta
El Grupo Operativo Resinlab es un laboratorio experimental, formado por una red de parcelas de Castilla y León, Extremadura y Castilla-La Mancha, que pretende impulsar nuevos modelos de profesionalización del oficio del resinero para aumentar su eficiencia y rentabilidad; desarrollar nuevas tecnologías de extracción de resina que aseguren la sostenibilidad del aprovechamiento; y crear un observatorio de datos que mejore la transparencia y trazabilidad del producto.
Este 2022, Cobeta se suma al proyecto del Grupo Operativo Resinlab en Castilla-La Mancha -junto a la parcela de la Serranía de Cuenca que ya formaba parte del proyecto en 2021- para llevar a cabo un ensayo de pica mecanizada y, con esta finalidad, el pasado lunes se procedió al marcaje de la parcela. El ingeniero de GEA Forestal y tesorero de la Asociación de resineros de Guadalajara, Basilio Rodríguez, ha afirmado que “la parcela –cuya variedad de pino es el Pinus pinaster- se encuentra totalmente en umbría y su densidad es de entre 400 y 500 pinos que tienen entre 70 y 80 años, unos 40 centímetros de diámetro y entre 12 y 15 metros de altura y, cabe destacar, que se encuentran ya en la quinta entalladura”, es decir, que llevan cinco años resinándose. El ingeniero cuenta que “la parcela se ha divido en tres bloques, cada uno de ellos formado por 120 pinos de los que 60 se resinarán con pica mecanizada y los otros 60 con pica tradicional” y añade que “también se han dejado 10 pies de control a los que no se le pondrá estimulante”.
Por su parte, desde el Centro de Servicios y promoción Forestal y de su industria de Castilla y León, Cesefor, como socio coordinador del proyecto, Aída Rodríguez explica que “hemos incluido esta parcela de Cobeta en el proyecto para incrementar la variabilidad de nuestras parcelas de ensayo, con unas características ecológicas distintas a otros lugares y teniendo en cuenta que Guadalajara tiene también un alto número de resineros en comparación con otras provincias de Castilla-La Mancha”. Rodríguez asegura que se persiguen dos objetivos principales: “por un lado, lo que queremos ver con estos ensayos es si la producción de resina es mayor, menor o igual que con el método de pica tradicional o escoda y, por otro lado, ver que la técnica de la pica mecanizada no produce ningún efecto negativo que ponga en riesgo la sostenibilidad del pinar” y añade que “con ello seguiremos aumentando nuestro conocimiento en las distintas técnicas de la extracción de la resina”.
Basilio Rodríguez ha afirmado que esta misma parcela ya formó parte de un proyecto experimental de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha el año pasado: “el rendimiento medio por pino con la técnica de pica mecanizada fue menor que años anteriores con el sistema de pica tradicional, pero no podemos sacar conclusiones únicamente de una campaña ya que intervienen multitud de factores, como por ejemplo, no conocíamos la técnica, ahora sabemos emplearla mejor; también observamos otros detalles que pudieron influir negativamente y que este año no vamos a repetir, como el hecho de no retirar el ácido estimulante; los factores climatológicos también influyen, este año está siendo muy seco, con mucho sol y mucho frío por las noches”.
Por ello, según confirma el ingeniero, este año han decidido sumarse al proyecto del GO-Resinlab “para seguir realizando experimentos que mejoren las condiciones del oficio del resinero, teniendo resultados de primera mano y a nivel nacional, ya que no se funciona igual en todos los territorios, por lo que hay que tener en cuenta las particularidades de cada uno y nosotros queremos ver los resultados que se producen en nuestra comarca y en nuestros pinos sin que el experimento caiga sobre las espaldas del resinero y le genere más esfuerzo”.