¡Sí se puede!
El Cívitas Balonmano Guadalajara vivió en Valladolid su propia resurrección con una victoria de fe (30-31) que le permite seguir soñando con alcanzar la salvación.
El cuadro morado logrósobreponerse a una desventaja de cuatro goles para tomar las riendas en la segunda mitad, gracias a un Oliveira inspirado y a la falta de solidez de su rival.
El arranque no fue bueno para el equipo de Requena, que vio cómo Romanillos se iba al banco dos minutos por un golpe en la cara a Dimitrievski cuando el reloj marcaba solo 30 segundos. No obstante, la circunstancia se saldó con un 1-1 en el marcador y el encuentro volvió a la casilla de salida. Fue el equipo local el que llevó la batuta en los primeros compases. Al bloque alcarreño le atenazaban los nervios y eso se reflejó en un primer parcial de 4-1. Con el paso de los minutos, el Guada se fue asentando, minimizando pérdidas y errores para situarse con un 6-5 momentáneo en el minuto 10.
Los pupilos de Pisonero volvieron a pisar el acelerador para establecer de nuevo un margen de cuatro goles a su favor. Por su parte, el Cívitas no lograba cerrar bien la defensa en el flanco derecho, zona por la que el ataque azul llegaba insistentemente. Con el 12-8, el entrenador morado paró el partido para intentar reorganizar a sus hombres. La exclusión de Rosell en las filas de la escuadra pucelana sirvió para que, poco a poco, se percibiera un cambio de dinámica en el duelo que llevó a un 13-12 en el minuto 25 que obligó al técnico local a pedir tiempo muerto. Los de casa trataron entonces de imprimir velocidad y aumentaron la apuesta atacando con siete, estrategia que se saldó con una pérdida de balón y un gol con el que Guadalajara igualaba la contienda para acabar logrando el 14-15 con el que se llegó al descanso.
En la reanudación, el cuadro guadalajareño logró su máxima renta nada más volver de vestuarios (14-16) y mejoró prestaciones en defensa para dibujar un nuevo guion sobre el parqué de Huerta del Rey. El Guada ponía pausa e inteligencia en el juego y Dorado lograba el 16-19 que motivaba un nuevo tiempo muerto de Pisonero. Los pupilos de Requena se encontraban como pez en el agua y aprovechaban cada error vallisoletano para hacer sangre y llegar a un 17-21 que enfadaba a la parroquia local. La tensión aumentaba y el Recoletas reaccionaba para recuperar terreno y ponerse a dos goles.
La goma se estiraba y se encogía con ventajas de uno y dos goles para Guadalajara, hasta que, en el minuto 43, el Atlético lograba volver a igualar el tanteo. Requena paraba de nuevo el reloj y las hostilidades se reabrían. La exclusión de Freitas en el 46 benefició la causa alcarreña y el Cívitas recuperó la ventaja de dos tantos. El partido estaba igualado, pero sin que ninguno de los contendientes lograse enarbolar un buen juego, por lo que el factor diferencial para llevarse el gato al agua estaría en minimizar los errores.
Fue, precisamente, el Guada el que tropezó primero con la exclusión de Llorens en el minuto 51. El Recoletas le siguió con una sucesión de pérdidas que permitieron a los morados mantenerse arriba en el marcador, así que el técnico vallisoletano pidió tiempo muerto para buscar mordiente en la recta final. Llorens volvió a dejar a los suyos con uno menos, pero Oliveira mantuvo la batuta en manos alcarreñas.
Cuando la tensión estaba en lo más alto, Freitas vio los dos minutos a falta de 30 segundos. Con una posesión para cada bando, ninguno logró llevar la pelota a la red y el marcador dio la victoria para un Balonmano Guadalajara que, con seis jornadas por delante, quiere seguir creyendo.
FICHA
Recoletas Atlético Valladolid: César Pérez (1), Borja Méndez (8), Oriol Blanco (1), Álvaro Martínez (3), Miguel Camino, De Toledo (7), Dimitrievski (5, 2p), -siete inicial-; Lamariano (ps), Ayres, Dimitrioski (1), Rosell, Herrero (2), Pétter y Freitas (2).
Cívitas Balonmano Guadalajara: Santamaría, Lombardi (4), Catalina (3), Romanillos (1), Chiuffa (5), Llorens, Oliveira (9, 2p), -siete inicial-; Krimer (ps), Román (2), Charly Pérez (1), Dorado (4), Simón, Serradilla, Álvaro García, Tito Díaz (2) y Gorostidi.
Árbitros: Mendoza Roldán y Visciarelli Lareo (Colegio Andaluz). Excluyeron dos minutos a Rosell y Freitas (2), en el Recoletas Atlético Valladolid; y a Romanillos y Llorens (2), en el Cívitas Balonmano Guadalajara.
Marcador cada cinco minutos: 3-1, 6-4, 9-6, 13-9, 13-12, 14-15 -descanso-; 16-17, 19-21, 23-24, 24-26, 26-27 y 30-31.
Polideportivo Huerta del Rey. 1.200 espectadores.