Iberdrola amplía su red eléctrica con nuevas instalaciones en la región
09/02/2011 - 14:21
Entre las nuevas infraestructuras, destaca la puesta en marcha de la subestación de Las Santanas, en Albacete, la ampliación de la subestación de Talavera, en Talavera de la Reina, la subestación de Villamayor de Santiago, en Cuenca, y la de Parque Aeronáutico, en Albacete, según ha informado la compañía en nota de prensa.
Gracias a la entrada de funcionamiento de estas nuevas instalaciones y a la mejora de las existentes, la empresa ha logrado alcanzar en esta región un índice de calidad récord. Durante el pasado año, el Tiempo de Interrupción Equivalente a la Potencia Instalada (TIEPI), índice que mide dicha calidad, ha disminuido desde las 1,61 horas registradas en 2009 hasta las 1,28 del 201, lo que supone una mejora del 20%.
Este nuevo récord en la calidad del servicio ha sido posible gracias al esfuerzo inversor que la empresa ha llevado a cabo en los últimos ejercicios. Desde el año 2002, Iberdrola ha invertido más de 300 millones de euros en la mejora y ampliación de su red de distribución eléctrica en esta comunidad.
La compañía tiene en esta región cerca de 700.000 clientes y cuenta con una amplia red de distribución, que está formada por más de 60 subestaciones, alrededor de 8.000 centros de transformación, unos 2.500 kilómetros de líneas de muy alta tensión y alta tensión, cerca de 12.000 kilómetros de media tensión y 10.000 kilómetros de baja tensión.
En esta comunidad autónoma, Iberdrola dispone de una amplia presencia tanto en el área de distribución como en la de generación, tradicional y renovable. En los últimos ocho años, la Empresa ha realizado inversiones por valor de 3.250 millones de euros, compras a compañías castellano-manchegas por otros 1.200 millones de euros y ha creado 2.500 puestos de trabajo y miles de empleos indirectos.
INSTALACIONES FUNDAMENTALES PARA EL SISTEMA
Las subestaciones tienen como misión transformar de alta a media tensión la electricidad que llega a las poblaciones. Desde ellas se distribuye esta energía a los centros de transformación, que suministran directamente a las viviendas. Por su parte, los tendidos eléctricos transportan y distribuyen la energía desde las distintas instalaciones, conectándolas entre sí y formando una amplia red de distribución.
Por ello, la función de estos elementos es básica en el sistema eléctrico, por lo que seguir invirtiendo en crear una importante red de distribución es clave para poder asumir el crecimiento de la demanda y continuar mejorando la calidad del suministro.