Iberdrola supera los 90.000 contadores inteligentes instalados en Guadalajara

27/06/2015 - 14:29 Redacción

Iberdrola culmina el mes de junio con más de 340.000 contadores inteligentes en Castilla-La Mancha, instalados en el marco del proyecto STAR (Sistema de Telegestión y Automatización de la Red) que está desarrollando desde el año 2010 en las 10 comunidades autónomas donde cuenta con redes de distribución.

La compañía, que ha modernizado de este modo prácticamente la mitad de todo su parque de contadores en la región con potencia contratada igual o inferior a 15 kilovatios, ha dotado a casi el 92% de estos nuevos equipos de toda su capacidad de telegestión operativa al estar plenamente integrados en los sistemas.

Cuando finalice esta iniciativa, en 2018, y tras realizar una inversión global de 90 millones de euros, los alrededor de 700.000 puntos de suministro a los que da servicio la empresa en esta comunidad autónoma tendrán contadores inteligentes. Asimismo, más de 6.000 centros de transformación también funcionarán con este tipo de tecnología. 

Despliegue de contadores inteligentes a 24 de junio de 2015

Provincia Contadores inteligentes instalados Total contadores
Albacete 148.000 230.000
Cuenca 30.000 143.600
Guadalajara 76.000 90.300
Toledo 87.500 234.000

En España, Iberdrola termina este mes con más de 5,2 millones de contadores inteligentes, lo que supone prácticamente la mitad (49,5%) de todo su parque de contadores con potencia contratada igual o inferior a 15 kilovatios.

A cierre de 2014, Iberdrola superó el programa oficial, definido por el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, que establecía la obligación de renovar para esa fecha el 35% de sus 10,5 millones de equipos. Además, sobrepasó dicho porcentaje de renovación en todas las regiones.

Del total de los equipos sustituidos, más de 4,5 millones de los nuevos contadores, casi el 87% del total, están plenamente integrados en los sistemas con su capacidad de telegestión operativa. Para ello, la compañía ya ha adaptado 25.000 centros de transformación, incorporándoles las funciones de telegestión, supervisión y automatización.

Iberdrola se ha convertido así en una de las primeras empresas del mundo en alcanzar este volumen de contadores inteligentes instalados y conectados, habiendo adaptado, al mismo tiempo, su red de distribución mediante la necesaria incorporación de la supervisión en tiempo real y la automatización.

El proyecto STAR, que supondrá una inversión global por parte de la Compañía en nuestro país superior a los 2.000 millones de euros, finalizará en el año 2018 e implicará la sustitución de más de 10,5 millones de contadores y la adaptación de unos 80.000 centros de transformación.


Efecto tractor de Iberdrola sobre el tejido empresarial

Gracias a la progresiva implantación de las redes inteligentes en España, Iberdrola nuevamente pone de manifiesto su relevante efecto tractor sobre el tejido empresarial nacional, con el correspondiente impacto positivo sobre el mantenimiento y la creación de empleo.

En este sentido, la empresa ha adjudicado, durante los últimos años, contratos relacionados con el proyecto STAR a más de 60 fabricantes y proveedores españoles y foráneos, como AEG, Arteche, Elecnor, GE, Gobesa, Ibérica Aparellajes, Ingeteam, Landis&Gyr, Mesa, Orbis, Ormazábal, Sagemcom, Schneider, Siemens, Sogecam, Teldat, Zigor o ZIV, por un importe que ya supera los 530 millones de euros.

Aparte de cumplir con el programa oficial relacionado con el desarrollo de la telegestión, Iberdrola persigue aprovechar este despliegue para evolucionar tecnológicamente y mejorar su red de distribución de electricidad.

Entre las principales ventajas de las redes inteligentes figuran la integración de la generación renovable, la posibilidad de implantar masivamente el vehículo eléctrico y la mejora en la eficiencia del consumo eléctrico. En este último apartado, permitirán la prestación de servicios de forma instantánea, como la lectura en tiempo real, la tramitación de las altas o bajas de los contratos o la modificación de la potencia contratada.

Además, las compañías pueden supervisar en tiempo real lo que está ocurriendo en la red eléctrica y detectar cualquier tipo de anomalía: si la tensión es o no correcta, si la potencia está equilibrada o si hay pérdidas. Esta información permite que la energía circule de manera más eficiente y mejore la calidad del suministro, al disminuir las incidencias y la duración de las mismas.