Iñaki Arteta presenta el documental El infierno vasco
01/10/2010 - 09:45
A Iñaki Arteta se le quedaron en el tintero muchas de las historias que escuchó de personas que se han visto obligadas a abandonar Euskadi por las amenazas de ETA o el nacionalismo. No las he podido contar por esa falta de libertad que refleja la película, por lo que quiero subrayar el coraje de los que han intervenido, aclara el director, guionista y montador de El infierno vasco.
Las sociedades cobardes son las sociedades porteras. Con mi dinero no han comprado una bala ni se han comido un pincho. Te echan de tu casa y encima dicen que es por tu culpa. Estas son algunas de las frases de las 27 personas que salen en el tercer documental de Arteta, un trabajo centrado en las víctimas que deja patente lo difícil que resulta vivir en un lugar donde existe la amenaza, extorsión, asesinato y presión social. Ante esta situación, más de 200.000 personas en los últimos 30 años han abandonado el País Vasco.
Tensión, miedo, tristeza, cansancio, rechazo y desasosiego en los testimonios de las víctimas que responden a todo el espectro políticos. Están en el documental por defender su libertad de expresión, su integridad, apostilla Arteta, a quien poner en pie esta producción le ha llevado casi tres años de trabajo, tiempo en el que rodó más de 100 horas y entrevistó a cerca de 200 personas, de las sólo quedaron 27. Eran treinta pero tres me pidieron que pidieron que no las sacara, dice el cineasta vasco, que quito importancia a los problemas de distribución que ha tenido este título.
Difícil financiación
El documental no es un género de masas. Sólo se estrena en ocho salas, pero no creo que sea por su temática. Es cierto que no me la quitan de las manos y que has sido muy complicada su financiación. Mi entorno me recomendó que no lo hiciera, pero para mí era una necesidad, indica Arteta, que contó con la colaboración de varias televisiones, entre otras de ETB, que compró los derechos de emisión en virtud del acuerdo que tiene con los productores vascos. ETB compra todo lo que se hace allí, pero no sé si estrenará El infierno vasco, advierte.
Tensión, miedo, tristeza, cansancio, rechazo y desasosiego en los testimonios de las víctimas que responden a todo el espectro políticos. Están en el documental por defender su libertad de expresión, su integridad, apostilla Arteta, a quien poner en pie esta producción le ha llevado casi tres años de trabajo, tiempo en el que rodó más de 100 horas y entrevistó a cerca de 200 personas, de las sólo quedaron 27. Eran treinta pero tres me pidieron que pidieron que no las sacara, dice el cineasta vasco, que quito importancia a los problemas de distribución que ha tenido este título.
Difícil financiación
El documental no es un género de masas. Sólo se estrena en ocho salas, pero no creo que sea por su temática. Es cierto que no me la quitan de las manos y que has sido muy complicada su financiación. Mi entorno me recomendó que no lo hiciera, pero para mí era una necesidad, indica Arteta, que contó con la colaboración de varias televisiones, entre otras de ETB, que compró los derechos de emisión en virtud del acuerdo que tiene con los productores vascos. ETB compra todo lo que se hace allí, pero no sé si estrenará El infierno vasco, advierte.