Inauguradas las nuevas oficinas de la Policía Local en Aguas Vivas, desde donde ya se controla el tráfico
01/10/2010 - 09:45
Por: VIRGINIA BODEGA
La Policía Local de Guadalajara ha estrenado esta mañana oficialmente sus nuevas instalaciones en Aguas Vivas, un complejo de más de 3.000 metros cuadrados útiles, que ha costado más de seis años de trabajo, durante los cuales han ocupado el Ayuntamiento de la capital tres corporaciones distintas, las cuales apoyaron el gran proyecto promovido en primera instancia por José María Bris y su concejal de Seguridad y Tráfico, José Luis Condado, y cuyo coste se ha acercado a los tres millones de euros, financiados entre la administración local y la regional.
Bajo un sol de justicia, los representantes políticos municipales, encabezados por el alcalde de la capital, Antonio Román, y prácticamente todos los miembros de su equipo de Gobierno, una gran representación política provincial y regional, donde destacó la presencia de la consejera de Justicia y Seguridad Ciudadana, Angelina Martínez, y muchos miembros de los cuerpos de seguridad de Guadalajara, fueron llegando a las puertas de la nueva Jefatura, ubicada en pleno barrio de Aguas Vivas, en la avenida del Vado, donde iban siendo recibidas por el intendente de la Policía Local, Julio Establés. Apostados ante la puerta principal de acceso a las nuevas dependencias, y tras la bendición de las instalaciones por parte del párroco de la iglesia de El Salvador, vecina de la nueva Jefatura, Jesús Mercado, y el vicario de la Diócesis, Eugenio Abad, el alcalde, la consejera y el jefe del cuerpo cortaron la cinta de los colores de la bandera española que daba por inaugurada oficialmente la casa de la Policía Local y Protección Civil en la ciudad. Un momento muy esperado por todos los presentes, concejales de Seguridad de las distintas legislaturas, alcaldes, representantes de la Junta de Comunidades, pero sobre todo por ellos, los agentes del cuerpo de la Policía Local y Protección Civil, verdaderos protagonistas de la jornada.
Estrenada simbólicamente la Jefatura tras el corte de la cinta, todos los invitados al acto, más de 200 personas entre políticos, cuerpos de seguridad, ciudadanos, vecinos y amigos, se reunieron en el patio central que dibuja la estructura del moderno edificio, donde ya se encontraban formando los agentes policiales. Algunos ataviados con el típico uniforme de gala, otros con el reglamentario, los 11 futuros policías también presentes, actualmente en la academia de formación, y los miembros de Protección Civil con su habitual atuendo de color naranja, dieron la bienvenida a los invitados, que fueron tomando posiciones en la pequeña plazuela para escuchar los discursos inaugurales.
Tras los discursos inaugurales, los presentes pudieron conocer de cerca las dependencias de la nueva Jefatura. Los agentes de la Policía Local ejercieron de perfectos anfitriones y guiaron a los visitantes por las instalaciones interiores del centro. Oficinas amplias, llenas de luz, dotadas con todas las comodidades, una recepción abierta y bien estructurada, y por último, la joya de la corona, el Centro de Control de Tráfico, situado en la última planta de la Jefatura, que suscitó el mayor interés de la visita.
Estrenada simbólicamente la Jefatura tras el corte de la cinta, todos los invitados al acto, más de 200 personas entre políticos, cuerpos de seguridad, ciudadanos, vecinos y amigos, se reunieron en el patio central que dibuja la estructura del moderno edificio, donde ya se encontraban formando los agentes policiales. Algunos ataviados con el típico uniforme de gala, otros con el reglamentario, los 11 futuros policías también presentes, actualmente en la academia de formación, y los miembros de Protección Civil con su habitual atuendo de color naranja, dieron la bienvenida a los invitados, que fueron tomando posiciones en la pequeña plazuela para escuchar los discursos inaugurales.
Tras los discursos inaugurales, los presentes pudieron conocer de cerca las dependencias de la nueva Jefatura. Los agentes de la Policía Local ejercieron de perfectos anfitriones y guiaron a los visitantes por las instalaciones interiores del centro. Oficinas amplias, llenas de luz, dotadas con todas las comodidades, una recepción abierta y bien estructurada, y por último, la joya de la corona, el Centro de Control de Tráfico, situado en la última planta de la Jefatura, que suscitó el mayor interés de la visita.