Incansable labor para eliminar la nieve y el hielo de las calles
La empresa Construcciones Jesús Cañas e Hijos lleva desde el sábado de la nevada trabajando para quitar los efectos de Filomena.
Ha pasado ya más de una semana desde que la nieve tiñese de blanco todas las calles de Guadalajara. Poco a poco, la ciudad vuelve a la normalidad gracias al trabajo de quienes, con su esfuerzo, están logrando limpiar Guadalajara.
Algunas de estas personas, que llevan desde el mismo sábado de la nevada trabajando sin descanso, pertenecen a la empresa Construcciones Jesús Cañas e hijos. Los trabajadores de esta empresa se ofrecieron al Ayuntamiento de Guadalajara para colaborar con su maquinaria en lo que hiciera falta. Desde entonces y hasta hoy han colaborado con una máquina mixta y tres mini excavadoras en la limpieza de hielo y de nieve de las calles de la ciudad y de varios puntos de la provincia, y es que también han ayudado a municipios como Alovera, Villanueva de la Torre, Camarma de Esteruelas, incluso ha solicitado sus servicios la Universidad de Alcalá.
Jesús Cañas, dueño de esta empresa, cuenta que están limpiando toda la ciudad pero con prioridades: “Lo primero que limpiamos fue el Hospital de Guadalajara, los accesos y el parking, y también los centros de salud. El primer día también limpiamos las calles principales, siempre con la coordinación del Ayuntamiento y del Sescam. También hemos trabajado en fábricas de los polígonos de Marchamalo y de Cabanillas. No damos a basto, estamos trabajando 14 horas diarias y no damos más de si”.
Cuenta Jesús Cañas que entre maquinaria y mano de obra son 12, y que toda la plantilla está centrada en ayudar a recuperar la normalidad cuanto antes, algo en lo que llevan inmersos desde el sábado de la nevada: “Lo primero fue coordinar a todos mis trabajadores, y a partir de las 10.00 horas empezamos a funcionar. Al principio fue difícil porque había trabajadores que estaban aislados y han tenido que quedarse a dormir en mi casa, pero hemos ido todos a una y estamos muy contentos”.
Primero fue la nieve, pero posteriormente el hielo ha provocado también muchas incidencias, y ha sido incluso más difícil de eliminar según cuenta Jesús Cañas: “Con la nieve virgen no había ningún problema, pero en los días posteriores el hielo ha sido problemático. Nosotros empezamos a trabajar a las 07.00 horas con temperaturas bajo cero y el hielo ha dificultado mucho la limpieza. Con el paso del día subían las temperaturas y eso facilitaba a las máquinas el trabajo”.
No se quieren olvidar de la colaboración de otra mucha gente, aunque afirma que “hay de todo, hay gente que lo ha entendido y hay gente que no. Nosotros llevábamos prioridades muy marcadas, y cuando la gente nos pedía auxilio, a algunos les hemos podido ayudar y a otros no porque íbamos al Hospital con las palas a llenar de sal a aliviar los accesos, y eso alguna gente no lo ha entendido, pero en líneas generales muy bien”.
Todo el trabajo merece la pena cuando se reciben agradecimientos por ello, y aunque “el esfuerzo ha sido garrafal”, han recibido el agradecimiento del Ayuntamiento de Guadalajara y de muchos colegios, entre otros. Jesús Cañas reconoce que “estoy muy orgulloso de mi gente y también de mi, ha sido muy bonito”.
En la última semana la llegada del Ejército ha sido un alivio para estos trabajadores, ya que su trabajo se nota, así como la colaboración individual de cada vecino y la mejora del tiempo. En este punto, Jesús Cañas comenta que “en estos momentos es cuando te das cuenta de que Guadalajara es muy grande, parece que es pequeña pero tiene muchas calles, y en estas circunstacias se dan prioridad a los accesos, y eso es lo que alguna gente no ha entendido”.
No saben cuánto tiempo más seguirán trabajando, pero mientras haya llamadas pidiendo su ayuda, Jesús Cañas afirma que las seguirán atendiendo.