La AECC traslada su sede a la antigua Escuela de Enfermería

Una cuestión de ahorro económico había llevado desde hace tiempo a la AECC a replantearse su continuidad en la sede de la plaza de Santo Domingo, donde llevaban 18 años prestando servicios a la población y luchando contra el cáncer. El alquiler de esta sede suponía el 20 por ciento de su presupuesto, la misma cantidad, por ejemplo, que invertían en los seguros sociales de sus tres trabajadoras con nómina o la aportación de la totalidad de sus socios. El 12 por ciento lo dedican a investigación. Con estas cifras, el presidente de AECC Guadalajara quiere ejemplificar el “peso” que suponía el alquiler para la agrupación. El delegado de la Junta en Guadalajara, Porfirio Herrero, fue el que, finalmente, puso solución a su necesidad y quien les ofreció la alternativa de tener su sede en la antigua Escuela de Enfermería de Guadalajara –junto al centro de salud Gu-Sur o Ferial–, concretamente, en la planta cuarta. Según explica Téllez, “estos despachos se arreglaron cuando pasó lo del tema de la gripe A para tener a posibles pacientes, pero luego no llegaron a usarse y desde entonces están vacíos. Nos han venido estupendos”. Desde el pasado 25 de octubre, sus trabajadoras y voluntarios trabajan en esta sede, compuesta por varios despachos y una sala de reuniones compartida, para realizar una labor basada, principalmente, en el apoyo psicológico a los pacientes de cáncer y a sus familias, en la orientación, la información, la sensibilización, la atención más humana a los enfermos –desde el Hospital Universitario– y la contribución a la investigación de tratamientos contra el cáncer. Yolanda, Patricia (las dos psicólogas) y María José, la secretaria trabajarán a partir de ahora permanentemente en esta sede, junto a el presidente, Fernando Téllez y la vicepresidenta y presidenta del Área Social, Juanita Caballero, en horario de 8.30 a 15.00 horas, aproximadamente. El horario se ha modificado levemente con respecto al que tenían en Santo Domingo, puesto que tiene que coincidir con el horario propio de la antigua Escuela de Enfermería. En ésta antiguamente tenían, algunos días, horario de tarde. Para los pacientes que necesitan atención de tarde se ha previsto la habilitación de despachos en el Ferial que, por las tardes, están desocupados, a fin de que las psicólogas puedan atender allí a los pacientes en ese horario. Una de sus dos psicólogas, además, pasa consulta dos días por semana en el Hospital Universitario en casos puntuales de “primer impacto”, como explica el presidente de AECC. También en el Hospital trabaja una voluntaria, Patricia, todos los días, encargándose del “lado más humano” de la atención a los pacientes con cáncer, explica Téllez. La vicepresidenta de la AECC, Juanita Caballero, agrega que para ellos, en principio, ha sido un “gran cambio” que tendrán que asumir poco a poco, puesto que han sido muchos años situados en pleno corazón de la capital. No obstante, consideran que las instalaciones cumplen con creces con sus expectativas iniciales. La mudanza no fue fácil. Tuvieron que desplazar 18 años de documentación y recuerdos y, también, hacer limpieza de lo superfluo para instalarse en el nuevo edificio. “Todos los cambios cuestan, estábamos acostumbrados a estar allí y el sitio era muy céntrico para todos, pero hay que comprender que con los problemas que hay, estaremos mejor, incluso los pacientes o sus familiares para aparcar”. En su lugar, en Santo Domingo han colocado un cartel informativo para quienes aún no han conocido la noticia de su traslado. Fernando Téllez, presidente de la AECC, tiene muy claro que se abre una nueva etapa para la asociación, no sólo por el cambio de ubicación, sino también por el objetivo de ampliar su alcance por toda la provincia, algo en lo que ya lleva trabajando desde que fuera nombrado presidente a principios de 2010.