La Agrupación musical de Tórtola vence en el XVIII Concurso de Villancicos 'Ciudad de Guadalajara'
Villanueva de la Torre casi hace pleno con dos premios y una mención especial.
Este domingo, el XVIII Concurso de Villancicos Ciudad de Guadalajara supuso el inicio de la época más mágica del año. Así quedó demostrado en el escenario del teatro auditorio Buero Vallejo, que se llenó para disfrutar de la actuación de los 13 grupos participantes, y un decimocuarto, la ronda de Lupiana, que venció el año pasado y actuó fuera de concurso.
El primer premio, dotado con 500 euros, fue a parar a la Asociación musical y folclórica Santa Catalina de Tórtola de Henares, que intepretó el villancico El aguinaldo. El tema, recuperado del pueblo, convenció al jurado y al público, que disfrutó con la puesta en escena de los 17 miembros del grupo, que portaron guitarras, laud, bandurrias, zambombas, pandero y percusión. Este premio fue, en definitiva, un broche de oro a los 30 años de historia del grupo, en el que hay hasta miembros de tres generaciones de una misma familia.
El segundo premio y sus 250 euros se los llevó el coro de la parroquia Nuestra Señora de la Asunción de Villanueva de la Torre. Cuando se dio a conocer el nombre de los subcampeones se dejó oír en el auditorio un gran aplauso y gritos de alegría de los 21 miembros y sus familias. Con pantalones vaqueros, camisa blanca y bufanda verde, los músicos y cantantes subieron al escenario para interpretar ¡Qué bien con los tres!, un tema que sonó así: Nieva en Belén, todo está dormido. Llora el niño Dios, porque tiene frío (...) Corre San José a tapar al niño, llegan al portal, muchos pastorcillos. Además de la originalidad del villancico, llamó la atención la presencia de un ukelele, el único que se vio en este concurso. A él se sumaron guitarras, zambombas, cascabeles, botellas, castañuelas... En definitiva, todos los instrumentos tradicionales de esta época.
Los 100 euros del tercer premio se entregaron a la Agrupación musical de Pareja gracias a una original interpretación con música y baile del villancico Los pastores y las zagalas. Niños y mayores, vestidos de aldeanos, hasta sumar un total de 10, subieron con alegría a recoger un premio merecido por la valentía de mezclar las dos artes.
El premio para el grupo joven, también dotado con 250 euros, fue para el coro parroquial infantil de Villanueva de la Torre. Sin duda, este municipio del Corredor estuvo de enhorabuena, ya que coparon dos de los premios importantes. Eso hizo que en la foto de familia con la placa y el jurado también estuvieran presentes los mayores del coro, con el fin de celebrar todos juntos el veredicto. En esta ocasión, los pequeños de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción convenció gracias al villancico Nana al niño Jesús, en el que no faltaron las guitarras, el triángulo, las castañuelas y las panderetas.
Y sin alejarnos de Villanueva de la Torre, el jurado quiso destacar una mención especial a la Coral de Villanueva de la Torre dirigida por María Ángeles del Amo, “por su originalidad en la adaptación y los instrumentos. Este grupo de 29 personas jóvenes y adultas interpretaron Es de María. Se trató, sin duda, de uno de los villancicos más diferentes. Se alejaba de los sonidos tradicionales del folclore para parecerse más a una canción de Disney con una hermosa letra a veces cantada en solo por una de las pequeñas integrantes de la coral. Asimismo, el sonido de un violín transportó al público a lugares mágicos. Ésta es una noche especial, se destila alegría. Ese niño lo quiero besar, ¿puedo María?