La CEOE acusa al Gobierno de romper el diálogo social

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: EUROPA PRESS
Díaz Ferrán pide recuperar el diálogo social en septiembre “sin perímetros ni líneas rojas”
Reabrir la mesa del diálogo social el próximo mes de septiembre y plantear una negociación “sin perímetros ni líneas rojas”. Esta fue la petición al Gobierno y a los sindicatos realizada por Gerardo Díaz Ferrán, presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), en su primera comparecencia ante los medios después de que el presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, diese por finiquitado el diálogo social por la actitud de los empresarios.
Tras estas declaraciones, el ministro de Trabajo dijo a la CEOE que son precisos documentos y no solo negociaciones y el secretario de Estado de Seguridad Social calificó sus palabras como una “carga de profundidad” contra el diálogo.
“Vamos a trasladarle al Gobierno y también a los sindicatos que tenemos que volver a sentarnos en septiembre para iniciar un diálogo social constructivo que sirva para que la economía se recupere de su maltrecha situación”, manifestó Díaz Ferrán en una rueda de prensa posterior a la reunión extraordinaria que celebró la Junta Directiva de la patronal para analizar la ruptura del diálogo social. Asimismo añadió que la CEOE “nunca ha puesto cortapisas” a la hora de negociar.
En este sentido, el líder de la patronal acusó al Gobierno de haber sido él quien ha roto el diálogo social, porque los empresarios nunca han renunciado a llegar a un acuerdo. “Nosotros no nos hemos levantado de la mesa de negociación, ya advertimos que nunca lo haríamos. Ha sido el Gobierno el que lo ha hecho. Nos hemos quedado solos”, aseveró. De hecho, Díaz Ferrán se mostró convencido de que si se hubiera seguido negociando, pero “sin líneas rojas”, se habría producido un acuerdo.

Propuestas imprescindibles
Por otro lado, también negó que la patronal haya planteado en algún momento el despido libre o la supresión de la defensa jurídica de los trabajadores, acusaciones que se según Díaz Ferrán se han hecho desde el Gobierno y son “falsas”. Por ello, defendió que lo que han hecho los empresarios ha sido presentar un conjunto de propuestas, con especial incidencia en las reformas estructurales, que consideró “absolutamente imprescindibles” y urgentes. Puesto que estas propuestas eran conocidas desde hace más de un año, Díaz Ferrán se mostró sorprendida de que ahora se les reproche que hayan cambiado los perímetros de la negociación.
Al ser preguntado por la simpatía del Ejecutivo hacia una de las partes de la negociación (los sindicatos), el líder de la CEOE llegó a suscribir las palabras que minutos antes había pronunciado su vicepresidente, Santiago Herrero, que aseguró que las negociaciones no tuvieron “ni árbitro ni moderador”, porque el Gobierno era “forofo” de uno de los equipos. Sobre otra de sus propuestas, la de rebajar cotizaciones, Díaz Ferrán señaló que el planteamiento de la patronal era “flexible” y que en ningún caso se cifraba una rebaja, ya que era un asunto que se dejaba en manos de la negociación. “Pero ni siquiera se pudo hablar de eso, porque el Gobierno al día siguiente rompió el diálogo. Nunca se llegó a tratar nuestro documento”, se quejó antes de añadir que el Ejecutivo sabía cual era la cifra asumible para la patronal. Finalmente, el presidente de la Confederación también criticó a quienes han puesto en duda la “independencia, autonomía y representatividad” de una organización tan longeva y participativa como la CEOE. “Quienes cuestionan eso hacen un absoluto ejercicio de demagogia”, denunció. Tras la petición de la patronal de recuperar el diálogo social durante el próximo mes de septiembre, el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, desconfió de las declaraciones de la CEOE y consideró que para volver a convocar la mesa hace falta una “base documental” y una “voluntad explícita de acuerdo” y no sólo declaraciones. “Si algún día se sientan, que sea para buscar ese mínimo común denominador y no partir de posiciones que son irrenunciables, porque eso es lo que ha hecho imposible el diálogo”, aseguró Corbacho ante los medios tras presidir la toma de posesión de altos cargos de Trabajo e Inmigración.

En cualquier caso, el ministro agradeció esta llamada de la patronal así como la puerta abierta dejada ayer por el secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, al considerar cerrada sólo una fase del diálogo social. Y es que a su juicio, “está bien” que los agentes sociales “sean conciliadores en sus manifestaciones en lugar de recriminarse”.

No obstante, para finalizar, Corbacho pidió tiempo al considerar que el tema está muy reciente. “Dejemos pasar el mes de agosto y en septiembre tendremos más datos para pronunciarnos”, dijo. Mientras tanto, garantizó que “el Gobierno irá tomando las medidas convenientes y oportunas en función de la crisis”.

Por su parte, el secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, tampoco tardo en responder a las palabras de Gerardo Díaz Ferrán, a las que definió en un comunicado como “una nueva carga de profundidad contra el diálogo social”. En este sentido, indicó que son “el lógico colofón de un proceso que la dirección de CEOE ha gestionado en forma muy desafortunada, desde el principio hasta el final”.

“Si (Díaz Ferrán) cuando habla de retomar la negociación sin perímetros ni líneas rojas está sugiriendo discutir medidas que lesionen los derechos de pensionistas y trabajadores, que vayan en contra del Pacto de Toledo o que alteren los equilibrios presentes en el Estatuto de los Trabajadores, reincide en la equivocación”, prosiguió. En este sentido, el secretario de Estado reafirmó que el compromiso del Gobierno con el sistema de pensiones y con los derechos básicos de los trabajadores está fuera de discusión. Por ello, finalmente, pidió al presidente de CEOE que “deje de enredar y busque una forma de arreglar lo que ha estropeado”.