La deuda familiar cae a su nivel más bajo en cinco años

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Continúa la senda de desaceleración iniciada en 2006. La deuda hipotecaria de las familias españolas registró el pasado año una nueva cifra récord, al llegar a los 646.121 millones de euros, pero su ritmo de crecimiento en este periodo, del 13,2%, siguió la senda de desaceleración iniciada a lo largo de 2006 y creció al menor ritmo de los últimos cinco años.
Los últimos datos del Banco de España también muestran una desaceleración de los créditos al consumo que se redujeron en más de seis puntos respecto a 2006.
La deuda de las familias españolas por compra de vivienda registró en diciembre un nuevo récord, superando por octavo mes consecutivo los 600.000 millones de euros. Así, la deuda hipotecaria de los hogares es más del doble que la contabilizada en 2003, cuando se situó en 300.000 millones de euros.
Con todo, el menor ritmo de crecimiento del endeudamiento familiar está en línea con la desaceleración de los precios de la vivienda iniciada en 2006. Así, la vivienda libre se encareció un 4,8% en 2007, al situarse 2.085,5 euros por metro cuadrado al cierre del ejercicio, lo que supone el nivel más bajo de la última década, según datos del Ministerio de Vivienda.
El Banco de España señala en su última 'Encuesta sobre Préstamos Hipotecarios', que el endurecimiento de las condiciones de oferta de crédito en España, principalmente en las operaciones realizadas con empresas y con los hogares para la adquisición de vivienda, continuó durante el último trimestre de 2007.
El informe señala que la demanda disminuyó de forma generalizada, pero con mayor intensidad en la financiación para la compra de inmuebles por parte de las familias, y que cayó, por encima de los esperado, en las peticiones de fondos de las sociedades.
De cara a 2008, las entidades anticipan un endurecimiento adicional de las condiciones de oferta de crédito a las familias y a las empresas, así como una nueva reducción de la demanda, aunque los cambios en la oferta serán algo menores que los registrados durante los últimos meses de 2007.
Este endurecimiento del que advierten las entidades financieras tiene un motivo claro. Y es que, desde que estallara la crisis subprime en el verano del año pasado, los préstamos entre entidades se ha convertido en una misión complicada y los bancos y cajas no quieren correr riesgos. Además, el aumento de la tasa de morosidad también sirve de alarma a estas entidades.
Ayer se conoció que el índice de morosidad de los créditos concedidos por bancos, cajas de ahorros y corporativas a particulares y empresas ha subido en diciembre, por sexto mes consecutivo, hasta el 0,837% del total de la cartera crediticia. Por lo tanto, a 31 de diciembre, los tres tipos de entidades mencionados acumulaban un total de 14.162 millones de euros en créditos considerados de "dudoso cobro", dentro de un volumen total de 1,691 billones de euros en préstamos concedidos para cualquier fin, no sólo hipotecario.
Y no solo se moderó la deuda hipotecaria el pasado año sino también los créditos que se solicitan para productos de consumo. Así los españoles aumentaron este tipo de créditos un 11,2% en diciembre, lo que supone casi dos décimas menos que en el mes anterior y más de seis décimas menos que en el 2006, lo que supone la tasa más baja en lo que va de año, con un saldo de 228.017 millones de euros.