La Dulzaina trae a la capital recuerdos de tiempos pasados

12/09/2015 - 13:56 D.Pizarro

Las calles de Guadalajara volvieron a dejarse envolver del folclore. Pero ahora resurge con más fuerza que nunca para hacer ver a las nuevas generaciones la riqueza cultural que atesora la provincia. Esta demostración recayó, un año más, en la Dulzainada, un acto tradicional en unas fiestas que de esta forma acercan los pueblos a la capital.

El reloj marcaba las 12.00 horas de este sábado cuando los dulzaineros se fueron concentrando en la plaza de Santo Domingo. Fueron unos momentos de encuentros, de saludos entre amigos que hacía tiempo que no se veían. Pero a fuerza de participar un año tras otro en este evento musical, las distintas agrupaciones musicales se conocen y se admiran, sabedores que que comparten la pasión por la música tradicional. Y allí que se presentaron los ocho grupos participantes de este año: Villaflores, Mirasierra, Mahurotos, Kalaberas, Guadalajara, Dulzanares Folk, Pico del Lobo y La Travesaña.

Los dulzaineros Pico del Lobo llegaron a la capital con cinco miembros –tres dulzainas, un tambor y un bombo–, con un repertorio de dulzaina castellana de la provincia de Guadalajara. “En nuestros seis años como grupo hemos querido recuperar el folclore”, señalaba Alberto Bernal. Sus componentes proceden de la capital, Azuqueca, Sigüenza y El Cardoso de la Sierra. Por su parte, José Luis Gismera, de los Kalaberas, llegó con otros siete compañeros. Entre el repertorio que desplegaron por las calles capitalinas no faltó el pasacalles José María. “Es la primera pieza que nos enseñan en la escuela de dulzaina”, recordaba. Sobre este encuentro, asegura que es un momento “muy bonito, pues nos juntamos un montón de gente de Guadalajara, pero también de Madrid e incluso otros años han venido de Soria, Aragón o Valencia”. Dulzanares Folk está formado por músicos de Guadalajara y de diferentes pueblos.

 En cuanto a los Gaiteros de Mirasierra, Antonio Garrido recordó que llevan más de 20 años asistiendo a la Dulzainada de las Ferias y Fiestas de Guadalajara. Junto a ellos, los más veteranos son Los Mahurotos y los Dulzaineros de Guadalajara.

Antonio Trijueque es uno de los cuatro miembros de los Mahurotos, grupoq ue nació en 1999 en homenaje al tío Maroto, dulzainero de Piqueras de comienzos del siglo XX del que se han rescatado numerosas partituras de este instrumento. “Antes éramos más gente, pero trabajamos y poco a poco se fueron retirando”.